Aquí está el segundo hijo de Dream Theater con Roadrunner Records, que después con su más que productivo inicio de relación con el anterior “Systematic Chaos” llega este “Black Clouds & Silver Linings”, a la venta desde el pasado mes de Junio.
Parece ser que los americanos tienen estudiada o bien guardada, eso que se le llama la fórmula de la inspiración divina, o en su caso eterna… Ya que con sus 25 años de carrera y con un único cambio de formación en sus filas siempre sacan de su chistera temas y temas complejos, entrelazados y técnicos a más no poder… Esta vez son dos menos que en el Systematic Chaos, aunque si mal no recordamos vuelven a pasarse de la hora en el minutaje del disco.
La intro misteriosa nos pone en situación para encarar “A Nightmare to Remember”, relacionándolo con ese aspecto tétrico y dramático de la historia del título. Petrucci es el que marca el ritmo de la canción mientras que Labrie canta en un registro muy clásico, para luego desarrollar tres pasajes que conforman los 15 minutos que dura la canción. El primero es el más potente con el riff que comentábamos de Petrucci y un trabajo más destacado de Portnoy. Los cambios son hacia partes más melódicas, épicas y sinfónicas, recordándonos a partes del Octavarium llenas de solemnidad. Hacía el final de la canción hay una parte instrumental que despierta la parte potente del tema , y donde Portnoy se arranca como cantante principal en algunos versos, aunque acaba como el resto.
“A Rite of Passage” resulta ser el primer single del disco aunque dure más de 8 minutos. Cumple sin problemas las funciones de single ya que la letra es directa y pegadiza, al igual que el ritmo que deja de ser tan técnico como el anterior pero sigue siendo rápido y entrelazado. De nuevo Petrucci es parte importante de la canción ya que se nota su riff durante todo el tema acabando con un solo doblado con Rudess.
Con “Whiter” llega un receso de tranquilidad tras lo que habíamos oido y lo que nos queda en los siguientes cortes. Este tema podría haber salido en aquel “Elements of Persuasion” de Labrie ya que sigue aquel tono calmado y melódico de algunos de los temas de aquel disco. Destacamos el papel de Portnoy y Rudess, ya que mientras el primero marca el ritmo de la canción el segundo pone las ambientaciones y el tono elegante al tema. Acaban con un buen solo de Petrucci, lleno de sentimiento como se merece este medio tiempo que Labrie canta sin ningún tipo de problema.
Y de la más corta pasamos a una de las más largas como “The Shattered Fortress”. El tema es la parte final de la historia que comenzó a explicar Mike Portnoy sobre sus problemas con el alcohol en “The Glass Prison” en el 6DOIT, y que ha seguido en los siguientes discos y ha acabado en este como hemos dicho.La tónica de todo el tema es de un ritmo potente y compacto que acompaña a un Labrie que hace lo propio con su voz, ambientando todos la parte final y quizá un tanto “apocalíptica” de la historia indicando el final de la saga. Para relacionar esta parte con las anteriores hay varios guiños en algunos compases del tema que recuerdan a las anteriores canciones. Dentro de los 12 minutos tenemos más intermedios y pasajes instrumentales con solos y cambios de ritmo comprobando la agilidad y la solvencia típica que nos tienen acostumbrados los instrumentistas americanos. Sólo queda ver si interpretaran toda la suite en directo como comentaron más de una vez.
El piano de Rudess presenta, “The Best of Times”, el hermano mayor de “Wither”. No sólo por su temática más profunda y personal, sino por su duración ya que vuelve a pasar a los 10 minutos de duración. Como decimos, este tema lo ha escrito Mike Portnoy en homenaje y recuerdo a su padre que falleció cuando grababan el disco. Se trata de un medio tiempo fino y elegante… ágil por momentos y con ciertos aires “modernos”. Labrie vuelve a estar soberbio al igual que toda la banda.
Ya dicen que lo mejor se deja para el final, así que “The Count of Tuscany” es la que cierra el disco con sus 19 minutos de duración. Tras sus 4 minutos de intro instrumental vemos a una canción galopante con un buen ritmo potente gracias a la guitarra, batería, y bajo mientras que de nuevo Labrie pone fuerza al cantar. Dicha potencia se combina muy bien con el estribillo melódico y fácil a la escucha, donde previamente sale Portnoy cantando en el puente entre las estrofas y estribillos. Como es de esperar, en los 20 minutos que dura el tema tenemos varios pasajes en los que nos transporta la banda gracias a varios cambios de ritmo. Así que del potente pasamos a uno instrumental y técnico dando pie a uno más psicodélico de carácter acústico e intimista, para cerrar con otro solo de Petrucci con un ambiente muy solemne y emotivo gracias a Labrie y a los teclados de Rudess.
No es nada nuevo si acabamos diciendo que Dream Theater se han ganado la categoría del Ying y el Yang… Ya que mientras a unos su pasmosa técnica y complejidad musical les aburre, está el lado contrario… que quizá sea más amplio ya que les hacen entrar en las listas de ventas de varios paises, como España en el caso de este disco. Todo un mérito que un disco de metal progresivo de 6 canciones y que pasa de la hora de duración entrase en una lista tan simplista y generalista como la española. Cuando vengan en Octubre les daremos la enhorabuena.
David Aresté
Temas:
1. A Nightmare to Remember
2. A Rite of Passage
3. Wither
4. The Shattered Fortress
5. The Best of Times
6. The Count of Tuscany