El jueves 16 de enero nos rindieron visita en Madrid los Titanes del metal progresivo Dream Theater. Lo que todavía no tengo claro es si vinieron a presentar su nuevo disco o a hacer una representación física de la definición de uno de sus discos “Systematic Chaos”. Tengo que deciros, que normalmente escribo las crónicas de inmediato, pero en esta ocasión, he tenido que dejar pasar unos días para poder digerir el “mal rollo”, la rabia y la frustración de lo que aconteció aquella noche.
Texto: Toni Marchante
Fotos: David Aresté

Vamos a los hechos y después opinemos sobre ellos, pero lo que está claro, es que aquí las responsabilidades competen a todos y cada uno de los implicados: la logística de la banda (es decir la banda porque es responsabilidad suya), promotores y las incompetentes autoridades municipales de las que disfrutamos los ciudadanos de Madrid. Lo que está claro, es que como siempre, aquí el que paga el pato es el espectador, que es a quien se ha estafado. No entiendo como los promotores pretenden seguir teniendo trabajo, cuando al que paga se les trata con desprecio, con precios abusivos (incrementados por el competitivo IVA cultural de este país), como a borregos, generando el que cada vez vaya menos gente a los directos. Si esa es la gestión y visión comercial que se tiene sobre el negocio, se producen los resultados que desde hace tiempo venimos viendo en nuestro país, la exclusión de nuestro país en los circuitos de gira de muchas bandas y los grandes festivales que se han ido extinguiendo en un goteo continuo casi hasta llegar a su extinción (Sonisphere, Metalway, Mosters of Rock, Dr. Music Festival , Summer Case, etc..).

La apertura de puertas para este evento estaba anunciada para las 19:00 horas, por lo que con la intención de coger una buena situación sentadito llegué con bastante antelación. A Dream Theater me gusta verlo sentado, disfrutando del espectáculo, fijándome en los detalles…el hecho de que se trate de un concierto en formato “an evening with” potencia ese deseo, pues se trata de tres horas que te evitas de estar de pie. En tu asiento, te levantas y saltas cuando la emoción te catapulta, pero puedes saborear el espectáculo, por eso saqué entrada de “Grada”.

El precio de la entrada fue alto, 45 € (hacemos constar que el mismo espectáculo costaba 30 € en Oporto dos noches antes). Para todo mortal que quisiera ver a los Dioses del Progresivo después de las navidades, en plena cuesta de enero, en un país sumido en la crisis (por mucho que nos quieran vender que estamos remontando), con unos índices de paro de record y con un entorno donde lo cultural parece pecado, supone un grandísimo esfuerzo (por no hablar de los que desgraciadamente no se pueden permitir el lujo)… Pero leches!! Es Dream Theater en formato de tres horas, por lo que hay que hacer un esfuerzo porque la ocasión lo merece!.

Llego, me pongo en la cola y llegaron las 19:00. Hacía un frío de esos que hace cuando el grajo vuela bajo, las 19:30, las 20:00…¿qué pasa?. Ninguna información. A partir de esa hora nos empezamos a mover un poquito; estaban dejando acceder a la gente con cuenta gotas y de forma muy lenta. Cuando la cola llega a una valla te encuentras con un cartel que dice que no se habilita la zona de gradas y que todo el mundo va a pista. ¡Pues vaya faena! ¡A estar a pies quietos tres horas!, pero leches!!! Son Dream Theater, lo que haga falta!!.

Entramos en el recinto y a las 21:00 empieza a sonar la intro “False awakening Suite“, cuando el aforo está medio vacío, todavía hay mucha gente fuera en la cola. ¿Y los dibujitos de la intro?. El caso es que suena la intro y en la lona que cubre el escenario no se proyecta nada y encima la intro se entrecorta tres veces durante su reproducción…termina cae la lona y detrás aparece el repoker magistral de músicos abriendo con “The Enemy inside”. Y en ese momento se te olvida todo, empiezas a disfrutar y realmente no le das importancia a lo ocurrido porque ahí estás, los cinco americanos que han venido para dárnoslo todo y aquí estamos los que estamos para disfrutarlos a tope. En un primer momento el sonido parece algo desajustado y la voz de James suena baja de volumen (típico en el arranque), el escenario parecía algo desaliñado, algunos focos parecían no funcionar, pero el tema de apertura nos hizo entrar a todos en calor.

La siguiente en sonar fue “The Shattered Fortress”, la síntesis de la Oda a los 20 pasos para dejar el alcohol, la primera de las múltiples sorpresas para los que no conocían el set list; magistral, con Rudess inclinando lateralmente su teclado y haciendo uso del continuum. Al finalizar las primeras palabras de James Labrie que nos comentó que habían tenido una serie de problemas con el video y por ello no vimos la intro y por la misma causa imagino que durante todo el concierto no vimos ninguna imagen preparada en el gran monitor trasero, donde durante todo el concierto se reprodujeron imágenes del propio concierto (por cierto, con unas centésimas de desfase con la imagen real). Estas proyecciones del concierto resultaban muy interesantes, con cámaras situadas encima de la calva de Rudess por ejemplo o en plano de planta de la batería de Mangini que parecía capitanear una nave espacial, que no era más que su descomunal kit.

Tras ello “On the back of Angels” tema reciente de su anterior álbum que la gente celebró con animosidad, para a continuación continuar con otro tema de estreno “The looking glass” que sonó de lujo, con esa aureola a Rush innegable. Tras ello otro de los grandes regalos de la noche “Trial of tears”, el tema largo del álbum “Falling into Infinity”, auténticamente espectacular, con John Myung en plan estelar, con un sonido impecable, con ese momento donde Petrucci y Myung se colocan a los pies de la nave espacial de Mangini para cruzar sus miradas hasta el infinito. Lo siguiente en sonar fue “Enigma Machine”, el tema instrumental del nuevo disco donde Mangini fue el auténtico protagonista, incluyendo un mini solo muy entretenido donde nos llegamos a plantear si Mike tiene un cerebro para cada brazo dentro de su cabeza… siguieron con el nuevo disco con “Along for the ride” que me gustó mucho más que la versión del disco.

Antes de acometer el último tema de este primer set, James nos anuncia que este año se conmemora el aniversario de dos de sus discos “Awake” que cumple 20 años y Scenes from a Memory” que cumple 15 y que por ello, nos tienen preparado una sorpresa para en segundo set. El set 1 concluye a lo grande, con “Breaking all illussion”, un tema que la gente recibió con mucho entusiasmo, coreando con James al unísono en una interpretación colosal que nos hizo tocar las puertas del cielo, llegando al descanso que separa los dos sets en los que consta el concierto. Este receso vino bien para comentar las jugadas con los compañeros de concierto y compartir lo bien que lo estábamos pasando.

Tras quince minutos, comenzaron los bloques conmemorativos. La sección “Awake” arrancó contundente, los riffs de Petrucci invadieron el recinto, el tren de “The Mirror” transitaba por la sala y Jordan Rudess tomó el escenario con su teclado curvo NUmotion que sujetaba sobre un soporte que colgaba de sus hombros, moviéndose de un lado para otro y cambiando algunas líneas melódicas respecto de la original. Tras este tema (como no puede ser de otra forma y como sucede en el disco) llegó Lie, con un James brutal y Petrucci espectacular en los solos. Por si fuera poco la siguiente fue “Lifting shadows off a dream” y sonó magistral, entrañable con una calidad auditiva asombrosa. Y llegó uno de los momentos estelares de la noche, la hora de interpretar uno de los temas desterrados para el directo, “Space Dye Vest”. Esta canción fue compuesta por Kevin Moore y el hecho de que abandonara la banda en el momento del lanzamiento de “Awake” hizo que hasta ahora nunca hubiese sido interpretada en directo. Ahora es el momento y nos la ofrecieron como un gran homenaje y sonó con sentimiento, potenciando la parte final enfatizando su emotividad.

Tras un mínimo parón comienza el momento Metrópolis Part. 2 y lo hizo con una buena selección de temas, comenzando con “Overture 1928” y “Strange Deja Vu” de corrido, impecables y con las variaciones en la batería que nos muestra Mangini, que marca su estilo, a diferencia del original y que le da otros matices rítmicos. El resto de los componentes de cátedra, auténticamente impresionantes. En “The Dance of Eternity” se produjo quizás el único error de sincronización cuando Mangini se perdió por el camino por unos momentos retomando el hilo, dejando patente que están en el inicio de la gira y que los temas antiguos aún debe aprenderlos. Para finalizar el repaso, la grandiosa “Finally Free” que interpretaron perfectamente, demostrando que pese a todo lo que se diga por ahí, no es un grupo en decadencia, que siguen siendo igual de alucinantes en directo que siempre, que son unos músicos dotados de un don único y que nos seguirán dando muchas alegrías en el futuro, que evidentemente no gustará a todos por igual.

Al finalizar “Finally Free” James se despide del público y la banda se acerca al borde del escenario para agradecer al público la generosa ovación. La cosa empieza a oler mal, que raro que saluden tanto tiempo, si queda el bis y además seguro que nos regalarán “Illumination Theory” el buque insignia del nuevo álbum. La banda saluda en conjunto y se retira, la gente pide otra, se encienden las luces y los operarios comienzan a desmontar el escenario. En ese momento se me cae el mundo encima, no puede ser, la gente empieza a abuchear y silbar. Salimos de la sala y vemos que nos encontramos en estado policial. ¿Qué pasa? ¿Hay una bomba?.La antesala del palacio está llena de policías municipales y fuera esperan unas cuantas unidades de la policía nacional.

El concierto fue buenísimo, pero podría haber sido memorable. Es una profanación ver este concierto de la gira de su último disco y no escuchar “Illumination Theory”, al igual que la falta de un tema tan significativo como “The Bigger Picture”. Si todo se hubiera desarrollado como debiera, los contratiempos iniciales se habrían olvidado fácilmente, porque el concierto que nos ofreció el quinteto americano fue soberbio. Pero este “coitus interruptus” nos dejó a todos destrozados, precisamente por eso, porque todos estábamos en estado de éxtasis, y al estar volando tan alto la caída fue demoledora.

La asistencia fue muy floja comparada con las visitas de DT en los últimos 10 años, no llegamos a alcanzar los 2.000 espectadores. Los promotores que supongo estarían muy preocupados por el mal negocio quisieron recortar gastos, vendieron entradas de Grada que obligaron luego a cambiar por Pista. No entiendo como los promotores no tienen previsto solucionar contratiempos como este (retrasos, buscando permisos especiales o empezando antes…), que visto lo visto se pueden producir. Pero lo que me parece más grave es la falta rotunda de comunicación antes durante y después de lo ocurrido. Ni una nota de prensa posterior que clarificara lo ocurrido para que evitemos emitir juicios que no se correspondan con la realidad. Ese silencio nos hace intuir que ahí hay mucha parte de la responsabilidad. Los promotores deberían ser más honestos, haber emitido un comunicado explicando lo sucedido y al menos haber devuelto la parte alícuota de la entrada por el espectáculo recortado, que fue casi de un tercio del tiempo.

Como no sabemos más que los comentarios y chascarrillos sobre lo sucedido, parece ser que la responsabilidad del retraso correspondió al equipo técnico local y no a la logística de la banda. Un grupo de este calibre no puede estar sujeto a hipotecar sus conciertos y su reputación con dificultades técnicas o retrasos de este calibre. Si hubiera alguna responsabilidad imputable al equipo de gira de Dream Theater sería inaceptable. Quiero pensar que la banda no estuvo informada hasta el final de la situación, porque de buen seguro, si lo supieran, seguro que se hubieran perdido el descanso para ofrecernos algún tema más. Si el grupo conocían la situación (cosa que desconozco) no tienen perdón.

Y para culminar los despropósitos, para mí la clave y lo que pudo haber salvado finalmente la noche, pero lo que hizo fue acabar de destrozarla. La normativa municipal de esta ciudad que deja muestras una vez más, de que más que en una democracia nos encontramos en un régimen dictatorial, donde se limita la hora de finalización de eventos en recintos autorizados. El Ayuntamiento de Madrid, cuyos responsables en esta materia deberían estar en la cárcel por su responsabilidad en desgraciados acontecimientos ocurridos en eventos multitudinarios por graves irregularidades que nada tiene que ver con el límite horario, instauran el “toque de queda” y enviaron un destacamento policial a Vistalegre para exigir la finalización antes de las 23:30. En la calle, furgones de la policía nacional nos esperaba invitándonos a dispersarnos lo antes posible. Eso sí, cuando se ganan las elecciones o algún trofeo de fútbol, todo el mundo puede ir al sitio de rigor a cantar, bailar y hacer ruido hasta altas horas de la madrugada que no pasa nada. Todos conocemos del talante de nuestra alcaldesa, todos conocéis de sus peripecias, estos días la escuchamos hablar de “Atentados” y se le ha olvidado mencionar este de esta noche, que curioso.

Dream Theater son muy grandes, pero lo de anoche les bajó del cielo a la tierra. Espero que nos sepan compensar la próxima vez que vengan, espero que los promotores sepan tomar nota y corregir sus errores y espero que este país y esta ciudad cambie algún día y se den cuenta de que la libertad y la cultura son algunos ejemplos de valores a potenciar en detrimento del abuso, la incompetencia y la corrupción, aspectos que en nuestro país se han venido desarrollando con frecuencia, éxito e impunidad.

Texto: Toni Marchante
Fotos (concierto Barcelona): David Aresté
Click en las fotos para ampliar
Click aquí para ver la galería del concierto

Set List de Dream Theater – 16/01/14 @MAD

SET 1

False Awakening Suite
1. The Enemy Inside
2. The Shattered Fortress
3. On the Backs of Angels
4. The Looking Glass
5. Trial of Tears
6. Enigma Machine
7. Along for the Ride
8. Breaking All Illusions

SET 2:

1. The Mirror
2. Lie
3. Lifting Shadows Off a Dream
4. Space-Dye Vest
5. Overture 1928
6. Strange Deja Vu
7. The Dance of Eternity
8. Finally Free