Sweden Rock’17 – 7-8 de Junio’17 – Sölvesborg (Norje)
Después de casi coger todos los medios de transporte posibles, llegábamos a Nörje, con el primer día del Sweden Rock ya empezado, así que no había tiempo que perder… nos esperaban cuatro días de buena música y todo lo que os explicamos días atrás… el tute de llegar hasta ahí seguro que merecería la pena.
David Aresté
Como decíamos, este año llegábamos el primer día del festival, dejándonos por el camino el tributo a Led Zeppellin (con el incasable Pontus Snibb a la batería), Art Nation o Lost Society llegando eso si a las locales Heavy Tiger que actuaban en la carpa Rockklassiker Stage… Así que con Helix y Black Star Riders ya sería un buen anticipo para empezar a rodar en el festival. Así que tras intentar pasar por el Sweden Stage donde lo estaban petando Black Ingvars cantando versiones rock en sueco, llegamos a la carpa donde el trío local se disponía a presentar su último "Glitter".
Su pop-punk dejó tiempo para 14 temas en el poco tiempo que tuvieron de actuación haciendo un repaso a sus anteriores discos. La verdad sea dicha que recordando las fotos y la crónica que publicamos de su última gira por España nos esperábamos un concierto bastante más incendiario del que dieron, sobretodo por parte de su cantante/guitarrista Maja que solo se limitó a tocar y ya está, ni saltos, ni poses, ni nada… al lado de Sara al bajo y Astrid a la batería. Sonaron temas como "Feline Feeling", "Saigon Kiss", la propia "Heavy Tiger", "Shake Me" o "Tonight" con la que acabaron.
Esta visto que estaban más concetradas por sonar bien que no por pasárselo mejor, los nervios de jugar en casa les hizo parecer algo que no creemos que sean. Esperamos verlas en mejores condiciones y puedan actuar sin ninguna presión… Con las nubes vigilándonos íbamos a nuestro primer Sweden Stage con una de las motivaciones del festival ya que tocaban Helix, una de las joyas clásicas del festival, y que mucha gente prefirió ver antes que los resurgidos Grave Digger.
La banda de Canadá practicante de un heavy ochentero con aromas de laca nos dejó su propuesta clásica con algunos temas como “Wild in the Streets”, ”Feel the Fire ” o “Never Want to Lose You ”, teniendo “Bastard of the blues” su último disco editado de 2014. La sorpresa y las ganas hicieron más que cualquier otra cosa ya que a mitad del show no transmitían mucho más. Brian Vollmer a las voces no pudo tirar de la banda que iban cada uno por su lado.
En ese mismo momento no nos lo pareció demasiado hasta que vimos a Kix el día siguiente, que fue otra cosa completamente diferente. Vemos que Helix han vuelto a la carretera y siguen haciendo fechas, quizá se transforme en un disco de estudio y después de 3 años consigan hacer más piña y sonar más compactos. En la parte final del concierto de Helix comenzó a llover y aunque se podía aguantar, aquello iba cada vez a más, hasta el punto en el que decidimos saltarnos a Black Star Riders como grupo principal de la noche ya que era una temeridad teniendo 3 días de festival por delante y exponernos a un chaparrón de tal calibre. Con todo el respeto para los fans y la banda no era nada extra del festival, y BSR es una banda que tenemos cada x meses aquí, así que ya os traeremos la próxima descarga de la banda que seguro que es muy pronto.
Dejando la lluvia nocturna atrás, teníamos la esperanza de madrugar para ver a Stacie Collins y no acabar empapados y lo conseguimos en cierta manera, al menos nos dejó ver el concierto. Respecto a la banda fue de los pocos conciertos que se nos pasó en 5 minutos.No entendemos porque una banda como la de Stacie tuvo que entrar en el festival via el concurso de bandas del SRF, si años atrás ya estuvo tocando en el festival y en un escenario más grande y no como este año que tocó en el más pequeño. Pero bueno, suponemos que si un año no te llaman puedes ir vía el concurso. Lo importante es que la teníamos allí para despertar a los más madrugadores del 4sound Stage.
El concierto rayó siempre el máximo nivel con una banda entregada al máximo dispuesta a bailar y contagiar los ritmos pegadizos de sus temas, sonaron “Lost and found”, “Ramblin’” o “King of rock” en la hora de actuación del grupo que como decimos se pasó en nada. El grupo venía con su último “Roll the dice” editado el año pasado. La banda capitaneada por una Stacie incansable cantando y con la armónica, tuvo una genial base rítmica por su pareja Al Collins al bajo y un joven Ryan McCormick a la batería ofreciendo una letal pegada, a la guitarra un Jon Sudbury siempre elegante ponía el toque rockero con sus riffs.
Un gran show con el que la gente se quedó (o nos quedamos) con ganas de más, menos mal que Stacie es una habitual de nuestros escenarios y seguro que se pasará pronto de nuevo por España; De hecho, estará en el próximo festival de Blues de Reus.
Ya estirándose las últimas gotas, nos íbamos al Rock Stage para ver la vuelta de Great king Rat, otra de las joyas que solo los programadores del Sweden Rock pueden conseguir. La banda sueca volvía a los escenarios, tras 27 años de ausencia a presentar sus clásicos ante los más exigentes del festival.
Una gran formación que sonó de lujo dejó el papel más importante (como la mayoría de veces) para Leif Sundin a las voces, que intentó salir airoso de cada uno de los temas pero que no pudo en algunas ocasiones. Como decimos una gran base que se quedó falta de intensidad. Una pena.
En cambio, en el Sweden Stage estaba todo el mundo saltando y coreando los temas de Phil Campbell y sus hijos bastardos. Tras el fin de Motörhead por lo que todo el mundo sabemos, Phil se embarcó en este proyecto con sus hijos, incluso con un EP ya editado via UDR Music y varias fechas realizadas.
La banda muy compacta, y curiosamente uniformada, sonaba como un cañón y como es evidente con ciertas aromas a Motörhead como no podría ser de otra forma, tocando evidentemente muchos temas de Motörhead, “Ace of Spades” o “Killed by death” que todo el mundo celebró y coreó. El repertorio se basó en sus temas propios como “Big mouth”, “Spiders” o “Take aim”, además de los temas de Motörhead que decíamos como “Born to Raise hell”, “R.A.M.O.N.E.S” o “Eat the Rich”.
Deseamos larga vida a esta banda que nos sorprendió por la contundencia de como sonaron, esperamos que Campbell y familia saquen más material para que sigan dando giras y evolucionen como banda.
Seguimos rebotando y nos estrenábamos con el Festival Stage para recibir con un sol de justicia (ellos quizá no se alegrarían tanto, o si) a los fineses Apocalyptica, que estaban dentro de la gira aniversario del Play Metallica by four cellos, así que nos apuntábamos otro show “histórico”dentro del festival. Cerraron pues la presentación de su anterior disco “Shadowmaker” con Franky Perez,el primero al que le ponían voz y que no dejó de ser un “experimento” que les gustó a unos pero no a otros. Sin los típicos tronos que llevaron en su día, o alguna cosa para hacerse ver, una simple tarima con 4 soportes para sentarse, una batería y un telón es lo que necesitaron los finlandeses para su concierto.
Comenzaron al igual que el disco, con “Enter Sandman” y “Master of Puppets” (destacando ese solo realmente delicioso en violoncelo) y fue cuando Eicca nos dijo que estaban dentro del aniversario de su “Play Metallica by four cellos” y que nos teníamos que preparar porque íbamos a ser nosotros los cantantes ya que el set iba a ser completamente instrumental.
Les siguió “Nothing Else Matters”, “Orion” o “Battery”, (ya ayudados por Mikko en algún tema a la batería) hasta completar su actuación bajo el sol abrasador del Festival Stage, aunque eso no hizo que el cuarteto se quedase parado, ya que Eicca y Perttu no pararon ningún momento. “Seek & destroy” y “One” pusieron el punto final a un gran concierto remember, aunque mucha gente esperaron su propio repertorio. La experimentación a veces es necesaria pero Apocalyptica ya tienen su propio sello, esperemos que pronto saquen material nuevo y que se dejen ver de nuevo por aquí.
Tras su paso por el Kalos era irremediable pasarse por el Sweden Stage y ver a correcaminos Gioelli y sus Hardline también en su aniversario de su Double Eclipse. Siempre secundados por el bueno de Serafino Perugino presidente de Frontiers, la banda que le acompañaba eran todos italianos, comandados por el hombre para todo del sello Alessandro del Vecchio.
En su hora de actuación nos dejaron grandes temas de la banda como “Takin’ me down”, “Dr.Love”, “Fever Dreams” o “Hot Cherie” que cantó todo el mundo inducidos por el carisma y el magnetismo de Gioelli, un frontman infravalorado y que quizá debería haber conseguido mucho más de lo que tiene. “Anclado” quizá siempre en los dominios de Rudi Pell nunca ha sabido darle rienda suelta a todo su potencial y poder hacer grandes proyectos de cualquier género, ya que nunca se ha visto que tenga tanta implicación como el amigo Gioelli. Esperemos verle(s) pronto siguiendo editando nuevo material.
Tarde variada sin algo que llevarnos a la boca salvo sus Doro y su repertorio especial de Warlock que nos pilló comiendo después de Hardline, así que nos íbamos ya a las siete de la tarde con la descarga de los progresivos Fates Warning. Interesantes ya que la porción de pastel progresiva del Sweden se residía en ellos y en King’s X (si se le puede llamar progresivo, aparte de que tengan discos con Insideout), sin duda echamos de menos aquel trío del año pasado formado por The Winery Dogs, Steve Vai y Symphony X del último día y que hizo las delicias de los más técnicos.
La banda americana venía a presentar su último “Theories of flight” y que interpretaron “SOS”, “Firefly” y “Point of view” además de otros temas de su carrera. La formación destilando clase a raudales la comandaba Jim Matheos con su guitarra y su señorío a las 6 cuerdas.
Otra de las bandas que no han sabido salir del ostracismo del segundo nivel y que no van más allá de la banda de culto, y lo demostró la poca gente que los estuvo viendo en el escenario pequeño, además de la poca interacción con ellos. Una pena por una institución como Jim Matheos a las cuerdas.
Nuestros compañeros gourmets de “Palabra de rock” nos dijeron que no nos podíamos perder VA Rocks en la carpa, así que haciéndolos caso allí nos fuimos. Siempre hay que pasar por el Rocklassiker para ver que hay y que se cuece, entre veteranos,nuevos y desconocidos.VA Rocks es un power trío de rock clásico de Suecia dentro de las Namis, esas bandas que impulsa el festival poniéndolas dentro del cartel y tocando en la carpa. El año pasado sacaron su anterior “Pull no punches” y fue el que nos presentaron, y la verdad es que tenían o muchos amigos o es que estamos ante la explosión de una gran banda ya que aquello estaba a reventar.
Marcando el ritmo…3,2,1 y te daban una bofetada en la cara, temas directos con garra, descaro y un feeling brutal de manos de la guitarra Ida Svensson que con todo el cariño se come la actitud de las cuatro Thundermother (las de antes y las de ahora) en un riff que sacara por su Epiphone. Como compañeras de baile Klara Wedding al bajo y la brutal y precisa Frida Rosén a la batería que también canta. Sonaron temas de ese disco como “Killing me”, “Bluesman” o “Rockbitch” coreados por la gente a más no poder, todos temas de su primer disco sin recurrir a las típicas versiones para animar al personal.Todos nos quedamos con ganas de más, esperemos que al ser amigas de Pontus de Bonafide les enseñe el circuito de salas que tenemos por aquí y las tengamos pronto por España. Muy a tener en cuenta la verdad, les seguiremos la pista.
Mientras se nos quedaba cara de bobos viendo a VA Rocks Alter Bridge estaban descargando su metal de nuevo cuño en el Festival Stage ante una aceptable concurrencia como prolegómeno a la salida de Aerosmith. Alter Bridge que aparentemente cesó su actividad por la reactivación de la carrera de Slash en solitario editando un disco más (Tremonti por su lado sacó otro disco en solitario) , pero como pasó lo que ya sabemos aquello se volvió a parar… Haciendo una apuesta fuerte por ellos (entendiendo que Roadrunner es un sello más importante y que tiene un target más adecuado para AB), Napalm Records apostó por ellos y les editó este último “The last hero” que llevan presentando todo este tiempo y que también presentaron en Suecia.
Sonaron “Open your eyes”, “ Rise Today” además de “Metalingus ” o “Show me a leader” que fueron bien recibidos por la multitud. Miles siempre agusto con Tremonti de escudero disparan sus riffs compactos y directos ante una buena base rítmica junto a la voz de Keneddy que sigue creando opiniones para todos los gustos. Momento dulce para los americanos , que vuelven donde lo dejaron con algunas fechas este verano como teloneros de Aerosmith y anunciando shows especiales en Londres con Orquesta y que ya han hecho sold out, siguen en plena forma Keneddy y sus muchachos.
Llegaba el plato fuerte del día, desde Boston y tras 47 años dando guerra Aerosmith cierran el chiringuito con este Aerovederci Baby por toda Europa y que tuvo parada en este Sweden Rock. Mucho se ha hablado de despedidas, y hemos visto muchas… o al menos intentos de ellas, aunque si se han materializado dos, la de Mötley Crüe y la de Twisted Sister. Tras un “Music from another dimension” que no supuso nada para la banda, fue el último disco del grupo de material propio tras 11 años de aquel anodino Just Push Play, Steven Tyler sacó un disco en solitario, participó en programas de televisión como jurado y la banda como decíamos seguían sin hacer poco más que alguna gira americana, e incluso hubieron rumores de que iban a buscar sustituto a Steven, así que todo era un mar de dudas y que no llevaban a ningún sitio. Así que quizá, lo que les hacía falta es que tuvieran algún objetivo con el que girar o ponerse las ideas claras, lástima que fuera el concepto de despedida, pero bueno… teníamos al grupo de nuevo por Europa y eso era lo importante.
El hecho de la desbandada hacia el concierto de Steel Panther nos dejó buen sitio para este, así que con una puntualidad escrupulosa comenzó a proyectarse el video retrospectivo de Aerosmith que sirve como intro de todos los conciertos a ritmo de Carmina Burana. La verdad es que viniendo de donde vienen y como dejaron su repertorio nos podíamos encontrar un show de hits comerciales y ganar el show, o como tenía que ser lo lógico un repaso a toda su carrera, y menos mal que fue lo segundo.
Tras un “Music from another dimension” que no supuso nada para la banda, fue el último disco del grupo de material propio tras 11 años de aquel anodino Just Push Play, Steven Tyler sacó un disco en solitario, participó en programas de televisión como jurado y la banda como decíamos seguían sin hacer poco más que alguna gira americana, e incluso hubieron rumores de que iban a buscar sustituto a Steven, así que todo era un mar de dudas y que no llevaban a ningún sitio. Así que quizá, lo que les hacía falta es que tuvieran algún objetivo con el que girar o ponerse las ideas claras, lástima que fuera el concepto de despedida, pero bueno… teníamos al grupo de nuevo por Europa y eso era lo importante.
El hecho de la desbandada hacia el concierto de Steel Panther nos dejó buen sitio para este, así que con una puntualidad escrupulosa comenzó a proyectarse el video retrospectivo de Aerosmith que sirve como intro de todos los conciertos a ritmo de Carmina Burana. La verdad es que viniendo de donde vienen y como dejaron su repertorio nos podíamos encontrar un show de hits comerciales y ganar el show, o como tenía que ser lo lógico un repaso a toda su carrera, y menos mal que fue lo segundo.
Fue curioso que comenzaran con “Let the music do the talking” del “Done with Mirrors”, uno de los peores discos del grupo, para seguir con “Young Lust” del Pump. Ovación para los americanos que dispararon ya un tiro seguro con “Cryin’” con todo el mundo cantando el estribillo, aunque hicieron lo mismo con “Living on the edge” o “Love in an elevator”. De los tres conciertos que pudimos ver de esta gira europea solo aquí tocaron “Janie’s got a gun”, vale que es un gran tema (como todos) pero no lo veíamos en un ambiente de festival, tocando lo que habían tocado y viniendo lo que venía… cortaba el rollo sinceramente.
Era el momento en que Perry se ponía a las voces y se marcaba su “Stop messin around” de aquel “Honkin on Bobo” con su particular macarreo y ese riff que te hace mover las caderas hasta la última nota… solo de armónica de Steven, sigue Perry y pum… como si estuvieramos en 1984, versión de Fleetwood Mac del “Oh Well” y un buen rato de improvisación bluesy-psicodélica como si estuvieran en una sala para 50 personas, un capricho que solo se pueden dar unos pocos, y que nos demostró que aún pueden y quieren hacer rock como el de antes.
Seguía la época dorada con “Mama kin”, “Back in the saddle” y la sorpresiva “Chip away the stone”, comodecíamos un set más bien de grandes éxitos de toda su carrera sin importarles si se los conociera la gente o no, aunque es cierto que estuvo equilibrado junto con esos temas algunos toques comerciales como “Cryin” y el de ahora “I don’t want to miss a thing” donde el respetable volvió a emocionarse y a cantar hasta la saciedad. Llegaba el final y con buena presencia con el “Permanent Vacation” con “Rag Doll” y “Dude (looks like a lady)”acabaron sacando sus últimos buques de guerra con un manido “Come togheter” que podría haber sido cualquier otro, pero fue bien recibido.
Mientras se fueron a descansar pusieron un piano de cola blanco al final de la pasarela del Festival Stage, dándonos pistas de lo que iba a venir inmediatamente después. Al rato salió Steven a tocar 4 notas a modo de intro y atacar para ofrecernos el sempiterno “Dream On” con toda la banda ya acompañándole y con todo el público realmente entregado y emocionado, solos de Perry encima del piano y Steven en la parte final también se subió donde hubo efectos de humo. Para acabar en alto lo hicieron con “Walk this way”, tema idóneo para eso, bailongo, pegadizo, todo el mundo echando el resto, cáñones de confetti… siendo exigentes podríamos pedir “Train kept a rollin’” como un final más gamberro pero imaginamos que así también está bien.
Y hasta ahí es lo que dio de si el primero de los conciertos que veríamos durante el mes de Junio de Aerosmith… en la gira de “su despedida”, tal y como nos decía Zuck whitford en la entrevista que le hicimos, parecía que a la banda le quede aún un poco de cuerda: Steven no paró ni un momento en toda la noche con sus típicos movimientos, Joe Perry es una institución a las 6 cuerdas y es un verdadero placer verle tocar y ver como interpreta cada nota, con aplomo, elegancia, vacile, técnica… siempre secundado en segundo plano por Brad Whitford, que alguna vez se llevó más de un solo y el siempre efectivo Tom Hamilton al bajo. En el centro entre los amplificadores, ahí estaba Joey Kramer haciendo una carrera de fondo con todos los temas, un auténtico luchador que dio una gran pegada a sus tambores…… y bueno, más atrás estaba un corista (Bob Johnson?) que además tocaba los teclados y la verdad es que para él es el único que deseamos que sea su única gira con la banda, ya que destrozó parte de temas desde su escondite, una pena.
El hecho de que llevasen operarios de cámara para grabar cada momento del show les hizo restar naturalidad, pero aún así son unos animales de escenario, sobretodo Tyler y Perry, y como decíamos nos alegramos que cogieran un show antiguo y no alguno que podría ser un recopilatorio de sus últimos grandes éxitos. Para ellos si, esperemos que no sea la última vez que los veamos.
Ya es un clásico que el segundo día esté Tobias Sammet cerrando el Rock Stage a la una de la mañana, el año pasado fue con Avantasia y este año fue con el 25 aniversario de Edguy. Días atrás ya anunciaron que sería una de sus mayores producciones, pero desconocemos si lo llevarán de gira o si solamente fue esa fecha.
Pero comenzaron fuerte tal y como anunciaron ya que fue acabar Aerosmith y hubo fuegos artificiales desde el Rock Stage (no los hubo por ejemplo para cerrar el festival con In Flames) para comenzar con “Love Tyger”. Los alemanes apostaron fuertes, y les siguió “Vain Glory Opera” con más fuego, esta vez desde el escenario y con una gárgola gigante (con aires a la portada del hellfire club) detrás de la batería de Felix. Grandes temas de power metal rememorando grandes momentos del grupo y recordados por los allí presentes. “Ministry of Saints”,”Babylon” fueron algunos otros con los que la gente disfrutó de lo lindo.
Aunque bien es cierto que si desde los discursos de Joey DiMaio que no se veía nada igual, lo de Tobias Sammet es de otro planeta… Sabiendo que eran casi las dos de la mañana, que llovía y que llevábamos casi doce horas en marcha , era inaguantable los discursos que dio entre tema y tema, riéndose además diciendo que si no hablara tanto podrían tocar el doble, ya dicen que los genios están un poco locos, por no decir otra cosa.
De hecho nos fuimos antes que acabase porque nos pareció una tomadura de pelo el trato del amigo Sammet, ya que aún nos quedaba la mitad del festival.
David Aresté