Rulo y La Contrabanda están de estreno. Su nuevo disco en directo, desde un lugar tan original como el castillo de Argüeso, es una realidad. Nos reunimos con el cantante en la terraza de un céntrico hotel madrileño para tratar la actualidad de la banda. Con unas inmejorables vistas y la tranquilidad del lugar la conversación fluyó, y esto es lo que nos contó. Alberto López |
MetalSymphony: Lo primero de todo: gracias por dedicarnos un poco de tu tiempo.
Rulo: Gracias a vosotros.
MS: Antes de nada, y siendo ésta la primera vez que te entrevistamos para MetalSymphony, nos gustaría poner en antecedentes a nuestros lectores. Con La Fuga grabas 6 discos y das más de 300 conciertos hasta que en 2009 abandonas la banda. ¿Fue una ruptura traumática?
R: Bueno, todas las rupturas son traumáticas. Yo creo que tener una banda es como tener una relación sentimental: todo nace como para siempre y el 95%, me atrevería a decir, se van al traste. O lo que es peor, hay bandas que siguen y no se llevan bien, ¿no?. Cosa que también respeto ¿eh?, poner una banda ahí arriba cuesta bastante, entonces entiendo que también haya gente que llegue a acuerdos de mínimos. Yo en ese sentido preferí volar, preferí reinventarme y volver a empezar. No era una empezar de cero, porque ya había un bagaje, pero si fue bajar bastantes escalones.
MS: Ya como Rulo y La Contrabanda publicas “Señales de humo” en 2010, “A ras de cielo. En directo desde Santander” en 2011, “Especies en extinción” en 2012 y ahora este nuevo directo que nos ocupa. ¿Que valoración haces hasta ahora de esta nueva etapa?
R: Bueno, increíble. Cuando yo deje mi anterior banda estuve un año con depresión en casa, estuve francamente mal. De moral sobre todo. Luego, cuando salió el disco y se puso numero 1 de AFYVE, que no lo había conseguido ni con La Fuga cuando hicimos una gira de 80 conciertos por varios países. Digamos que, ante la duda de si había acertado y todo ese rollo, en lo profesional, porque en lo sentimental si había acertado marchándome de un lugar donde no estás bien, pues ves lo otro y es como un espaldarazo a esa decisión tan arriesgada por un lado en lo artístico pero en lo personal yo soy de si no estoy a gusto… Sentimentalmente hago lo mismo, también por eso voy dando tumbos todo el rato, pero en cuanto no estoy bien, aunque este medio bien ya me marcho. Entonces en ese sentido el balance es increíble. Luego yo considero que La Contrabanda tiene dos discos, ¿no?. Está un poco mal que lo diga en la promoción de un disco nuevo, pero lo siento así. Yo creo que tenemos “Señales de humo” y “Especies en extinción”. Lo de “A ras de cielo” fue un poco que ya que hubo una gira muy bonita, que estábamos en un momento dulce, pues lo grabas en un DVD. Y con esto del castillo pues ha pasado lo mismo, hicimos 21 teatros en España, que es la cara B de la banda, porque la banda es electrica y su hábitat natural, para mi, es una sala donde haya sudor y rock and roll, no son ni los grandes aforos ni los teatros. Yo siempre he dicho, ya cuando componía en La Fuga se veía, que tenía como un cantautor dentro. De hecho todas las canciones de La Fuga y todas las de La Contrabanda nacen con una guitarra acústica y un papel. Los teatros como que te devuelven a ese hábitat primitivo, y cuando hicimos la primera gira de teatros con La Fuga descubrí que me encantaban
MS: Entrando ya en materia con este “Directo desde el castillo de Argüeso”. ¿Como surge la idea de grabar en un entorno así?
R: Yo lo que no quiero es hacer siempre lo mismo, estoy convencido que, fíjate que burrada voy a decir, hiciera 80 Palacios de los Deportes me aburriría. Y si hiciera 80 salas La Riviera me aburriría. Y si hiciera 80 salas El Sol me aburriría. Tengo que estar todo el rato cambiando, de aforos, de países… Lo del castillo nace de la necesidad de complicarnos un poco la vida y no hacerlo en un teatro que hubiera sido lo fácil. En un principio íbamos a grabar en un teatro, porque estaba siendo muy bonita la gira y queríamos inmortalizarlo y sacarlo en una edición especial para los más fieles, pero… El castillo está a 8 Km. de mi casa, y siempre que viene alguien de fuera a Reinosa pues le enseño el castillo, el nacimiento del Ebro que está al lado también… Un poco lo típico que enseñas a la gente de fuera. Y estaba enseñándoselo a unos colegas y María José, una de las chicas que trabaja allí me dijo que ese fin de semana había habido una bienal de música tradicional y que había quedado súper chulo. Y dije, pues aquí voy a grabar. Lo que no sabía era que iba a ser tan difícil.
MS: Lo intentasteis el año anterior, ¿no?
R: Esto, claro, fue hace dos años… Llovió, no se pudo filmar… Afortunadamente también, yo creo que todo sucede por algo, y ese primer año nos sirvió para darnos cuenta de que el escenario en vez de debajo de la primera torre quedaba bien en el centro . Nos dio para hacer una producción más chula. La gente verá el DVD, te verá ahí cantar y dirá “joer estos, lo que le han puesto aquí al Rulo”. Pero en realidad es un curro mío y de todo mi equipo durante un mes y pico. Y luego económicamente…
MS: Eso te iba a comentar, ¿es complicada la logística para llevar a cabo un concierto en un lugar como el Castillo de Argüeso?
R: Si, es muy complicado. Sabíamos que iba a ser complicado, pero no tanto. Luego nos dimos cuenta que todo el rato era como remar contra corriente, un rollo salmón masoca, pero al final merece la pena. Sobre todo porque no llovió. Toda esa semana estuvo lloviendo y a la banda, cuando estábamos preparando la de “Por Tí”, que la estábamos adaptando, les decía: no se porque coño me encabroné por segundo año. Porque veía que iba a llover, habían dado el 80% de lluvia… Estuve toda la semana bastante… no insoportable, pero si que me hablaban y no estaba. Era muy grande la ilusión que había. Este concierto nos ha costado más canas y más pelos que los 100 que vamos a hacer en 8 países. Habitualmente tu vas a tocar y está todo preparado. Sin embargo aquí no había toma de luz, no había baños químicos, no había escenario… Hubo que subir un trailer arriba de mala maniobrando de mala manera… Se cuidó todo muy al detalle.
MS: El lugar también tuvo que limitar el número de público. ¿Buscabas ese ambiente más familiar? ¿El lugar también tuvo que ver en elegir el formato acústico?
R: Si… Yo creo que también lo hemos llamado nosotros acústico de mala manera, porque en realidad es semi acústico. Nosotros mismos lo estamos presentando como un disco acústico pero en realidad está entre las dos cosas. Y lo del recinto… si. También hay que decir a la gente que es el patio del castillo, que es un patio muy caprichoso que tiene caída el terreno y te lo hace como un anfiteatro. Y entraban 800 personas. Y bueno, la idea era que los 800 se sintieran muy muy especiales, ¿no?. Nosotros mismos acabamos flipándolo. Cuando el viernes ya atardece y Miguel, nuestro técnico de luces lo echa todo a andar dices… Wow!
MS: La verdad es que quedó muy chulo
R: Es que parece como un plató. Tu ahora vas al castillo, lo ves por la mañana y no tiene nada que ver, ¿eh?. Del percal que montamos a lo que hay allí… De hecho María José, la chica del castillo que trabaja allí, que se dejó la vida en que se lograra todo, lo estuvo viendo y me mando un whatsapp diciéndome: vaya, si es que no parece mi castillo. Con respecto a lo que decías del aforo, que me voy por las ramas, la verdad es que me gusta cantarle cada vez a menos gente. Y me gusta lo otro también, ¿eh?. Obviamente todo el mundo lo que quiere es meter más gente. No es un ansía económica como muchos creen. Yo llevo una vida muy normal, no necesito mucho dinero, pero es por el ansia que tienes de crecer y sentirte querido. Y que tengas una canción que si se pueden emocionar 200 en vez de 5 mejor, ¿no?. Es una cosa natural de todos los artistas. Algunos parece como que no lo admiten, pero yo si reconozco que después de tantos años me gustan mucho los teatros porque se a quién le canto. El otro día hicimos, el 15 de agosto, un concierto de 20 años de Rulo y amigos en Torrelavega y la entrada estaba muy subvencionada y tal, pero entraron 10000 personas. Es un chute de alegría y de emoción, pero yo reconozco que prefiero, que estoy más cómodo en un aforo controlado. No se, hay sitio de 800 que no tienen magia y otros de 1200, o de 2000, que si. Pero si que prefiero ese tipo de aforos en los que le veo a la gente la cara y poder decir: pues le estoy cantando a este y a este, no a “esto”.
MS: Aquella noche estrenaste “Por ti”, tema inédito hasta entonces. ¿Formará parte de un futuro trabajo?
R: Pues si va a ser para el siguiente disco. Yo creo que la vamos a grabar, ya estaba maquetada. La vamos a grabar para que la gente vea como la vemos… porque electrificada no tiene mucho que ver. No se si como bonus-track, como la once… pero yo creo que tiene que ir. Igual ahora digo esto y luego cambia, tengo un torrente de canciones y de “Por Ti” estoy hasta los huevos, pero si, la idea es que si.
MS: El sonido es bueno y claro, sin dar la impresión de que haya mucho retoque a posteriori en estudio, pero… ¿Habéis caído en la tentación? ¿Ha habido que hacer algún retoque por absoluta necesidad?
R: Se nota que llevábamos 21 teatros. Si esto lo grabas a la primera te lo tienes que hacer todo en el estudio. Pero hay cosas, hay 2 o 3 canciones que el ampli de Fito petó, hacía mogollón de ruidos. Siempre que grabas pasa algo, en los teatros ese amplificador no dio nunca ninguna guerra. En medio del concierto me acuerdo que vino Chinas, el técnico de sonido, y dijo: “Rulo hay que parar”. Fíjate, en mitad de la grabación, que te corta todo el rollo. Estábamos en lo mejor… Todo el mundo con unas caras de acojone… Me puse a tocar un par de canciones que no van en el disco, que las improvisé, en lo que arreglaban eso. Y en las dos canciones en las que eso dio guerra pues se grabó luego entero. De voz está íntegramente sin tocar, eso se ve. Hay desafines, hay cosas… Patina la voz alguna vez, pero es que es así.
MS: Es a lo que me refería, porque se está cogiendo la mala costumbre de retocar en exceso los directos a posteriori en el estudio. Se agradece un directo que oigas que es natural, con sus fallos como en todos los conciertos.
R: Eso se sabe, eso se ve. Yo que se, coges la de “A Solas”, que la toco yo, y habitualmente la toco mal, pero no tanto (risas). Pero como estaba nervioso y era la primera canción…
MS: Tus letras siempre han sido muy personales. ¿En todas ellas hay vivencias propias? ¿Que te inspira a la hora de escribir y componer?
R: La verdad es que la vida son poquitas cosas. Yo lo he hablado con gente que hace canciones también y la verdad es que de la vida puedes hablar de pocas cosas. Salvo que seas un grupo que habla de rollos astrales y movidas, que los hay pero a mi no me gustan nada, son 4 cosas, los amigos, las relaciones personales y sentimentales, los países que te puedas encontrar… Sobre todo me influencian mucho las músicas cuando viajo. “El Vals del Adiós” es una canción que nunca hubiese compuesto en el primer disco de La Contrabanda. En ese sentido me considero bastante inquieto y aunque la banda sea una banda de rock and roll, y tenga una piel de rock and roll, se pone otros trajes. Y además, es que si no tienes la sensación de que estás componiendo siempre la misma canción. Pero me influencia todo eso, los viajes, la gente maravillosa que conozco y sobre todo no estar quieto.
MS: Me llama la atención tu frase al presentar “Al infinito”: “A mi solo me interesan las canciones que duelan”. ¿Puedes explicarnos esto?
R: Bueno, es una frase muy tremenda, dicha en caliente y sin pensar. Pero si, no se porque me gustan las canciones que me revuelven. También las que me divierten,¿eh?. Creo que la música está para divertir y para emocionar, pero más para lo segundo.
MS: ¿Hay canciones que siguen doliendo al ser interpretadas?
R: Si. “Por verte sonreír”… Digo antiguas, porque las nuevas claro que duelen. Claro que duelen “Heridas de Rock and Roll” o “La balada del despertador”, que se la hice a mi ex pareja con la que estuve 10 años. Así que imagínate cantarla ciertas noches.
MS: Que en el CD haya 16 temas y en el DVD 22 se debe únicamente al limite del soporte o hay alguna otra razón?
R: Si. Es una putada pero en CD entran 74 minutos. No entraban más. Aunque en realidad esto se concibió como un DVD con el regalo del CD, en vez de al revés. Estaba todo concebido como algo audiovisual, para mi el CD se queda cojo.
MS: ¿Son inevitables los guiños al pasado en forma de canciones de La Fuga?
R: Si, porque si no las hubiera compuesto yo no podría. De las canciones que compuse para La Fuga, salvo dos del primer disco que hablan de que estoy borracho por las aceras, podría tocar todas. Las siento tan mías como las otras. Y no es egoísmo, lo digo sinceramente, si tu has sangrado una canción… No digo que sea mía, pero cuando la canto la siento como tal. Las canciones son de la gente al final.
MS: ¿Tienes la sensación de dirigirte a un público mayoritariamente femenino?
R: No. Lo que si que veo es que normalmente a muchos grupos van pocas chicas pues cuando van fifty-fifty pues parece que van muchas (risas). Así lo concibo yo, ¿eh?. En nuestro bolos no hay un 80% de féminas. Yo me atrevería a decir que es un 50-50, pero claro, habitualmente en las bandas de rock and roll van más tíos. Yo creo que no debería ser noticia que fueran tías a ver grupos.
MS: No, por supuesto. No era mi intención dar a entender eso.
R: No, ya ya, te he entendido. Alguna vez si que nos lo dicen, como… joer, van muchas tías. Pues la banda está encantada, claro (risas).
MS: ¿Cuales son vuestros planes más inmediatos como banda?
R: Ahora hacemos cuatro países de Europa en cuatro días, que es una cosa muy chula. Hacemos Irlanda, Alemania, Escocia e Inglaterra. Estamos terminando la gira de verano también, nos quedan 5 bolos todavía. Luego en noviembre hacemos Argentina, Chile, Colombia y México. Y luego 5 teatros nada más para presentar esto. Yo ya le dije a la oficina que a partir del 2 de diciembre me da igual quien llame porque no voy. Ese día terminamos en el Nuevo Apolo de Madrid, en este formato semi acústico, y yo ya avisé que pararía mínimo un año en España. Haremos algo en América, muy poquito, cuando haya algún festival potente, pero la idea es parar para componer y si todo va bien sacar algo a final de año. Si todo va medio bien pues para 2016, eso lo marcará mucho las canciones. Es que si no paro no compongo.
MS: Por nuestra parte nada más, agradecerte una vez más el tiempo que nos has dedicado.
R: Gracias a vosotros.
Alberto López