“The Dark Side of The Moon” es uno de los discos más grandes de la historia, quizás sepas todo a cerca de él, pero por si acaso se te escapa algo, aquí van unos cuantos detalles que quizás no sepas.
Javier Marchante
Este álbum, quizás el más famoso a nivel mundial de Pink Floyd, se gestó a base de tocarlo durante meses en directo bajo el nombre de “A Piece for Assorted Lunatics”. El disco iba a titularse en un principio “Eclipse”, porque ya existía otro álbum con este nombre, pero dado que aquel tuvo escaso éxito, decidieron usarlo de todas formas.
Aunque tiene muchas curiosidades importantes, la mayor de ellas sin duda es que tanto el latido que abre y cierra el álbum, el “mix” de trocitos del disco que sirve de introducción, (montado por Mason), y las voces que hablan en diversas partes del disco fueron añadidas a última hora, cuando el disco estaba ya prácticamente terminado y mezclado, (aludiré a menudo a esa premezcla como el ”premix”).Como curiosidad extra, una de las voces que no se usó, (y que re realidad son respuestas a preguntas que Roger hizo a gente que frecuentaba el estudio) fue la de Paul McCartney.
Conozcamos sus curiosidades tema a tema:
Speak to me: Este pequeño “remix” de trocitos del disco a modo de intro fue montado por Mason, al que al parecer le gustaba trabajar con este tipo de cosas. La banda decidió darle el crédito de “compositor” a Mason y considerarlo como un tema en sí. Waters confesó años después en una entrevista haberse arrepentido de esa decisión, pues por el tema de royalties, (lo que aquí llamamos “derechos de autor”), este simple remix de poco más de un minuto seguramente habrá reportado a Mason más de un millón de libras en los últimos 43 años.
Breathe: Originalmente el disco empezaba directamente con esta canción, con un acorde de sintetizador que iba descendiendo durante unos segundos a modo de introducción. La letra impresa en el disco original ponía: “don’t sit down, it’s time to start another one”, aunque en realidad canta: “…to dig another one”.Como detalles de “hilar muy fino”, destacar el peculiar acorde que va justo antes de que David empiece a cantar, (RE7mayor9b) que Wright reconocía haber sacado de un disco de Charlie Parker, (y que es exactamente el mismo acorde que aparece en las paradas de “Shine on…”). Es curioso también ese golpe de caja a contra-tiempo en el último compás, que sirve para enfatizar el cambio al siguiente ritmo.
On the run: Originalmente este tema era una improvisación de guitarra y teclado sobre un sólo acorde llamada “The travel sequence”, que al grupo nunca acabó de gustar cómo quedaba para el disco. La casualidad hizo que por aquella época los estudios Abbey road hubieran adquirido el nuevo sintetizador/secuenciador EMS-VCS3 y Roger y David se pusieron enseguida a investigar qué podían hacer con él. Cada uno añadió sus propias secuencias con diferentes notas, un ritmo que imita el charles de una batería y algunas notas graves continuas para establecer las diferentes armonías (caóticas y poco “musicales”, por cierto). Sobre todo esto añadieron después varios efectos sonoros: pasos, la megafonía de un aeropuerto y extraños sonidos y chirridos producidos, aunque no lo parezca, experimentando con guitarras. Aunque Rick está acreditado como que toca el VCS3 en el disco sospecho que este tema lo grabaron todo entre David y Roger. Algunas secuencias y efectos de sonido son ligeramente diferentes en la versión definitiva, (respecto a la del “remix”) y la explosión final también se añadió más tarde.
Time: Anteriormente a la grabación del disco Alan Parsons había ido a una gran relojería de Londres con un equipo portátil para grabar sonidos susceptibles de ser incluidos en un disco de muestra sobre las posibilidades del sonido cuadrafónico, (por encargo de la EMI).Fue idea suya enseñar dicha grabación al grupo por si querían añadirla al tema, a modo de introducción, lo cual ellos aceptaron encantados. El sonido que imita al tic-tac del reloj, (a modo de metrónomo) fue grabado con el bajo de Waters, tocando en una zona muy alta del mástil y con las cuerdas muteadas. David y Rick se alternan en las voces, acompañados en el estribillo de un coro femenino, que desde entonces se convirtió en una “marca de la casa” de los Floyd, al pasarlo por un flanger, (o algún efecto similar).La canción desemboca en Breathe-reprise, en el que vuelven al primer tema, con una ligera variación en el ritmo.
The great gig in the sky: Este tema de Wright originalmente iba a llamarse, “Religion”, y más tarde “The mortality sequence”, y en alguna entrevista Rick comentó que lo compuso porque pensaba en la muerte a menudo y sobre todo cuando viajaba en avión, cosa que le aterraba y trataba de evitar siempre que fuera posible. El tema no tenía melodía en el “premix”, y en su parte álgida tan sólo sonaba de fondo la lectura de un predicador religioso llamado Malcolm Muggeridge de un texto bíblico. No contentos con el resultado, Waters preguntó a Alan Parsons si conocía a alguna cantante que pudiera improvisar algo sobre la base que ya tenían, y sin pensarlo mucho llamó a una chica con la que había trabajado recientemente, llamada Claire Torry. Con unas ligeras pautas sobre la “temática” que buscaban expresar en la canción: muerte, religión tenebrosa, desesperación, angustia, (todo de muy buen rollo) Claire en un par de tomas grabó lo que finalmente quedó en el disco para siempre. Ella no estaba muy contenta con lo que había cantado. Se sintió avergonzada y se fue del estudio sin esperar a que nadie le dijera nada al respecto, pensando incluso que ni siquiera usarían lo grabado. Lo que no podía imaginar es que los miembros de la banda quedaron absolutamente encantados con lo que había improvisado y transmitido con su interpretación.
Años más tarde, bien aconsejada por algún avispado abogado, Claire reclamó que debería ser considerada co-autora del tema, puesto que toda esa melodía fue invención suya, y tras años de luchas legales finalmente lo consiguió en 2005, a partir de cuya fecha la compañía es obligada a poner su nombre en toda futura re-edición del álbum, y además a pagarle, ¡con carácter retroactivo! sus royalties, (derechos de autor) de todo lo vendido desde el año ’73. Estamos hablando de cientos de miles de libras, quizás incluso más de un millón. Por la sesión de aquel día cobró 30 libras, y eso porque en domingo pagaban el doble. Como detalles muy difíciles de escuchar, en el minuto 3:33 se escucha una voz femenina que dice en inglés: “si puedes oír este susurro, te estás muriendo”, y en el fundido final del tema hay un par de segundos en los que se acelera la velocidad de la grabación para inmediatamente volver a ponerla normal; (os recomiendo el uso de unos buenos auriculares para distinguir este tipo de detalles).
Money: Waters empezó a componer este tema en la época del “Meddle”, tocando ese riff mundialmente conocido con una guitarra acústica, pero con un estilo tirando a country o folk. Para quien no entienda de música, (a un nivel profesional) explico que este tema lleva un tipo de compás poco usado en la música pop-rock, porque va alternando una medida de 3 y otra de 4 constantemente, y eso hace que parezca que el tema va un poco “cojo”, o que pasa “algo raro” al querer seguir el ritmo, (probad a bailar la canción y notareis a qué me refiero). Para montar una base sobre este compás, (llamado 7/4), Waters cortó 7 trocitos iguales de cinta de magnetofón y grabó en cada uno de ellos un sonido, algunos usando herramientas del estudio de alfarería que tenía su mujer en casa.Una vez unidos esos trozos, se reprodujeron de forma cíclica en el estudio, formando así el famoso loop sobre el cual el grupo empezó a grabar el tema.
Curiosamente, cuando tras un largo break de batería Gilmour empieza su ronda de solos de guitarra, (el primero de ellos grabado dos veces, y abierto en estéreo) el tema cambia a un típico compás de rock de 4/4 sin que nadie lo note, (bueno, algu-nos sí que lo notamos, claro).Más tarde, cuando el ritmo de la batería se suaviza, (3:50) hay un efecto “raro” en la guitarra, que se produce porque Alan Parsons le quita de golpe algunos efectos, dejando así su sonido extrañamente vacío y sin peso en la mezcla. Tras acabar los solos, el ritmo vuelve a cambiar al 7/4 inicial hasta el final, con la misma normalidad que antes.En el “premix” original, las últimas frases e improvisaciones vocales de David son ligeramente distintas.
Us and them: Este espléndido tema de Rick fue compuesto unos años antes para la película “Zabriskie’s point” en forma de tema instrumental, solo a piano, llamado “The violence sequence”. Finalmente el director decidió no usarlo, (ni tampoco la gran mayoría del material que compusieron para su banda sonora).Gracias a eso, y manteniendo lo que le inspiró dicha escena de la película, Wright animó a Waters a escribir una letra sobre ello, aunque después no se atrevió a cantar el tema él mismo, (puesto que siempre fue muy autocrítico a la hora de cantar). Sí que hace en cambio una segunda voz junto a David en la parte más álgida de la canción. La idea de Alan Parsons de usar un delay en algunas palabras, para que resuenen en los compases posteriores, (ajustado con el tempo de la canción) fue sin duda una genialidad digna de destacar, y oír hoy en día el anterior “premix”, (sin ese eco en algunas partes) se hace realmente raro. En ese último “premix” el tema empieza con el piano, el bajo y el saxo, y la batería se va añadiendo poco a poco, casi un minuto más tarde. El saxo suena en más partes que en la versión que todos conocemos, y no hay solo de piano; estoy seguro de que Rick volvió a grabar toda la pista de piano para la mezcla final.
Any colour you like: Esta es una típica improvisación de los Floyd basada en dos acordes, de las que solían hacer por aquella época y en la que hay poco para destacar, excepto que hay una gran diferencia de volúmenes de teclados y guitarras en la mezcla final, (respecto a la del premix), y un pequeño “fallo” bastante difícil de apreciar en el minuto 1:05. Mason seguramente se equivocó mientras grababa su base rítmica y aprovecharon ese momento para parar. Al volver a grabar desde ahí, (“pinchar” que se le llama en el argot) se puede notar que un golpe del charles, (o hi-hat) suena como cortado en dos trozos. Otra curiosidad es que los dos acordes finales que dan paso al siguiente tema son los mismos que dan paso a la voz en “Breathe”.
Brain damage: Este tema de Waters también fue compuesto en la época de la grabación del “Meddle” y para mi guarda un gran parecido en su base rítmica con “If”. La referencia a Syd Barrett en la letra de la canción es evidente, y quizás por eso la canta Roger como solista, por hacer más completo su “homenaje”, (sólo cantó esta y “Eclipse” en todo el disco).En el “premix” las risas eran excesivas y en mi opinión no sólo estropeaban el tema, sino que lo banalizaba. Afortunadamente en el disco quedó sólo ese trocito al final, con la risa y la voz de Peter Watts, road manager de la banda en aquella época.
Eclipse: Waters hace aquí una especie de resumen de todo lo dicho anteriormente en el disco, en un espléndido tema que va subiendo de intensidad a medida que avanza, apoyado por un órgano muy en primer plano y los coros femeninos con efecto “pinkfloydiano”, y culminando con la vuelta a los latidos de corazón del principio. En el “premix” no hay órgano al principio, (se echa mucho de menos) y hay grabadas otras guitarras distintas, algunas de las cuales son de poca calidad musical y fueron completamente eliminadas, (por fortuna) de la mezcla definitiva.
Javier Marchante