Seguimos con el viernes por donde lo habíamos dejado, y le llegaba el turno a thrash metal de los americanos Testament, y creo no equivocarme pero los de California se comieron como un cuarto de hora de su tiempo en probar sonido, todo un alarde de gilipollez extrema, evidentemente como la causa era ajena al festival el tiempo corría en contra de sus fans y a su favor, para no dar el callo. Texto y Fotos: Manu Cabaleiro |
Así que pérdida de tiempo, que bien lo podía aprovechar para hacer cosas más fructíferas, pero esto suele pasar y no fueron los únicos, pero sí los más tardones, así que vi los tres temas en los que nos dejaron hacer fotos y decidí irme a cenar para afrontar la recta final de este agotador día, visto el interés de la banda y el mío que se me había quitado del cabreo.
Con Kreator también hubo problemas con el sonido, parece ser que alguien sin darse cuenta desenchufó uno de los bajos, así que se tardaron más veinte minutos que hicieron que los planes que tenía se fueran al traste, entre ellos ver a Leize… a los que solo pude ver dos temas y me consta que tuvieron ambientazo… una pena, pero los festivales pueden ser imprevisibles, como la vida misma.
Los alemanes repetían en el festival, ya que habían estado en la edición de 2008 compartiendo cartel, con Saxon, U.F.O., Tokyo Blade, Exodus, Jorn Lande y leyendas como Sobredosis, Asfalto, Bloque o Ángeles del Infierno. No son de mis grupos de Thrash Kreator, no me acaban de enganchar, así que tampoco disfruté demasiado de su concierto, salvo un inicio brutal con “Phatom Antichris” en la que se fue el sonido, que no pude aprovechar para nada, ya que no se sabía cuando se iba a tardar y se me iba corría el riesgo de perderme los dos temas que me quedaban para hacer fotos (aunque para el mundo rojo de Kreator, casi da igual).
La vuelta con todo arreglado vino de la potente “Pleasure Kill” que da título a uno de sus mejores discos. Contaron con un numeroso público, que hubiera sido más sin el paron, pero los que se quedaron se entregaron y lo dieron todo a lo largo del concierto con trallazos de la importancia de “Violent of Evolutión” o la vertiginosa “Enemy of God” con un Petrozza cantando perfecto, sin moverse demasiado pero haciendo lo que siempre hacen.
El final del concierto de los teutones llegó con la ensordecedora “United in Hate” y el la despedida definitiva con caña de la buena made in Europe “Flag of Hate / Tormentor”, daban fin a un correcto concierto de una de las pocas bandas que resisten en el difícil mercado del thrash europeo, que a pesar de que no me acaban de entrar como quisiera sus temas, sí he de reconocer que en directo merecen la pena.
Y llegaba uno de los momentos fuertes del día de hoy y del festival, la presencia por primera vez en España de los inmortales Venom, los británicos son un mito viviente, que han influenciado a multitud de bandas de Thrash Metal y Black Metal, todo un referente como decía que atrajo a mucha gente a este Leyendas, y es que ver a Cronos y su banda no tiene desperdicio.
Tampoco los he seguido mucho, salvo en la época de finales de los ochenta/principio de los noventa, pero eso no quita para que tuviera muchas ganas de verlos en directo. Y he de decir que no me defraudaron, todo lo contrario me encantaron, hicieron un conciertazo, aunque muchos temas no me fueran familiares, pero es lo normal y lógico cuando uno no sigue a una banda y sus últimas grabaciones, pero sí puedo decir que no han perdido nada de su potencia y clase, que demostraron desde el principio con “Black Metal” que daba título a su segundo disco en el año de naranjito en el 82 y con el que continuaron para tocarnos “Leave me in Hell”.
El concierto continuo con “Hammerhead” de su último disco “Fallen Angels” 2011, y después mucho medley, mezclando temas nuevos como más antiguas, algo que quizá deslució un tanto su actuación y set list, siendo su primera visita, pero entendible dado la gran cantidad de temas que tienen y por querer satisfacer tanto a los seguidores más antiguos y a los más recientes. Así dejaron de sonar enteras, aunque sí pedacitos de temas de la calidad de “Bloodlust/Black Flame (of Satan)”, o “Possessed/Schizo/Live like an Angel (die like a Devil)”, como digo algo discutible, pero era lo que había y nos quedaban más “At war with Satan/Rip Ride/At war with Satan”.
Aunque seguirían con esta misma tónica otro buen pedazo de concierto, y vista la reacción de la gente no les iba nada mal, aunque se sacrificaron pedacitos de temazos como un remozado “Welcome to Hell/Hell” o “Buried Alive/Resurrection/The evil One/Straight to Hell” otro gran pedazo de historia de los británicos con la que pusieron el recinto patas arriba. Antes de la parte final sonaron temas más nuevos y que el público aceptó sin titubeos “Evil One” y “Straight to Hell”.
“Fallen Angels” que da título a su último disco y que la gente se lo tomó como descanso para el final que llegaría con dos de los temas clásicos de Venom, el primero un potente y crudo “Warhead” que puso a la gente mil y que no paró con el último tema de la noche que no podía ser otro que “Witchig Hour” que dejó a la gente exhausta pero creo que en general muy satisfecha con este primer concierto de esta mítica e influyente banda, en especial Cronos que es el único que resiste, y al que ahora le acompañan Rage a la guitarra y Dante a la batería.
Dejábamos el cartel internacional, para meternos de lleno en lo nacional con las dos bandas que hoy cerraban el día, en primer lugar Barón Rojo, más clásico y leyendero imposible, aunque faltaran en una edición… El comienzo fue un tanto accidentado por un problema de Carlos que desapareció durante unos minutos, en el que el resto de la banda se dedicó a improvisar un poco con Armando algo contrariado y con cara de preocupación.
Todo se solucionó tras cinco minutos y empezaba la descarga de los Barones, que vienen presentando su último disco “Tommy Barón” tan controvertido, pero que no deja de ser una joya, y bastante bien tratada por los hermanos, aunque personalmente no estoy muy conforme con sus letras en castellano, pero este es otro cantar… Concierto típico de la banda, con temas de todas las épocas y variando varios temas en los set list, lo que siempre se agradece.
Siempre es un lujo escuchar su temas más clásicos como “Las flores del Mal”, “Satánico Plan” o la siempre efectiva, pero también se atrevieron con su ultimo trabajo con temas como “La reina Ácida” o “El rey del Pinball”, que pasaron bastante desapercibida por una parte del público que resistía después de más de diez horas de conciertos. El ritmo del concierto no daba apenas descanso y así siguieron con su repaso discográfico con “El Presidente”, “Cueste lo que Cueste”, pasando por temas más míticos e históricos como “Larga vida al Rock’n’Roll” o “Con botas Sucias” dos de los temas que es rara la ocasión que faltan en sus conciertos.
El final llegó con otro gran pedazo de historia de Barón Rojo con una siempre emocionante “Concierto para Ellos”, a la que le siguió “Cuerdas de Acero” con un Armando descomunal, y para dar por cerrado el concierto “Resistiré” que dejó a la gente satisfecha de clásicos aunque alguno siempre queda en la cuneta o tachado de la lista, pero es una constante en grandes bandas y una tema que repetimos hasta la saciedad, los dichosos set list y los temas que se dejan en el tintero…
Ya solo nos quedaban los gaditanos Saurom por disfrutar, y recordando el show del año pasado, de cierre de festival, se me hacía difícil igualarlo o superarlo. Pues consiguieron superarlo de largo, todavía me pregunto de donde saca la fuerza y el ánimo toda la gente que se quedó a disfrutar del conciertazo que nos dieron nuevamente Saurom, con una puesta en escena espectacular, con unos telones de fondo preciosos, que daba un colorido especial, mucho fuego y sobre todo ganas de dar un gran espectáculo para recordar.
La fiesta y la colaboración de los chic@s de Wyrdamur, empezaron desde el inicio con “Acertijos y Tinieblas” donde apareció la pólvora en grandes cantidades, para pasar a la efectiva “La posada del Poney Pisador”, el fuego hizo acto de presencia con “Acertijos en las Tinieblas” y se prologó casi hasta el final de la maravillosa “Dracum Nocte” que están asentadas en su set list desde hace un tiempo y son todo un acierto.
La gente entregada desde la primera nota y ellos arriba haciendo lo que llevan haciendo tantos años, pero que cada vez y cada edición de este festival, que es donde los veo cada año, como mínimo, se les ve mucho más seguros y convencidos de lo que hacen, sin apenas errores y disfrutando de este dulce momento, al que se le suma su gran cantidad de fieles seguidores, con los que se hermanan mucho y hacen una gran familia. El escenario se volvió a llenar con el ritmo de “La leyenda de Gambrinus”, con todas las posaderas ofreciendo de beber y arengando al júbilo de la gran cantidad de público que disfrutaba de este espectacular fin de fiesta.
La banda como decía se entregó y se tenía bien aprendido el concierto, y así evitar accidentes con tanto fuego y pirotecnia, Narci disfrutó viendo a tanta gente y hizo disfrutar de sus sonidos con su flauta y guitarra, mientras el culo inquieto de José se movía de un lado para otro, saltando y animando a un público que ya estaba suficientemente metido y disfrutando del concierto, Raúl a la guitarra y coros, mientras Donovan daba rienda sueltas a sus platos y timbales, Santí disfrutando como el que más detrás de sus teclados y Migue cantando las historias juglarescas de manera sobrada y metiéndose en su papel con la posaderas.
El concierto continuaba con el repaso a sus últimos disco de la mano de una de mis favoritas “El monte de las Ánimas” que dio paso a la fabulosa “Irae Dei”, y una preciosad llamada “Ángeles”, perteneciente a su último trabajo “Vida” Llegando al final nos tocaron la ineludible”La musa y el Espíritu” y para la vuelta a escena de Wyrdamur que mejor que con una potente y fiesta como “Cambia el Mundo”.
El espectacular final con el escenario lleno de gente saltando, echando fuego y malabares varios vino con “Fiesta” y “La Taberna”, dos de sus principales baluartes para el éxito y que terminaron con fuegos artificiales para dar más espectacularidad si cabe al concierto. Todo un grandioso fin de viernes leyendero con Saurom, que por sus especiales show en el leyendas bien merecen estar en el mientras dure, y eso que no es fácil cerrar los días, pero ellos llevan unos cuantos añitos haciéndolo y con mucho éxito, vamos cada año más, y así la gente aguanta hasta el ultimo gramo de pólvora que nos regalan cada año.
Por este día sólo me queda por comentar lo que pude ver, fugazmente en el escenario Mark Reale, que tampoco fue mucho, pero algún tema de los nombrados Leize pude ver, pero me quedó la espinita clavada de no poder verlos casi enteros, y de la tanda de bandas pude presenciar a Azrael, haciendo un conciertazo y entregados de los que vi su parte final con “Para bien o para Mal” y la despedida con “Entre la espada y la Pared”.
También pude ver la parte final de los alicantinos Acero, a los que había visto en alguna edición anterior y que me volvieron a dejar un gran sabor de boca con sabor añejo, me encantó su actitud y sus temas también, aunque no conozca mucho de ellos, pero su actitud, sonido puesta en escena me gustó y me hubiera gustado haber visto un poco más de ellos, pero los escenario principales llamaban rápidamente a filas…
Pero pude sacar un momento para ver a los madrileños Viga, que están de aniversario de tres décadas, nada menos, así que había que estar con ellos por poco que fuera, y así llegué al gran momento de colaboración con Glory y Salva, una pena que no pudieran disfrutar de este momento más gente, pero como digo estaba imposible ver las actuaciones enteras, los madrileños se despidieron del leyendas con su personal versión del “Más Sexy” de Coz, en la que le cambiaron la letra para decir “más heavy”.
Con un gran cansancio acumulado nos retiramos a descansar, hasta dentro de doce horas en la que volverán a sonar las guitarras en el sábado de despedida de este grandiosa edición del leyendas del rock, así que en próximos días tendréis la crónica y fotos de lo que sucedió con Lujuria, Accept, Picture, Ñu, Obús, Belphegor o Ensiferum.
Texto y Fotos: Manu Cabaleiro