Nos llega una nueva producción de la factoría Frontiers en su idea de fomentar proyectos de grandes nombres del género, de aquel proyecto Allen/Russell pasamos a Kiske/Somerville y en muchos casos detrás de la gran mayoría de estos proyectos de Serafino Perugino está Magnus Karlsson quien se encarga de la producción y de la ejecución de muchos de los instrumentos de este lanzamiento, una combinación que de nuevo apuesta a caballo ganador y que supone un acierto viendo el resultado final.

Toni Marchante

Anette Olzon salió de Nightwish en 2012 de común acuerdo, después de mucho sufrimiento, al no poder compatibilizar la banda con su vida personal. A partir de ahí volvió a su antigua banda Alyson Avenue y se ajustó a una vida más conciliadora, combinándola con su profesión de enfermera, sin dejar de participar en interesantes proyectos como en el de Dark Element junto a Jani Liimatainen (ex Sonata Arctica) , o este que nos ocupa junto a Russell Allen.

Russell Allen viene por otro lado de superar el duro golpe del accidente de tráfico de Adrenaline Mob y de estar maquinando lo nuevo de Symphony X, su banda de siempre la cual lleva un largo periodo sin actividad. En este periodo, ha participado en este proyecto, muy similar a los desarrollados para Frontiers junto a Jorn Lande.

Magnus Karlsson vuelve a ofrecernos una producción y su toque distintivo en la línea de los álbumes que cosechó para el dúo Allen/Lande. Temas con brillo, de corte hard rock sinfónico, con buenos teclados y su siempre interesante interpretación a la guitarra, donde además se encargó también del bajo. La batería corrió a cargo de Anders Köllerfors.

La distribución de las canciones en el aspecto vocal es diversa, no es un disco 100% de duetos, ya que hay temas que canta Russell Allen en su totalidad o Anette Olzon, que están a la misma altura que los que interpretan ambos. Hablamos de dos grandes voces, Allen es poderoso como el mismo y Olzon tiene ese timbre de voz nórdico tan característico procedente de la escuela ABBAmetalera. En cuanto a las canciones están diseñadas, como era de esperar, para el lucimiento de los dos cantantes, con un toque comercial muy marcado, estribillos resultones y atractivos, dentro de unos temas no muy complejos y bien construidos, donde se trata de buscar el éxito en la melodía.

Ya desde el tema de arranque “Never Die” fusilado por Allen en solitario, vemos el aura sinfónica en un corte de estribillo a lo Symphony X con solo de guitarra corto y efectivo de Magnus Karlson, algo que se incluye como sello personal en cada uno de los temas. Le sigue “Worlds Apart” tema que da título al disco y que ha supuesto el anticipo al lanzamiento y que nos presenta una de las opciones de dueto ofrecidas en el disco y donde podemos percibir lo satisfactorio en la combinación de estas dos grandes voces. “I´ll never leave you” es interpretada en solitario por Olzon y tiene un descarado aura Nightwish, sobre todo en el estribillo. “What if i live” nos trae el segundo dueto del disco, un medio tiempo donde lo más destacable es el perfecto engranaje de las voces y la forma de entrelazar las distintas tonalidades. El turno para Russell vuelve con “Lost Soul”, un auténtico temazo del cantante americano, donde se le ve en plenitud de facultades, mostrando su elegancia a la hora de interpretar en un contexto bien orquestado con un Magnus colosal en el excelente solo de guitarra.

Lo siguiente en sonar es “No sign of life” con los dos cantantes colosales de nuevo en la interpretación de un tema donde sus voces en el estribillo es lo más destacable. Con ”One more chance” de inicio pomposo y grandioso nos llega el turno de disfrutar de Olzon y su voz en un medio tiempo bien construido. “My enemy” está sin duda entre los mejores temas del disco, con los dos cantantes enormes en la interpretación, doblándose continuamente en una canción bien estructurada. En “Who really are” destacan fundamentalmente los teclados, quienes junto a Allen hacen del tema algo especial, en una interpretación donde al cantante se le ve muy cómodo y solvente. Con “Cold Inside” llega de nuevo el turno para Olzon en un magnífico tema de hard rock que combina la balada con el medio tiempo, en un estilo muy americano que bien nos podría recordar a Heart. Para cerrar “Who’s Gonna Stop Me Now” una manera de grandiosa de terminar, de potente estribillo, donde cada uno interpreta los puentes para unirse luego en los estribillos.

Gran trabajo de Russell Allen, Anette Olzon y Magnus Karlsson que esperemos tengan continuidad, como ocurrió en su momento entre Russell Allen y Jorn Lande. La verdad es que generalmente donde mete la mano Magnus suelen salir siempre cosas muy interesantes. Respecto a los dos cantantes, el disco vuelve a demostrar que nos encontramos ante una de las voces masculinas más grandes del rock y una de las voces femeninas más encantadoras de la escena nórdica, donde ya sabemos que hay mucho nivel.

Toni Marchante

Temas:

1. Never Die
2. Worlds Apart
3. I’ll Never Leave You
4. What If I Live
5. Lost Soul
6. No Sign of Life
7. One More Chance
8. My Enemy
9. Who You Really Are
10. Cold Inside
11. Who’s Gonna Stop Me Now