Con motivo de los conciertos de ayer y hoy junto a Jared James Nichols, hace unos días entrevistamos a Montana Stomp para conocerlos un poco más y que nos presenten su propuesta sureña y llena de fuerza… La banda nos cuenta todo en las siguientes declaraciones…

David Aresté


M.S: Hola a todos, es un placer que estéis por aquí, ¿Qué tal estáis?

Muchísimas gracias por dedicarnos este rato, ¡gracias a vosotros!

Estamos ya contando los días para volver a los directos, así que muy felices.

M.S: Para quien no os conozca comentadnos como se forma la banda, quién la forma y como os apañáis con eso de estar unos en Zaragoza y otros en Elche….

Montana Stomp surge hace unos años, después de que los cinco llevásemos mucha carretera a la espalda con proyectos diferentes tanto con artistas como con versiones.

La necesidad de crear nuestra propia música, de compartir realmente nuestro sonido y expresarnos de un modo libre ya era algo que nos ahogaba.

Nació de un modo natural porque algunos nos conocíamos, pero un desencadenante tremendo fue el hecho de tener una visión común y compartir gustos. La embestida comenzó después de una reunión para hablar del proyecto que terminó en una jam que casi acaba con nosotros. Una explosión, como cada vez que nos miramos a los ojos y tenemos un instrumento en las manos.

No vamos a mentir, a nivel logístico no es lo ideal, pero es algo tan asumido ya que para nada es un impedimento. Solo un tiempo de espera hasta que los cinco vivamos en el mismo lugar. (Que puede ser tanto Zaragoza como Nashville… who knows!)

M.S: Son muy representativos también vuestro nombre y vuestro búfalo emplumado de vuestro disco, contadnos el significado de todo el concepto…

La energía, amigo. Es el poder de pensar en línea recta. El nombre es en parte por Tony Montana (Scarface). Desde cero, de la nada, conseguir crear algo propio con tus manos, es algo que conceptualmente va mucho con nosotros. La ilustración de la portada es obra de Javi, un trabajo al que le guardamos un cariño tremendo.

Es obvio que en nuestro caso hablamos de música, no de contrabando, aunque hoy día la línea entre lo legal y lo underground tampoco es tan tangible en esta industria, un tema que da para largo si hablamos de la legalización y reconocimiento de los músicos en términos legales.

La segunda parte del nombre, Stomp, hace referencia a las patadas, el no conformismo, una declaración de intenciones “Parar no es una opción”… sin olvidar las coces de nuestra vocalista, deberíamos añadir (risas)

M.S: Tardó también mucho vuestro primer disco, decidnos como fue el proceso de grabación…

Ha sido un parto complicado, queríamos tener la seguridad de que representaba al tres mil la identidad sonora de la banda. Fueron años de viajes de un punto a otro, de ensayos intensivos, reuniones online, trabajos a distancia y muchísimo esfuerzo. Una prueba de lealtad y de compromiso que casi nos cuesta la vida personal en algunos momentos.

No era un puñado de canciones sin más. Era un riesgo, una apuesta con muchísima inversión en más de un aspecto. Tal y como todos sabemos que las mezclas se abandonan, la elección y cierre de un disco también es un proceso que debe tener un final.

Llevamos los últimos tres o cuatro años conviviendo con imprevistos, entre ellos una pandemia. Muchos de los compañeros de gremio han vivido la misma situación, pero si paras pierdes. Sobrevivimos y nació nuestro primer trabajo homónimo.

M.S: Quizá porque fue autoeditado? ¿Por qué editásteis por esa vía?

La autogestión era el camino que nos permitía tener control sobre los timings y dirección del proyecto. No podíamos esperar más, plantearnos buscar una figura externa que respaldara una banda nacional que canta en otro idioma, con un primer trabajo grabado a instinto y sin producción, crudo y fiel a lo que queríamos representar con él en directo era algo utópico.

Necesitas estar absolutamente seguro de que ese grupo de personas va a apostar tan duro como tú, y es totalmente entendible que poner unas cartas así sobre la mesa fuese a requerir tiempo y trabajo. De lo segundo vamos servidos como bestias siempre que se necesita, pero el tiempo era algo arriesgado.

M.S: A principios de año os vimos presentar esos temas con Jared James Nichols, ¿Qué recuerdos tenéis de esos conciertos?

Nunca tendremos suficiente espacio para hablar de este tema. Los conciertos con Jared en Barcelona y Madrid fueron una plataforma de entrada a los ojos y oídos de muchas personas, todo gracias a Etin Produccions, a Phil y por supuesto a Jared, the man, himself.

El ambiente de trabajo esas noches fue maravilloso. Charlas sobre cómo entendemos todos la música, y ver trabajar un enjambre que no para y empuja con la misma filosofía que nosotros (la de no perder la pasión por lo que haces) desde la promotora hasta el management y todo su equipo y el nuestro fue muy especial.

Cuando salimos a escena y vimos que las salas estaban repletas en el momento de aparecer Montana Stomp, nos encendimos aún más si cabe. La respuesta de la gente ha sido brutal, y estamos muy agradecidos. Siempre recordaremos esas primeras fechas de un modo muy especial.


M.S: Ahora en su nueva gira repetís en dos fechas, ¿Cómo afrontais esta vuelta del grandullón de Jared?

No creo que podamos expresar de un modo normal lo que sentimos.

Inserta aquí un alarido, el sonido de tres mil toros salvajes colina abajo, la sensación térmica del núcleo de la tierra y los ojos del Cancerbero a punto de abrir las puertas.

Ilusionados y agradecidos es poco. No solo por volver a trabajar con él, que siempre es una lección de humildad y fuerza bruta dentro y fuera de las tablas, sino por sentir que todos vuelven a confiar en nosotros. Eso nos enciende aún más. En esta ocasión tocaremos el lunes 25 en Sevilla y el martes 26 en Málaga, dos ciudades donde aún no hemos presentado el disco.

Sientes que estás haciendo las cosas bien. Play loud, stay humble!

M.S: Además habéis confirmado una fecha en europa… ¿Qué nos podéis contar? Si os habéis estrenado puede haber más, ¿no?

Comenzamos la andadura fuera de España en Octubre, en República Checa. El disco ha funcionado muy bien en Centroeuropa, y estamos muy ilusionados por poder poner cara a las personas que nos escuchan en todas partes.

Nos encantaría poder hacer públicas ya las próximas embestidas europeas, pero en este momento no podemos aún. Va a ser un fin de año bonito, y el 2024 se presenta muy salvaje también.

M.S: Y si hay Europa, ¿por qué no USA? Jared podría ser vuestro padrino, jeje…

Nosotros queremos tocar en cualquier parte del mundo, por supuesto!. En palabras de Tony Montana: “The world, chico, and everything in it”

M.S: ¿Qué os queda hacer hasta final de año?

La última semana de Septiembre está llena de ocasiones para vernos. Estaremos calentando las tablas para Jared James Nichols el lunes 25 en Sevilla (Sala X) y martes 26 en Málaga (La Cochera Cabaret), y después tocamos en la Seagram’s Southern Rock Night en Shannon Torrevieja (Alicante) para seguir camino a Valencia, en Loco Club abriendo para los californianos The Hangmen.

El colofón es disfrutar a tope inaugurando el Festival Internacional de Blues de Cerdanyola el viernes 29.

Octubre es mes de reuniones, ensayos y continuar la composición de los temas del siguiente disco, y volamos a Otrokovice para tocar en el Stetson and Bourbon Fest, como hicieron ya la Steepwater Band o los Skynny Molly, algo que nos ilusiona mucho.

Diciembre también tiene algunas fechas cerradas que estamos deseando compartir con vosotros.

M.S: Hemos llegado al final, si os queréis despedir de nuestros lectores es el momento… Gracias por todo y suerte en los conciertos con Jared.

Una de las cosas que nos impulsa a seguir esforzándonos cada día es recibir tanto cariño por parte de los medios y de la gente. Este es un camino arriesgado, es un minuto a minuto de pico y pala sin recursos, y con mucho esfuerzo.

Cuando leímos la crónica del concierto que hicisteis nos llenamos de orgullo, lo único que podemos deciros es GRACIAS, como siempre, por apoyar de un modo tan brutal la cultura. Siempre gracias.

Como nosotros decimos siempre: ¡Seguimos!

Montana Stomp