Hartmann + Aerial Blacked – 16 de febrero 2023 – Sala Utopía (Zaragoza)
Una de las giras más esperadas de este comienzo de 2023 era sin duda , la de Oliver Hartmann por nuestro país. Un polifacético músico y productor que ha participado en multitud de proyectos , siendo Avantasia uno de los más conocidos.
En esta ocasión Hartmann venía a Zaragoza a presentarnos su nuevo trabajo de estudio, “Get Over It” , que ha cosechado muy buenas críticas entre los medios especializados y el cual fue publicado a finales del pasado año. Entre la formación que acompañaba a la gira de Hartmann, y sustituyendo a Armin Donderer se encontraba nada más y nada menos que Dennis Ward (bajo y coros) , productor y músico a partes iguales , protagonista de los ya míticos Pink Cream 69 , pero también culpable del sonido de los trabajos de Place Vendome entre otras bandas. Oliver Hartmann como guitarrista y voz principal, Markus Kullman (batería y coros) y Markus Nanz (teclado y coros).
Sin duda , una formación de auténtico lujo de la que tendríamos la oportunidad de disfrutar en directo. Pero antes , era el turno de Aerial Blacked , banda procedente de Barcelona con una larga trayectoria discográfica, habiendo creado cinco trabajos de estudio hasta la fecha. Con una puntualidad exquisita , Héctor (guitarra y voz principal) , Jésus (bajo) , Gustavo (batería) y Joan (segunda guitarra) saltaron al escenario con unas ganas inmensas, dando rienda suelta a “The Ether” proveniente de “Play It Loud!” su último trabajo de estudio. Sonido arrollador y huracanado así es como salió la banda con “The Ether”.
Sin pausa alguna, Héctor presentó “The Struggle”, una amalgama de apisonadoras rítmicas a cargo de Gustavo y Jesús , haciendo ambos una labor bestial en esta descarga. Adrenalina a raudales así es como podríamos describir los primeros pasos de Aerial Blacked sobre Utopía, y para muestra un botón, siendo “Iron Bones” la encargada de enlazar el show de forma notable.
A continuación “Ignitio” fue la responsable de meterse al público en el bolsillo , gracias en parte al derroche de energía de la banda y su muy buena puesta en escena. Y es que enseguida se nota cuando una banda lleva tiempo en esto, y Aerial Blacked llevan metidos en los escenarios de nuestro país desde 2014, casi nada. Para aquellos que se pregunten qué tipo de Heavy Metal hacen los de Barcelona, me atrevería a decir que tienen un cierto toque System Of A Down, pero también aprecie tintes más Hardcore cuando escuche en directo “Joker & Ace”.
Entrando ya en más de la mitad del show, Aerial Blacked empiezan las primeras notas de “You Made My Way” una preciosa balada al más puro estilo Nickelback , con cambios de ritmo constantes y que nos dejó emocionados aquella noche. “Lights Out!” sería la siguiente de la lista, siendo esta una de las composiciones con la que la banda grabó un videoclip y cuyos fondos fueron destinados para luchar contra el cáncer infantil.
Tras una gran ovación del respetable después de interpretar “Lights Out!” , era el turno para “Play It Loud!” que como su nombre indica sonó brutal y con unos Aerial Blacked muy compenetrados. Prácticamente sin darnos cuenta , nos encontramos en el tramo final con “Rebellion” y “Stockholm Syndrome” de Muse , el cual sirvió para poner el punto final a un muy buen show, con una banda al unísono y queriendo en todo momento dejar un buen sabor de boca, y sin lugar a dudas en mi opinión, lo consiguieron.
Ahora era el momento del plato fuerte de la noche, saltando a la Sala Utopía, Oliver Hartmann, Dennis Ward, Markus Nanz y Markus Kullman. La primera en sonar fue “Can’t Stop This Train” una de las gemas pertenecientes a “15 Pearls And Gems”. Con esta descarga , Hartmann empezaba de forma suave y tranquila para ir in crescendo poco a poco , siendo “One Step Behind” la encargada de recordarnos el fantástico último trabajo del Aleman, “Get Over It”.
Cabe destacar la importante labor de coros que se apreció durante todo el show, siendo “What You Give Is What You Get” una de las más destacadas en este sentido. Tanto Ward como Nanz estuvieron totalmente compenetrados en su labor vocal y “What You Give Is What You Get” sonó increíble. Como he señalado anteriormente , el concierto fue de menos a más y de esta manera Hartmann se metió de lleno en el Hard Rock y el Blues más crudo con el single “The Gun” , dejándonos con una muy buena sensación de lo que estábamos apreciando aquella noche.
Teclados exquisitos y con mucho feeling sirvieron para abrir “Walking On a Thin Line” una verdadera maravilla de composición donde pudimos observar también la calidad de Oliver Hartmann como guitarrista. A continuación retrocedimos hacia el pasado hasta llegar al álbum “Hands On The Wheel” y más en concreto “Don’t Want Back Down” fue la encargada de continuar un show estaba siendo espectacular en todos los sentidos, tanto por parte de la banda como por parte del público que se encontraba totalmente volcado.
Hartmann continuó rescatando más joyas de su carrera en solitario y ahora era el turno de “The Sun’s Still Rising” , una canción que tiene ya la friolera de 17 años y que sigue perfectamente vigente a día de hoy. Mención especial en “The Sun’s Still Rising” hacia Kullman , el cual dejó entrever su gran capacidad rítmica en la batería. Algo similar ocurrió en “I Won’t Get Fooled Again” con un Dennis Ward totalmente volcado en su labor al bajo y compenetrado con Hartmann para deleitarnos de una impresionante composición como es “I Won’t Get Fooled Again”.
Ahora era el momento adecuado para retrotraernos en el pasado del Hard con uno de los clásicos por excelencia, el mítico “Simple Man” del “Hands On The Wheels” donde Eric Martin colaboró junto a Oliver Hartmann. En esta ocasión, Dennis Ward se encargó de las voces de Eric Martin, haciendo una labor realmente encomiable. El punto romántico de la velada lo puso “In Another Life”, una impresionante balada incluida en “Get Over It” que nos emocionó por completo.
Siguiendo con una pisada más fuerte, Hartmann nos deleitó con “Cold As Stone” para enlazar con la suavidad y la elegancia de uno de los trabajos de estudio que más me gustan, “Balance” , siendo “After The Love Is Gone” la escogida para poner un broche de oro a una velada de ROCK que estaba siendo espectacular.
Hartmann quiso dar un pequeño repaso a sus primeros trabajos en solitario, y prueba de ello fue “Don’t Give Up Your Dreams” perteneciente a “3” y causando furor entre el público allí presente, debido a la gran interpretación de la banda y lo que en sí transmite la propia letra de esta composición. De esta manera, a través de “Out In The Cold” y “Alive Again” nos envolvimos en el pasado más íntimo del Alemán , el cual quiso rememorar este gran clásico de su carrera discográfica.
Ambas descargas sonaron bestiales, pero si me tuviera que quedar con una de ellas sin duda sería con “Alive Again” ya que transmitió una fuerza y un sentimiento que muy pocas canciones en directo pueden llegar a transmitir. Y estos aspectos fueron gracias a una banda que se notaba que estaban disfrutando sobre las tablas al cien por cien.
Así Hartamann se despidió del público, pero no tardó demasiado en salir de nuevo al escenario , debido a las ovaciones del respetable que pedían más canciones , escuchándose bandas como At Vance o Avantasia. Y por sorpresa y sin aviso previo, Oliver Hartmann dijo que iban a tocar un cover de ABBA y como no podía ser de otra manera, sería “The Winner Takes It All”, el cual ya se incluyó en el “DragonChaser” de At Vance. “The Winner Takes It All” sonó fantástica , con una esencia única y un público firmemente volcado con la banda.
Como colofón a semejante descarga de sentimientos , “Music” de John Miles sería la “culpable” de dejarnos con una sonrisa de oreja a oreja y la encargada de cerrar un impresionante show donde el intimismo y la elegancia se enlazaron a la perfección para hacernos disfrutar del significado de la música en la vertiente ROCK. Sin duda alguna, pudimos corroborar que Oliver Hartmann y la banda que le acompaña disfrutan al máximo con lo que hacen y como no puede ser de otra manera, esto se transmite en directo también al público. Energía, elegancia , sencillez y cercanía a partes iguales podrían ser los calificativos más apropiados para definir brevemente lo que pudimos apreciar el pasado dieciséis de febrero en Zaragoza.