Royal Republic + Blackout Problems – 8 de Noviembre 2019 – Sala Cool Stage (Madrid)
Los suecos Royal Replubic trajeron de nuevo su funk rock a España, y era la ocasión perfecta para ver que nos ofrecían Adam y los suyos… Vinieron con ellos los alemanes Blackout Problems para abrir la noche en Madrid, además de hacer lo propio para toda la gira.
Texto y fotos: David Aresté
Este cuarteto alemán no es que pegara mucho con el grupo principal, aunque quien puede parecerse a lo que hicieron luego Royal Republic? Lo que importaba es que estaban allí para ofrecernos su propuesta musical que se movía por terrenos del rock alternativo, separado por una delgada línea de sonidos más accesibles y/o meanstreams. Formados en 2012, BP venían a presentar su primer disco llamado “Kaos” en el espacio físico y “temporal” que les dan a los grupos invitados. Siendo viernes la gente llegó de forma escalonada y la banda no tuvo el máximo aforo de la noche como era obvio, pero sin duda aunque fuese por esperar en buen sitio para que comenzasen Royal Republic si que tuvieron bastante gente viéndoles. Llegaron a los 45 minutos de actuación con unas luces inexistentes aunque la banda supo sacarle rendimiento, con una buena puesta en escena, implicada y potente sobretodo por Mario que no paró ni un momento por agradar a todos los allí presentes… las primeras filas cantaban los temas y se emocionaban con el rubio vocalista.
Todos esos temas de “Kaos” sonaron potentes, pero también sonaron sintéticos por la cantidad de samples que tienen. Mario fue el auténtico maestro de ceremonias intentando agradar a todo el mundo como decíamos… pero verdaderamente nos fijamos en su batería Michael, que nos demostró su técnica exquisita en cada uno de los temas. Fórmula prefabricada cercana al meanstream que quizá no estaban delante de su público pero si agradaron al secotr más teenager de la sala. Esperaremos su evolución con más material nuevo y conciertos… que por decir algo se queda en que los vimos en una versión descafeinada de lo que podrían haber sido los primeros Linkin Park,
Momento de cambio de equipo y que se hiciera la luz para dejar a la vista parte del interesante juego de luces que traía el grupo, con su logo en el centro del escenario en formato de leds junto a una tarima para la batería de Per Andreasson flanqueados por dos franjas laterales también de luces leds para dar ese aire disco del Club Majesty que venían a presentar. Tres años han pasado de su anterior “Weekend Man”, su disco con más repercusión para la banda notándose en el sold out que consiguieron el día antes del concierto.
En nuestro caso no conocíamos al grupo con sus anteriores discos y no es hasta este “Club Majesty” que lo han editado con Nuclear Blast que llega con fuerza hasta nuestra redacción. Como decíamos, ya fue al final del concierto de Blackout Problems que la sala estaba hasta los topes esperando la descarga de estos excéntricos suecos liderados por el carismático Adam Grahn mezclando este ambiente disco/funk glamuroso con ciertos retazos punks. Doble intro con el “Born to be alive” de Patrick Hernandez y el “You’re sexy thing” de Hot chocolate dio paso a la banda entre vítores del respetable para comenzar con “Fireman & Dancer”, uno de los singles de ese nuevo disco.
Como era de esperar no hubo momento de respiro durante todo el concierto y fueron cayendo tema tras tema, baile tras baile… la comunión con la banda estaba hecha desde el primer tema y aquello verdaderamente si que se había convertido en un club de baile. “Under Cover”, “Getting along”, “Full Steam Machine”… cualquiera sonaba de lujo y era recibido con más ganas por el respetable que no paraba de animar y pasárselo bien. “Stop Movin’”, “Boomerang” o “Walk!” sonaba en la mitad del concierto confirmando el desenfreno que estábamos viviendo y que el grupo no paraba de agradecer, “Tommy-Gun” y “Anna-Leigh” cayeron como grandes hits de disco para poner el final antes de los bises. Para rematar la fiesta nos ofrecieron el trío “When I See You Dance with Another”, “Flower Power Madness” y “Baby” junto a un amago de “Battery” de Metallica.
Excentricidades de unos suecos que pueden llevar collar de perlas tocarte “Battery” y derramar una botella de champagne entre el escenario y las primeras filas… excentricidades que hacen particulares a Royal Republic y que confirman la fórmula que han descubierto y consolidado a lo largo de todo este tiempo y que se ha confirmado con el sold out que consiguieron en la capital. Su música no tiene ninguna floritura, el carisma de de Adam, la hiperactividad de Hannes a la guitara y la gran consistencia de Per y Jonas a la batería y bajo hacen un gran cambo haciendo un gran bloque sonoro.
A la vista está que fue un gran acierto traerlos por España, la gente les tenía ganas y así lo demostraron… esperemos que no tarden en volver y si puede ser en recintos un poco más grandes que seguro que los llenarían. Se lo merecen sin duda, estaremos a la espera.
David Aresté