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AGALLOCH han debido llevarse a la mochila de la memoria un recuerdo de España un tanto equivocado y confuso, ya que en los días en los que los de Portland han girado por la piel de toro no ha dejado de llover ni un solo día. Hasta en uno de los comentarios que dijo el señor Haughm, hizo referencia al mal tiempo que ha hecho estos días. Texto: Jero García Fotos: Irene Serrano |
Tenemos que dar las gracias al jefe de promoción, eventos o a quien pertoque de la sala Apolo por habernos mareado durante los días anteriores al concierto, ya que hasta en dos ocasiones modificaron los horarios de apertura y actuaciones, tan in extremis que hubo gente que solo pudo presenciar una hora de AGALLOCH. Enfado monumental de unos cuantos, y con razón. Es conocido por todos que las salas después de los conciertos siguen con sus programaciones habituales, pero de ahí a que a las 22:30 de la noche haya que desalojar la sala me parece excesivo. Y lo del precio de las cervezas es de juzgado de guardia. No voy a ser yo quien ponga precios a tan deseada bebida, pero no les parece una salvajada cobrar 4,5 euros por un vaso NORMAL? Cosas incompresibles..
Pese a todo este cúmulo de despropósitos la barcelonesa sala presentó una entrada nutrida, rozando el lleno absoluto. Para esta gira denominada “Lucifer over Europe”, AGALLOCH se han visto acompañados por los post-black metaleros FEN, banda que entremezcla sonidos crudos y primitivos con el tan de moda post-metal, sin llegar a hacerme a esa dispar batidora musical. Un grupo puede tener obviamente diversas influencias musicales y plasmarlas en su propia música pero de ahí a hacer black metal y seguidamente un tema puramente post-metal a lo MONO, pues no me acaba de encajar. Y no fue un mal concierto, al contrario, FEN ejecutaron 45 minutos de puro post-black metal y unas más que tablas sobre el escenario, aunque como digo, se fueran de un terreno a otro sin pestañear. Se centraron básicamente en sus trabajos “Epoch” y el todavía caliente “Dustwalker”.
Después de estos tres cuartos de hora y mientras sonaban melodías estremecedoras que lograban un ambiente más que inquietante, saltaba a escena el señor John Haughm con su ya tradicional rito pagano encendiendo el pertinente incienso. Zarpazo a la guitarra y nota agudísima mantenida durante minutos antes de la conocídísima “Limbs” hizo despertar al público que andaba algo aletargado por la cantidad brutal de humo que hicieron expulsar a través de los cañones durante dos horas.
“Limbs”, un auténtico himno de la banda que tuvo sus carencias a la hora de ser ecualizada por parte de la mesa, hasta que pasados unos minutos no lograron solventar, dio paso a la única representación de su último trabajo, “Marrow of the spirit”, la bella “ Ghost of the midwinter fires”, dónde la banda ya le había cogido la medida a la pequeña de las Apolos. Jason William ( camisetón de Kreator al canto) al bajo y Don Anderson a la guitarra se sentían ya cómodos y no pararon de interactuar con el público durante las dos horas que duró la experiencia, mientras que Aesop Dekker no dejó de aporrear con todas sus fuerzas los parches de la batería.
Parece ser que los de Portland tienen disco favorito al menos para ser interpretado en directo y no es otro que “Ashes against the grain”, así que la siguiente en ser ejecutada fue la grandiosa y prolongada “Falling snow” de tan magnífico disco.
Manteniendo un aura inquietante, envolvente y fría como sólo AGALLOCH saben recrear prosiguieron con uno de los platos fuertes de la noche y esperado por la gran mayoría de la gente y no fue otro que el temazo de 22 minutos “Faustian echoes” uno de los mejores temas compuestos por la banda, basándose cómo casi todo el mundo sabe en la obra de Goethe, “Fausto”. Uno de los momentos más intensos de la noche y de los más celebrado por una ya caldeada y abultada Apolo 2.
Después de haber disfrutado con Fausto y su trato con el diablo, llegaba el turno de acordarse de “Pale folklore” y su “The melancholy spirit” dónde la banda emanó sensibilidad y tristeza a raudales. Uno de los temas más emotivos e imprescindibles para conocer a esta grandísima banda.
Continuaron con “You were but a ghost in my arms” y “In the shadow of our pale companion” consecutivamente, de su impecable y melancólico “The mantle” dejándonos a todos compungidos y entristecidos con tan magnas y lúgubres obras.
Para finalizar la primera parte del concierto la banda utilizó como viene haciendo durante la actual gira, la versión del “Kneel to the cross” de los reyes ingleses del Neofolk, Sol Invictus, incluida en el primer mini lp “Of stone, wind, and pillor.” A más de uno aún le perdura la melodía vocal en la masa gris.
Después del pertinente breve descanso aún quedaban unos postres de lujo, que consistieron en “Of stone, wind, and pillor” de su primer trabajo, y las obras maestras ”Our fortress is burning: I” y “Our fortress is burning: II, Bloodbirds”. Tras la prolongada maraña final de distorsiones indescriptibles y con un:-Adiós! Un tanto brusco y fuera de lugar por parte de John dieron punto y final a dos horas de música en mayúsculas.
Un final brillante y apoteósico para una noche hipnótica difícil de narrar y describir cuando se habla de sensaciones anímicas provocadas por la genialidad compositiva de AGALLOCH.
Texto: Jero García 
Fotos: Irene Serrano
SET LIST AGALLOCH ( La [2] de Apolo)
1-Limbs
2-Ghosts of the Midwinter Fires
3-Falling Snow
4-Faustian Echoes
5-The Melancholy Spirit
6-You Were But a Ghost in My Arms
7-In the Shadow of Our Pale Companion
8-Kneel to the Cross
Bises
9-Of Stone, Wind, and Pillor
10-Our Fortress is Burning… I
11-Our Fortress is Burning… II: Bloodbirds
