Un año más, tuvo lugar la gran cita anual con las tiendas de discos, esas pequeñas protagonistas de uno de los papeles menos agradecidos de la gran película de la Música, que por un día disfrutan de la gloria que ya no tienen y de estar como deberían estar siempre… llenas.
Susana Manzanares / David Aresté
Es un día al año, pero es esperado con mucha ilusión por todos los amantes de la música y sobre todo de los amantes de comprar y coleccionar discos, aunque no sea necesario un día especial como este, para que les siga volviendo locos esa sensación de entrar en la tienda, buscar su zona y repasar uno tras uno cada vinilo o cada cd de la estantería.
Ese día se repite una vez más lo que otras tantas a lo largo del año, esa sensación de triunfo, ese súbito suspiro que se escapa cuando con los dedos llenos de polvo sacas la presa, justo esa que estabas buscando y marcas con satisfacción una enorme cruz en rojo en la pequeña y arrugada lista que traes de casa… Podría ser un día cualquiera o de cualquier fin de semana, si no fuera porque para la ocasión se reeditan expresamente una buena tirada de discos, vinilos, LPs, 7’’ y hasta casettes (casettes en estos tiempos!) de todo tipo de estilos, bandas y épocas que sólo con pensarlo se le ponen a uno los dientes largos en cuanto ve la lista…
Ese día hay que madrugar o si no llegará alguien más rápido que te quitará ese trofeo tan preciado que llevas esperando ansioso desde que lo anunciaron… Tesoros como un cassette de Metallica, Discos de los grandes Frank Sinatra, Elvis Presley, Jimi Hendrix o Johnny Cash o del lado más ‘extremo’ desde los Sex Pistols a Slayer esperaban a ser llevados a casa por su correspondiente y conquistado pretendiente. Si a todo eso le sumas que las copias para vender vienen de USA y que tienen que ir destinadas a todas las tiendas afiliadas de Europa, aún hace más difícil el hecho de conseguir alguna de la lista.
Centrados este año en las tiendas de Barcelona, la calle Tallers era un hervidero de gente (más de lo habitual) ya que los melómanos no paraban de entrar y salir entre Discos Castelló, Discos Revolver y Pentagram Music Store intentando encontrar alguno de los lanzamientos que salían ese día. Buen ambiente, el merchandising del evento vendiéndose a muy buen ritmo y cada uno buscando y comprando su objetivo y, ya que estamos, alguno más al que ya se le había echado el ojo aunque no esté en la lista…
Además de en el centro, la fiebre del RSD se celebra por toda la ciudad llegando a Discos Surco y al Apolo Store, con sesiones de Dj’s y conciertos dentro de las propias tiendas de discos como hicieron el año pasado ‘Mambo Jambo’ y ‘Marina Bbface & the Beatroots’ aunque este año el repertorio iba por otros derroteros un poco más indies que se nos alejan de nuestra línea editorial, una pena.
De la misma forma que se suele decir que cuando uno está enamorado celebre San Valentín, o que un buen lector celebre el día del libro…. muchos adictos a los discos dicen que ‘San Vinilo’ se tendría que celebrar cada día y no sólo una vez al año tal y como están las cosas para las tiendas de discos. Hasta cierto punto (por desgracia) es real, pero a quienes les gustan los discos no están esperando al RSD para comprarse cientos de vinilos, es un culto y un peregrinaje constante y todos aquellos que rendimos culto a ‘San Vinilo’ hacemos nuestro propio RSD cada vez que pisamos una tienda de discos un fin de semana cualquiera, y si una vez al año celebramos su cumpleaños con tan buen rollito, no le vamos a hacer ascos así que, hasta el año que viene con una nueva lista de grandes trofeos!
Susana Manzanares
Con ganas de aprovechar el fantástico día y ya viendo las horas que eran, nuestros pies nos llevaron a otro aniversario, el del Eat Street Barcelona que tuvo lugar e uno de los muelles del puerto de Barcelona. Esta organización que concentra parte de los Food Trucks de la ciudad que están en activo, celebraba un año de actividades relacionadas con toda su flota y que aquí en España solo se pueden ver en recintos cerrados y/o eventos privados montados expresamente al efecto, y también otros eventos sociales como puedan ser bodas, bautizos o comuniones.
Desconociendo el estado actual de obtener permisos para poder vender comida en la calle -aunque algunas provincias si que lo tienen- el hecho de pasearse por uno de sus eventos o del ‘Palo Alto Market’ -su hermano en Poble Nou- se ve claramente el tirón que tiene en cada una de las ediciones y seguro que si alguien se fijara en los números que se pueden manejar uno de estos fines de semana en cada evento se plantearían permitir la comida callejera en España…
Lanzamos lo que ya se ha dicho en el entorno, pero sin duda no es el momento ni el lugar para debatirlo, aunque si que daremos nuestra opinión respecto a que ciertos Restaurantes no ven bien la aparición de dichos Food Trucks ya que les quitarían la clientela…. pensamos que hasta cierto punto el público podría ser bastante diferente, por el tipo de comida que se sirve en un sitio y el otro, y también por el que busque una cierta comodida para comer y otro que le de igual, por decir algún ejemplo.
Centrándonos en este Eat Street, tuvimos como siempre infinidad de tipos de comida como biológica, vietnamita, pescados, japonesa, “exótica”, sandwiches de autor, carne ahumada, dulces, tartas, un sinfin de propuestas en las que las bolas de puplo del Ikki bar y las tapas del Mosquito sin duda se llevaron la palma… aunque no podemos dejar de hablar de la finura y el buen hacer de la gente de Caravan Made y sus sandwiches y el gran sabor conseguido de los platos de la gente de Casa Xica junto a los siempre sorprendentes ahumadores de la Rooftop Smokehouse.
Sin duda un gran evento para pasar el día con familia, amigos o quien fuese y disfrutar de buena y variada comida que uno no tiene opción de probar diariamente y que aquí a precios populares puedes hacerlo sin problema. Esperemos que la gente de Eat Street BCN vuelva en este 2016 para seguir fomentando el espíritu de la comida callejera, una realidad que no acaban de ver o que no dejan que sea legal, esperemos que el próximo año sea el definitivo.
Por nuestra parte así poníamos fin a un sábado multicultural entre música y buena comidagastronomía, algo que en Barcelona nos han enseñado más de una vez..
David Aresté
