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Bonamassa, el guitarrista más prolífico de la actualidad saca a la luz este directo en el que da un repaso a sus últimos trabajos discográficos y, por desgracia, olvidando grandes éxitos y grandes temas de giras pasadas. Belch |
| Nota:7/10 |
Actualmente poca gente desconoce quién es Joe Bonamassa, tanto por su calidad instrumental como por la cantidad de publicaciones y proyectos en las que está inmerso. Se está convirtiendo en costumbre tener 2 o incluso 3 trabajos al año con el sello de Bonamassa, ya sea con Black Country Communion o en solitario. En este caso se trata de un directo íntegro, grabado en el Bacon Theatre de Nueva York, donde, como decíamos en la introducción, da cuenta de sus últimos trabajos de estudio, añadido con colaboraciones de auténtico lujo, como Paul Rodgers dando un producto, como poco, interesante.
Cuando uno escuche este trabajo, tiene que tener en cuenta cuál es el objetivo del mismo, no es un grandes éxitos ni otra forma de escuchar ciertos temas, sino dejar constancia de la gira 2011, una de las más exitosas del guitarrista.
El directo suena perfecto, la guitarra de Bonamassa suena gorda, redonda, oscura en su justa medida (en ese sonido marca de la casa tan reconocible y que le está aportando tantos éxitos), y toca todo, como era de esperar, de manera magistral. Este trabajo es una muestra más de cómo fabricar solos y frases sorprendentes y con ese toque diferente solo apto para los más privilegiados. De hecho, muchos solos están improvisados y los que no, tienen bastantes variaciones con respecto al original, haciendo gala de la gran capacidad de invención e imaginación que tiene.
El directo roza las dos horas, y, siendo puro blues, no se hace largo, ni cargante, pese al gran peso que tienen las guitarras como es normal. También destacar a la banda, tanto a nivel musical, como de sonido, creando un colchón armónico, denso e intenso, que facilita la labor del guitarrista y donde el control de la dinámica y la intensidad se torna fundamental. Quizás si me quede con ganas de algún corte más rockero y menos melancólico, pero esto dependerá de gustos subjetivos del oyente, como es natural.
Comienza con una intro con guitarra acústica, para dar paso al sonido de un tren del tema Slow Train, que abre el Dust Bowl, último trabajo puramente en solitario para dar paso, a una sucesión cortes directos, con raíces en el rock y en el blues, como Cradle Rock o When The Fire Hits The Sea (este último con ese ritmo años 50 tan vacilón), solo interrumpidos por otros mas intimistas como Midnight blues, donde la les paul del maestro recuerda al señor Gary Moore, siendo posiblemente la canción donde saque a relucir más su feeling y sentimiento a la hora de tocar.
Dust Bowl y The River sin embargo me han dejado una sensación agridulce, no siendo temas que me hayan encandilado ni que mejoren en directo (y eso que siempre suele ocurrir que este hombre mejora con creces en directo lo grabado en estudio.)
Como era de esperar, Beth Hart se anima a acompañar al mago de las seis cuerdas, haciendo un repaso a dos de los temas que aparecieron en el disco conjunto que hicieron hace poquito. La interpretación de Beth es simplemente perfecta, una voz rota, muy acorde al blues y que da un aire diferente a lo que ha hecho Bonamassa y también saca del letargo del público arengándoles y animándoles mucho más de lo que el guitarrista puede llegar a hacerlo.
Y continuando con grandes voces, qué se puede decir de Paul Rodgers, que da una clase magistral (y más comparado con Bonamassa que, si bien se defiende, no estamos hablando de un músico con una voz privilegiada) en una versión más que interesante del “Free and Water” de Free. Para acabar con las colaboraciones destacar la de John Hiatt participando en “I know a place”, de lo mejorcito que contiene aquel Black Rock y donde John le da un aire más negro y roto a la voz, un sentimiento de blues más puro y tradicional.
Del resto del trabajo, destaco sobre todo cómo les quedó Young Man Blues, intercalando fraseos de voz intimistas con locuras guitarrísticas en forma de riffs, con solos estratosféricos y no tan prototípicos del blues, sino con un cierto aire de entremezclarse con el Rock y el jazz fusión. Mountain Time es otro de los grandes aciertos, pese a que la alargan hasta el imposible, durante casi 12 minutos, la habilidad de cada uno de los músicos, como del propio Joe, hace que simplemente uno se quede con la boca abierta, tanto por las sensaciones producidas, los ambientes creados, como, otra vez más, los solos. Tampoco se me puede olvidar Steal Your Heart Away, con uno de los riffs más acertados que ha creado este hombre en solitario
Para cerrar, deja Woke Up Dreamming, donde él con su guitarra acústica saca ritmos blues y countrys casi imposibles (tanto por la complejidad como la velocidad de los mismos) y llena el escenario de una magia y una calidad solo posible para los más grandes. Final increíble de concierto de uno de los maestros del blues y que cualquiera que haya tocado la guitarra, simplemente flipará y no podrá más que quitarse el sombrero.
Como nota no tan positiva destacar que, durante todo el concierto, se oyen los aplausos del público al inicio de los temas, pero durante la ejecución de los mismos no hay una interacción o una simbiosis, y es que el público viene simplemente a disfrutar del musicazo. Sin embargo, sí que hecho de menos más cercanía con la audiencia, de cara a hacer los conciertos más divertidos y globales, y más en este directo que parece un disco de estudio con aplausos más que un directo con todas las de la ley.
Si me dan a elegir, me quedo con los ojos cerrados con el DVD del Royal Albert Hall, donde hace un repaso más intenso a toda su carrera (además del punto de los dos baterías tocando a la par). Además fue más novedoso la aparición del aquel directo, ya que ahora Bonamassa está llegando al punto de saturar al consumidor con tantas publicaciones. Sin embargo, este es un más que digno documento para los que no hemos podido disfrutar de este genio en la última gira. Bien es cierto que no es lo mismo que disfrutarle a un metro de distancia en directo, pero es un buen alimento para tener ganas de que el americano vuelva a dejarse caer por nuestras tierras.
Belch
Temas:
CD1:
01 – Intro
02 – Slow Train
03 – Cradle Rock
04 – When The Fire Hits The Sea
05 – Midnight Blues
06 – Dust Bowl
07 – The River
08 – I’ll Take Care Of You (With Beth Har
09 – Sinner’s Prayer (With Beth Hart)
10 – You Better Watch Yourself
11 – Steal Your Heart Away
12 – Bird On A Wire
14 – I Know A Place (With John Hiatt)
15 – Blue And Evil
17 – Fire And Water (With Paul Rodgers)
18 – Mountain Time
19 – Young Man Blues
CD2:
01 – If Heartaches Were N
02 – Woke Up Dreaming
