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Aún recuerdo perfectamente el día en el que me acercaba a una de las más famosas tiendas de discos de metal de Barcelona en busca de nuevas compras; una de ellas iba a ser con casi toda seguridad el álbum debut de unos chicos de Finlandia que, según había leído en varios fanzines o alguna web extranjera, hacían un novedoso, fresco y espectacular death metal melódico. |
| Nota:4/10 |
No existían ni SoundCloud, ni Youtube, ni Myspace, ni nada que se le pareciese… pero, por suerte y debido a mis constantes visitas a aquélla y a otras tiendas, tenía cierta confianza con los encargados de los establecimientos y, en la mayoría de ocasiones, acababa escuchando los discos casi enteros en la propia tienda.
Ese día no se dio el caso pero, por recomendación del tendero, acabé comprando el primer cd de Insomnium con toda la ilusión del mundo. Ya en un primer momento me dejaron algo decepcionado; primero porque de novedoso tenían más bien poco y, segundo, porque dejando a un lado su escasa originalidad, tampoco me pareció que destacaran especialmente por su calidad.
A pesar de todo sí encontré alguna canción y algunos buenos detalles en aquel disco, pero para nada me convencieron en los más de cincuenta minutos que duraba. Aún así, les seguí dando oportunidades grabación tras grabación ya que de cada trabajo sacaba algunas (pocas) cosas positivas y tenía la esperanza de que, alguna vez, grabaran un álbum genial que me hiciese cerrar la boca y me sacase los colores. Pero no; Insomnium son, para mí, una banda totalmente sobrevalorada que tiene detrás una inmensa legión de fans (por lo que he ido viendo, bastante jóvenes, todo hay que decirlo) que apenas conocen los primeros trabajos de Amorphis o Katatonia, máximos referentes, junto a Dark Tranquillity, de la música de Insomnium.
Después de escuchar este nuevo trabajo, ya no caigo más en la trampa; Insomnium llevan ya seis álbumes, pero creo que, haciendo una selección de sus mejores canciones, podríamos completar solamente un excelente disco o, a lo sumo, dos medianamente buenos.
Centrándonos en “Shadows Of The Dying Sun” (título muy “original”…), nos encontramos con exactamente lo mismo que han ido ofreciendo una y otra vez a lo largo de su trayectoria: canciones con un metraje bastante largo para lo que es el estilo, muy melodiosas, épicas y melancólicas por momentos, donde predominan los medios tiempos en los que las guitarras de Ville Friman y las voces agresivas del también bajista Niilo Sevänen llevan el peso, habiendo muchas partes donde siguen utilizando las voces claras del propio Ville y los teclados a cargo de Aleksi Munter (Swallow The Sun) para darle un aire aún más sentido a sus, ya de por sí, poéticas letras.
Es cierto que en la mayoría de canciones tenemos varios tipos de riffs y la batería intenta dar cierto ritmo pero, salvo en contadas ocasiones, me da la sensación (ya sé que no es realmente así) de que todo discurre a una misma velocidad y todo queda englobado bajo las repetitivas melodías que bien poco ofrecen que no se haya visto ya en decenas de grupos y casi centenares de discos en los últimos veinte años. Algo muy parecido a lo que están haciendo últimamente sus compatriotas Omnium Gatherum, con los que ahora comparten al guitarrista Markus Vanhala, aunque estos últimos son un poco más interesantes y han adquirido un aire bastante más progresivo con los años.
Buenas canciones como “While We Sleep” y “The River” no llegan a salvar este disco, y es que a pesar de sus buenos riffs, constantes cambios de batería (blast beats incluidos) y algún que otro acertado solo de guitarra, no sorprenden en ningún momento.
“Lose To Night”, “The Promethean Song” o “Shadows Of The Dying Sun” son el claro ejemplo de lo anodino de su música en general; canciones prácticamente calcadas, a medio tiempo, con la misma estructura y los mismos recursos en todas ellas.Esto me ha hecho recordar las veces que he tenido e̶l̶ ̶g̶u̶s̶t̶o̶ la ocasión de verlos actuar en directo (siempre como teloneros) y que se me han acabado haciendo excesiva y angustiosamente monótonos y aburridos.
También hay tiempo para el típico melodeath con guitarras dobladas y melodías que ya habíamos escuchado hace dos canciones y que volvemos a escuchar en la siguiente.
Seguirán deleitando a quien ya disfrutaba con ellos o servirá de buena introducción al género para el que no los conocía porque, a pesar de todo, entra relativamente bien ya que es muy melódico, pegadizo en varias fases, y con el toque oscuro necesario para no sonar tan alegres como la mayoría de sus paisanos.
Si ya no te gustaban anteriormente o tienes algo más de criterio que seguir consumiendo melodeath por el simple hecho de venir de los países nórdicos y que te lo estén metiendo por los ojos, sinceramente, no te lo recomiendo.
Texto: V
Temas:
01. The Primeval Dark
02. While We Sleep
03. Revelation
04. Black Heart Rebellion
05. Lose To Night
06. Collapsing Words
07. The River
08. Ephemeral
09. The Promethean Song
10. Shadows Of The Dying Sun
