| MY DYING BRIDE |
Con el buen sabor de boca dejado con el fiestón de Slaughter, nuevo cambio radical en cuanto a música y prácticamente todo para adentrarnos en el oscuro y denso mundo de los ingleses My Dying Bride, uno de los estandartes del doom metal europeo que visitaba nuevamente España casi dos años después de su actuación en el Metalway 2008 en su edición vizcaína. Muchos seguidores, más de los que en un principio muchos pudieran pensar, para presenciar la descarga de los ingleses, que entre una nube de humo y ya completamente de noche, saltaban a las tablas del Coliseo con toda la tranquilidad del mundo, como si la cosa no fuese con ellos.
Buen sonido, al menos mejor del esperado, para un concierto de poco menos de una hora de duración en el que tuvieron cabida pocos temas, siete concretamente, entre los que se cuentan cortes bastante repartidos entre su extensa discografía, sin grandes sorpresas. Entre ellos “Catherine Blake”, “And I Walk With Them”, “The Raven Wings”, “The Cry of Mankind”, “She is the Dark”, o “The Dreadful Hours” y “The Forever People”, con la que cerraron un concierto en el que en mayor o menor medida cumplieron con las espectativas, fueron respetados más o menos por una acústica decente y gustaron a sus más fieles seguidores con su show frío y oscuro.
Texto y Fotos: Raúl del Amo
| SYMPHONY X |
Tras su reciente gira nacional, había no pocas ganas de disfrutar, una vez más, del potente directo de los americanos progresivos Symphony X, quienes en apenas 4 meses nos han visitado hasta tres veces. Sabiendo que la calidad de los shows en sala iba a ser difícilmente comparable a la de un concierto en una plaza de toros semi-cubierta en el marco de un festival, nos disponíamos a presenciar la descarga de Russell Allen, Michel Romeo y cía, con todo lo anterior bien sabido, para evitar una desilusión que finalmente y en el plano personal me fue imposible esquivar.
Horrible concierto de Symhpony X, y no precisamente por su falta de ganas o motivación, ambos aspectos intachables dentro de sus directos siempre, sino por el peor sonido logrado en todo el festival de largo. La voz de Allen; inaudible, la guitarra de Romeo; ausente, la base rítmica; un conglomerado que resonaba una y mil veces por el Coliseo sin sentido alguno…Un auténtico despropósito que dio literalmente al traste con las pocas aspiraciones que me quedaban de ver un concierto digno de un grupo que, dicho sea de paso, ha protagonizado uno de los avances más prolíferos en España durante los últimos meses, con sus conciertos y con la edición de ese discazo que titularon “Paradise Lost”. De poco valieron las múltiples intentonas de los progresivos por despertar al público y cambiarle de algún modo la cara de circunstancias. Ni “jueguecitos” de toro y torero entre Russell y Michael, ni sing-alongs ni nada, las ganas y profesionalidad de Symphony X no funcionaron en Atarfe, quedando sus canciones huérfanos de cuerpo y sentido.
En cuanto al repertorio, pocas sorpresas. Set list reducido, de algo más de una hora de duración, que volvió a centrarse en “Paradise Lost”, del que cayeron “Set the World on Fire”, “Damnation”; “The Serpent’s Kiss”, “Paradise Lost” y “Eve of Seduction”, decepcionante para un servidor quien, iluso de él, soñaba con presenciar un concierto más variado después de haber sido testigo nada menos que tres veces de la presentación de su – siempre gran – último trabajo. En cualquier caso no faltaron las clásicas “Smoke & Mirrors”, “Inferno”, Sea of Lies” y “Of Sins and Shadows”, y la que para mí supuso el mejor momento de la noche y de los pocos salvables, el “The Damnation Game” rescatado de su segundo y homónimo trabajo.
Pocas sorpresas positivas y demasiadas negativas para un grupo que, aunque ya sabía a lo que venía, mereció mejor suerte. Seguiré rezando para que de una vez por todas se decidan a rescatar ese grandísimo “The Eyes of Medusa” para su repertorio. Después de sus reiteradas visitas en tan poco tiempo y mirando por sus intereses personales, mejor será que vuelvan más tarde que pronto.
Texto y Fotos: Raúl del Amo
| RATT |
Llegaba el momento de recibir como se merecían a Ratt, una de las leyendas del heavy rock estadounidense que visitaba España, por fín, tras más de 25 años de carrera discográfica. Ellos conformaban la gran apuesta sin duda del festival, el plato fuerte, la banda en la que más esperanzas había depositadas, y es que el trasfondo musical y el legado de Steven Pearcy y sus chicos es muy extenso. Así, el aforo del Coliseo pareció alcanzar su cota máxima con la descarga de los angelinos, llegando a las 2800 – 3000 personas aproximadamente.
Puntualmente saltaban a escena unos Ratt encabezados por su carismático frontman, un Steve Pearcy que mostró un aspecto bastante raquítico y desmejorado, ciertamente. Gafas de sol y sombrero de vaquero en mano, escoltado por su banda, de la que yo destacaría al gran guitarrista Warren de Martini, muy activo durante todo el concierto, Ratt, sin ser ayudados por un sonido que no fue ni muy bueno ni muy malo, plantearon un concierto para cumplir y poco más, contentando a sus fans de siempre (que dicho sea de paso al final fueron menos de lo que en un principio pudiera esperarse) con un repertorio repleto de clásicos centrados en sus discos más exitosos, como son su homónimo EP, “Out of the Cellar” e “Invasion of your Privacy”.
Técnicamente el concierto fue de más a menos, al principio con una banda mostrando su lado más macarra y gamberro, ayudados por un sonido mejor y un Steven Pearcy vivaracho y animado. Lo cierto es que con el transcurso del concierto y ya sobre todo hacia la parte final, el grupo pareció deshincharse por momentos, sensación palpable en la voz de Steven, audiblemente carraspada y débil con los temas finales. Además, el aliento y disfrute del público prácticamente en ningún momento se exteriorizó, quedando un ambiente realmente pobre en momentos concretos, hecho al que servidor asistía con una mezcla de tristeza e incredulidad, puesto que pese a no haber terminado de despuntar en Europa nunca, Ratt siguen siendo una de las leyendas del heavy rock en Estados Unidos con todos los honores.
No faltaron himnos como “Back for More”, “Lack of Communication”, “Tell the World”, “Wanted Man” o “Round & Round”, clásico entre clásicos con el que cerraron su show e hicieron saltar al público de manera inédita en la noche. Visiblemente cansados se retiraban unos Ratt que sin defraudar ni tampoco impresionar abandonaban las tablas del Coliseo, dejando la sensación de haber cumplido y poco más en un show correcto.
Texto y Fotos: Raúl del Amo
| WITHIN TEMPTATION |
Con el cansancio acumulado de dos días intensos de música a todo tren, íbamos alcanzando el final del festival, pero no sin antes presenciar otra de las descargas con gran atractivo, no en este caso por su rareza en España, sí por el poder de atracción y congregación del grupo en cuestión que no era otro que Within Temptation, banda para la que como recordarán se habían puesto a la venta unos abonos especiales para presenciar únicamente su actuación y la de la banda siguiente, Belphegor. La oferta especial se hizo notar, y ya desde Ratt podían verse grupos de personas de corta edad ataviados con elementos típicamente góticos aguardando impacientes a la conclusión del show de los de Pearcy para presenciar al fin – por enésima vez en dos años – a Sharon y los suyos hacer de las suyas.
Tan cuidado como siempre el plano escénico en sus conciertos, Within Temptation volvieron a condecorar el escenario con un enorme telón con imágenes proyectadas de fondo y una interpretación de los temas excelente, además con un sonido digno que no ensombreció para nada una correctisima actuación. El público, jóven en su mayoría como decía anteriormente, se mostró bastante más activo y entregado con el grupo que en conciertos anteriores, y Within Temptation respondieron con una buena dosis de temas que aunque previsibles, no restaron gracia y espectáculo a su show. Más de una hora y 20 minutos en los que no faltaron "Jillian", "The Howling" y "Stand My Ground", con las que abrieron, o “The Cross”, la preciosa “Forgiven” con el acompañamiento del piano, “Angels”, “Mother Earth” y “Deceiver of Fools” con “Ice Queen”, ambas suponiendo el inevitable bis con el que se cerraba uno de los conciertos mejor ejecutados y mejor respaldados por el público de todo el festival.
Tras Within Temptation nuestras fuerzas dijeron adiós y con ella nos marchamos al hotel en busca de nuestro merecido descanso, escuchando de fondo la brutalidad de los que tenían el deshonor de finiquitar el Atarfe, los austriacos Belphegor a los que por suerte podremos ver en pocos meses por aquí nuevamente, en esta ocasión de teloneros de la gira de Nile y con Grave también como acompañantes de lujo. Esperemos que entonces gocen de mejor suerte y vengan con más ganas, ya que al final la banda dio un escueto concierto de poco más de media hora de duración y gracias, en un gesto descortés, feo y poco profesional que no les corresponde en absoluto.
Así llegaba a su fin un festival en su edición del 2008 que, a juzgar por el comunicado expedido hace unos días desde la organización, será el último en España al menos durante algún tiempo, si bien la propuesta será trasladada a Brasil, en busca de una aceptación y un respaldo que con todo el dolor de mi corazón no han encontrado en España. Quizá dentro de unos años con el éxito carioca y con la vuelta de las subvenciones por parte de un Ayuntamiento de Atarfe que en un nuevo espaldarazo ha vuelto a retirar su apoyo al evento, podamos volver a disfrutar de esos maravillosos momentos al sur de Andalucía…
Texto y Fotos: Raúl del Amo
