Helloween + Hammerfall – 2 de Septiembre 2023 – Wizink Center (Madrid)
Parecía que con añadir a Hammerfall en la gira de Helloween se iba a llevar a cabo pero también costó varios aplazamientos de fechas hasta que por fin a primeros de Septiembre se pudieron llevar a cabo.
Texto: David Aresté
Fotos: Susana Manzanares
Los últimos que recordamos fueron por la pandemia, y el segundo fue por motivos de salud de Andi Deris el pasado mes de Febrero acabando al primer fin de semana de Septiembre las fechas definitivas, aunque la incertidumbre seguía en el ambiente ya que la banda canceló su aparición en dos festivales europeos del pasado mes de Agosto por una laringitis de Michael Kiske.
Así que por fin, alrededor de las 19h se abrían las puertas del Wizink para dejar atrás los festivales de verano y que comenzase de nuevo la programación de giras europeas en salas y grandes recintos. Pasados 30 minutos hacían acto de presencia los suecos Hammerfall, que venían a presentar su último “Hammer of Dawn” de 2022 con su portada representada en su inmenso telón de fondo.
Como era de esperar, su repertorio comenzó con “Brotherhood” como comienza ese último disco. Rápidos y veloces como el trueno volvían los de Cans delante del público madrileño. Es raro que alguien como Hammerfall estuvieran abriendo la noche, pero alguien lo tenía que hacer… Así que con la templanza de sus 30 años de carrera, nos dejaron un setlist equilibrado entre varios de sus discos llegando a la docena y al poco de una hora de repertorio.
“Venerate Me” y la que le da título “Hammer of Dawn” fueron los temas que sonaron de ese nuevo disco, después como decimos fueron sonando grandes clásicos de la banda como “Glory to the brave”, “Blood Bound”, “Let the Hammer Fall” o la final “Crimson Thunder” con la que disfrutaron los allí presentes.
Es curioso como en la gran mayoría de conciertos en grandes recintos los teloneros casi nunca suelen estar relacionados con el grupo principal y este que formaban un combo formidable de heavy clásico y power metal, aún hubo mucha gente que se perdió a Hammerfall para entrar únicamente a ver a Helloween.
Los suecos demostraron esas tres décadas encima de los escenarios con un show sin fisuras y potente como solo ellos saben darlo. El tiempo pasa para todo el mundo y quien más lo nota es Cans, que aunque haya rebajado su potencia vocal un poco hizo un gran papel durante el show. La figura de Oskar Dronjak es metal en estado puro, sus poses, sus riffs y sus solos hablan por si solos y es una de las instituciones del grupo, el espigado guitarrista siempre implicado en la puesta en escena del grupo, es todo un referente. Su compañero a las seis cuerdas era Pontus Norgren, también muy activo en gran parte de los solos mostrando su gran capacidad técnica. La base rítmica sonó fuerte y poderosa con Fredrik Larsson al bajo y David Wallin a la batería al fondo del escenario.
Gran previa de Hammerfall de los que ya teníamos ganas de ver un poco más de cerca y no en los festivales de verano a los que nos tenían acostumbrados. Ahora que tienen disco “reciente” podrían venir de gira, pero veremos a ver cuales son los próximos pasos del grupo.
Como los grandes nombres de la escena, se puso un telón negro delante del escenario para que no se viera como desmontaban el de Hammerfall y se levantaba el de Helloween entre un gran equipo de crew, artilugios tecnológicos y la gran calabaza del final de escenario para posicionar la batería de Dani Löble y la pantalla donde iban a pasar proyecciones durante el concierto.
En esta parte de la gira algunas veces comenzaron con “Halloween”, pero no fue el caso y el único recuerdo que tuvimos del tema fue en la intro del show, una intro larga con imágenes de fantasía relacionadas también con su último disco y una gran producción orquestal.
Con la que si comenzaron fue con “Skyfall”, de su último disco… un tema dinámico, ágil, con múltiples cambios de ritmo con ese deje añejo que podría tener (salvando las distancias) con “Halloween” por ejemplo, así que a falta de uno, esta nueva versión y ya adaptada a tres voces es más que agradecida. Y por si fuera poco en el segundo tema ya salió un premio gordo como “Eagle Fly free”, todos cantando, las proyecciones con la calidad correspondiente con el tema que estaba sonando y con las calabazas viajando en el tiempo al 88. Del subidón la nueva “Mass Pollution” encajó muy bien aunque no fue tan rápida como las anteriores.
Otro salto atrás con “Future World”, locura generalizada y primer lololo de la noche… gran trabajo de guitarras, Löble trabajando durísimo desde atrás y la dupla vocal de Deris y Kiske sufriendo en el estribillo, otro día en la oficina. Descansaron con la ultra melódica y pegadiza “Power” que volvió a encantar, volvió a divertir y volvió a quedarnos en la cabeza para que aparezca en el momento más aleatorio posible. Último esfuerzo con “Save Us” que fue celebrado por todos para dejar paso al recuerdo del “Walls Of Jericho” con Kai Hansen de jefe a la voz principal y marcándose su ya tradicional medley con “Metal Invaders”, “Victim of Fate”, “Gorgar” y el himno “Ride the Sky”… aunque más lo fue “Heavy Metal (Is the Law)” sorpresa inesperada por muchos que celebraron y cantaron hasta la última nota.
El único momento de paz, tranquilidad y lagrimilla vino de aquel “The Time of the Oath” con “Forever and One (Neverland)” con Kiske y Deris sentados en primera fila cantando la primera parte de la canción hasta que entra toda la banda para ponernos los pelos de punta. Momento ideal para relajarse por todo lo que venía.
Con todo el cariño del mundo “Best Time” de poco sirvió pensando en todo lo que venía a continuación. “Dr.Stein” fue el primero de la traca final, divertido como siempre y muy pegadizo sonó en todo el Wizink. Con “Perfect Gentleman” pasó más o menos lo mismo que con “Best Time”, ya que estábamos impacientes por lo que venía a continuación… ni más ni menos que “Keeper of the Seven Keys”, 13 minutos de pura esencia de calabaza que nos dejaban para disfrute final con toda la banda dando lo mejor de si y confirmando su genial forma. Segundo bis para un solo de Löble totalmente prescindible ya que ya vimos su dominio en los parches para pasar al final de fiesta con “I Want Out”, más locura, segundo y final lololo en el solo, confeti, globos… un final de libro de como se acaba un gran concierto.
Aunque tuvieron un sonido algo peor que Hammerfall, Helloween demostraron que funciona la reunión tanto arriba del escenario como abajo exceptuando las incoherentes proyecciones que veíamos por las pantallas… Detalles aparte, los alemanes siguen funcionando con gran precisión, los trios vocales y las 6 cuerdas se entienden y empastan a las mil maravillas, para que remate Löble desde atrás, ojalá salga pronto ese nuevo disco y los tengamos de nuevo por aquí.
Texto: David Aresté
Fotos: Susana Manzanares