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Que una banda como Sôber sea capaz de llenar una Apolo como lo hicieron el pasado 10 de Mayo, con la que está cayendo en el mundo de la cultura y el espectáculo, es más que digno de admiración y elogios. Pueden gustar o no, pero es innegable que los de Madrid en Barcelona han tenido y siguen teniendo mucho tirón. Venían con su recién “Letargo” bajo el brazo para demostrar que Sôber siguen siendo los que eran, cuatro animales de directo que no dieron respiro durante casi las dos horas que duró su concierto. Texto: Jero García Fotos: Irene Serrano |
Para su visita en su último concierto de la primera parte del “Letargo Tour 2014” como teloneros invitaron a los murcianos Darknoise que venían a presentar su también recién estrenado “Kronos”. Diez minutos antes de las nueve de la noche y tras una intro a un volumen sórdido saltaban al escenario Darknoise con ganas de comerse el escenario, aunque sinceramente hubo momentos en los que se les quedó bastante grande.
No faltaron los saludos a los familiares venidos desde la región murciana para ver a sus retoños en acción. La propuesta musical de Darknoise se mueve en sonidos tan característicos de bandas como los extintos Skizoo o los mismos Sôber.
Tras 45 minutos los cuales sirvieron para caldear el ambiente de una Apolo aún por acabar de completar su aforo, tocaba el turno de Sôber. Mientras los murcianos desmontaban su equipo pudimos ver a Alberto Seara, mánager, productor, técnico de sonido y casi quinto miembro de Sôber ( solo le falta salir a tocar ), controlando cada centímetro del escenario para que nada pudiese interferir una vez la banda estuviera dándolo todo. Todo blanco, muy blanco, acorde con el artwork de “Letargo”, desde el parche del bombo, el pié arácnido de micrófono o las guitarras. Imagen cuidada, muy cuidada, cosa que se echa en falta en muchas bandas y que aportan aún más al directo.
Así pues a las 21:40, tal y como estaba anunciado y con puntualidad inglesa, saltaban al escenario los 4 músicos flanqueados por varias pantallas en los laterales dónde fueron proyectando imágenes acordes con los temas del set-list elegido,donde el kit de batería del enorme Manu Reyes sobresalía por encima de todo. Sonido apabullante para comenzar con “Sombras” dónde ya tenían a todo el público en el bolsillo, coreando cada una de las frases del tema que sirvió para la vuelta activa de la banda después de aquel parón tras grabar “Reddo”.
Con un tema ya finiquitado, se intuía que iba a ser uno de los mejores conciertos que iba a dar la banda en Barcelona, que no son pocos. En “La araña”, Carlos Escobedo se luce con sus dotes interpretativas, aportando al tema con nuevos matices vocales que pueden enriquecer o no el tema, eso ya lo decide el espectador…
Después de “La araña”, le tocó el turno a “Eternidad” de su, para mi, el mejor disco de Sôber, “Paradÿsso” en el que tanto Jorge Escobedo como Antonio Bernardini ( con su ya más que comentada pérdida de peso ) hicieron un trabajo milimétrico a las guitarras, y es que aparte de su técnica es envidiable el estado de forma en el que se encuentran ya que no dejaron de correr y moverse enérgicamente durante todo el concierto.
Seguidamente tocaba presentar por fín “Letargo” en directo, y la banda a parte del single “Blancanieve”, ha apostado, creo, por “Mañana” como el tema que opta para quedarse para siempre en el repertorio. El tiempo dirá si sobrevive o no. Impresionante la distorsión de guitarra que han conseguido en este tema.
“Diez años” como era de esperar fue un cañonazo, con una Apolo desgañitándose en cada palabra. Sôber a estas alturas ya estaban más que en las nubes.Unas lineas de bajo daban paso a “Letargo” con una velocidad incluso inusual en ellos, dónde una vez más el trabajo de las guitarras dobladas fue una gozada. Un tema que da sentido a las declaraciones que Bernardini hizo hace unas semanas en la cual comentaba que era la primera vez que componía tomando apuntes, ya que la estructura compositiva de “Letargo” en general es más compleja que lo que habían hecho tiempo atrás, dando más protagonismo y énfasis a la parte musical y no tanto a la vocal, sin desmerecer el trabajo de Carlos, en absoluto.
Sin avisar y cogiendo al público con el pie cambiado llegó el TEMA de Sôber. “Paradÿsso”.Tema que como bien saben quienes conocen a la banda, sirvió como banda sonora de la película “ Cosa de brujas”. Un clásico atemporal de los madrileños que seguirá estremeciendo allá dónde la toquen.
Primer repaso a “Morfogía” con el clásico “La prisión del placer” el cual sirvió para llevarnos de nuevo hacia el “Letargo” con el cañonazo “Blancanieve” temazo con mayúsculas que hizo vibrar y botar al respetable a ritmo de sus afiladas guitarras y su genial estribillo. A estas alturas Manu Reyes a la batería ya era todo sudor. Bestial el trabajo del cordobés a los platos, de verdad, BESTIAL. Con el paso de los años ha adquirido una técnica y una potencia a la hora de tocar, fuera de lo normal siendo un pilar a día de hoy, básico en la banda.
Ya con “Letargo” más que desprecintado, le tocaba el turno a “Encadenado” tema que como el resto del disco posee unas lineas de guitarras más progresivas acercándose a sonoridades propias de bandas como Tesseract,etc… Otro cañonazo en el que la banda se dejó la piel en cada acorde.
Para finalizar la primera parte del show, Sôber eligieron “Cubos”, dónde Carlos agradeció efusivamente al público asistente por abarrotar Apolo, y “Arrepentido” dejando al público lógicamente con ganas de mucho más. Y quedaba más, mucho más.
Tras cinco minutos de relax entre bastidores y con las luces a medio encender salió Carlos Escobedo armado con su guitarra acústica deleitándonos con “Naufrago” en formato acústico dónde los coros los hizo el respetable mientras Jorge y Antonio ponían el broche final con sus guitarras distorsionadas. Buena manera de empezar con los bises, sinceramente.
Ultimo guiño a “Letargo” con “Insecto” en esta noche de metal con Ñ donde a esas horas sudaban hasta las paredes.Tras la celebradísima “La nube”, dónde los madrileños alcanzaron en su día un gran reconocimiento por parte de los medios de este país, hubo un segundo y último bis, el cual lo conformaron para despedir “El hombre de hielo”, “Tic, Tac” y como no “Loco” que hizo temblar los cimientos de la Apolo.
Como no y aún con la adrenalina por las nubes hubo la ya típica foto de rigor de la banda con el público detrás suyo previo salto hacia las cabezas del público por parte de Carlos Escobedo que estaba satisfecho como hacía tiempo no se le veía por aquí.Casi dos horas de una de las mejores descargas que se recuerdan de los madrileños en Barcelona, sin duda.
Texto: Jero García
Fotos: Irene Serrano
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SET LIST SÔBER @APOLO BCN
1.Sombras
2.La araña
3.Eternidad
4.Mañana
5.Diez años
6.Letargo
7.Paradÿsso
8.La prisión del placer
9.Blancanieve
10.Encadenado
11.Cubos
12.Arrepentido
–
13.Náufrago
14.Insecto
15.La nube
–
16.El hombre de hielo
17.Tic tac
18.Loco
