Anvil presentan nuevo trabajo discográfico (el número catorce si mal no recuerdo) con muchas cosas que demostrar tras su flojo “This Is Thirteen” y su inexplicable y absurdo documental carente de mucha lógica, pero que indudablemente les dio una gran popularidad.

No obstante, muchos de los fans mantenían un cierto escepticismo ante lo que nos podríamos encontrar en este nuevo trabajo ya que tanta popularidad hacía que hubiese un cierto miedo para que abandonasen la senda tan propiamente heavy que han seguido todos estos años.

Afortunadamente el resultado es satisfactorio, y es que la chispa compositiva se ha vuelto a encender. Es probable que este trabajo no pase a la historia como el mejor, pero sí que merece un buen puñado de escuchas y que no se encuentra a mucha distancia de sus mejores trabajos. Quizás supere todo lo hecho en los últimos 10 – 12 años, quizás junto con el Speed of Sound.

El disco es puro heavy metal, sin concesiones ni apenas rellenos (exceptuando quizás Paranormal que me parece más una sobra que un tema merecedor de aparecer en el disco), con una gran calidad que demuestra que quien tuvo retuvo y no se les ha olvidado hacer heavy metal, ni muchísimo menos.

Se nota la esencia de Anvil durante todo el disco, a excepción del anteriormente citado Paranormal o Swing Thing, tema más Swing y Jazzero, pero con las guitarras muy roqueras y distorsionadas. Es un tema muy cachondo, con unos vientos que pegan muy bien.

Muy grata sorpresa me he llevado con este tema, que quizás los más heavys del lugar no mirarán con tan buenos ojos. Pero en este tema demuestran el buen hacer compositivo y de cada uno de los instrumentistas. Gran cierre.

El resto de temas sí son más heavys, tal y como lo concebimos actualmente. 12 cañonazos más con ese ritmo acelerado en su justa medida, como el tema que abre el trabajo Juggernaut Of Justice o When Hells Breaks Loose con Robb machacando con un doble bombo contundente y milimétrico en uno de los temas que más energía transmiten.

Tras estos dos temas, echan el freno en un medio tiempo pesado y contundente, con unas líneas vocales muy Motorhead, muy cabreadas y un estribillo que vendrá bien para la gente en directo mientras se agitan las cabezas al compás. Gran tema este “New Orleans Voodoo” sin duda.

Volvemos con On Fire a otro de esos temas speedmetaleros con Robb cual metrónomo y un estribillo de la vieja escuela, corto pero con gancho y una guitarra machacona pero sobre todo efectiva.

“Fuckin’ eh” es quizás el tema más diferente. Muy influenciado por riffs de Motley Crue, o grupos de esa onda. Una guitarra más macarra, hard rockera y desenfadada. No obstante, el puente y el estribillo dan cera de sobra, pero sí que de primeras pueda sorprender a propios y extraños.

Mención especial a Lips en este solo y en todo el disco, mostrándose a un nivel altísimo en los solos y en los riffs. Pero el solo de Fuckin eh es desgarrador, veloz, de esos que dan pie a hacer headbanging a la par que imitas a tu guitarrista preferido. Sin embargo, “turn it up” vuelve a los sonidos más veloces, en un tema corto pero sobre todo muy intenso que gira entorno a un estribillo machacón pero gritable y coreable 100%.

Por terminar el repaso de algunos de los temas que nos encontraremos, quiero también destacar Conspiracy, tema quizás más pausado, pesado y con pegada que me ha encandilado, y que sorprende por el uso esporátivo de un cencerro como si se tratase de una batería más rockera, en contraste con algunos breaks de batería descomunales y es que en este tema Robb se vuelve a salir, siendo un metrónomo en potencia.

En cuanto al sonido y masterización del disco, solo se les puede felicitar abiertamente, ya que estos canadienses han conseguido sacar un sonido sucio, macarra, pero con cuerpo y donde las nuevas tecnologías han estado al servicio de los sonidos más clásicos. En todo caso, tiene un sonido que no hubiese desentonado hace 15 o 20 años.

Espacio aparte merece Glenn Five y su bajo matador, que hace que se te meta por dentro, que lo sientas y que resuene. Por otro lado consigue llenar los temas, para que la labor de Lips no se quede quizás demasiado flojo. Gran muro rítmico que han conseguido crear. ¿Y la voz? Pues como nos tiene acostumbrados. Mucha mala hostia, mucho carácter y suficiente calidad hace que se mantenga en un nivel bastante aceptable, sin que se observen cambios sustanciales de las líneas vocales de hace 15 años.

En definitiva, y sin riesgo a equivocarme, considero este Juggernaut Of Justice un trabajo que sí hace justicia a la trayectoria de los canadienses y espero que tenga el reconocimiento por parte de los fans que al fin y al cabo son los mejores jueces que puede existir, especialmente de un grupo que lleva tanto tiempo luchando en la escena underground internacional y que tiene una buena legión de fans que les apoya a pesar del poco reconocimiento que han tenido hasta ahora.

Belch

Temas:
01. Juggernaut Of Justice
02. When Hell Breaks Loose
03. New Orleans Voodoo
04. On Fire
05. Fuckin’ Eh
06. Turn It Up
07. The Ride
08. Not Afraid
09. Conspiracy
10. Running
11. Paranormal
12. Swing Thing