Los horarios me parecieron muy acertados porque entre grupo y grupo daban media hora de descanso, dándonos la opción de ir al baño o incluso a la tienda (porque estaba todo bastante cerca) y además el primer grupo del día no empezaba demasiado pronto, pudiendo levantarnos con calma, refrescarnos y no andar con prisas.
Ejemplo de esto fue la hora de comienzo de Týr, a las 13.00, aunque para algunos de los más fiesteros esto aún resultó demasiado pronto, hecho que se vio reflejado en el reducido número de asistentes, que una vez más se sometieron al calor para presenciar la actuación de los feroeses. Ataviados con cotas de malla y armaduras de cuero se lanzaron a dar un concierto que destacó por el carácter animado propio de los buenos vikingos. Los problemas de sonido no fueron impedimento para que los nórdicos continuasen con la juerga, para ello echaron mano del público pidiendo que cantaran el himno nacional, que fue respondido con el típico “alcohol, alcohol…”. Algo curioso, que precisamente una banda que enfatiza el valor de los símbolos históricos y nacionales se encuentre con que los españoles se sientan más identificados con ese tipo de himnos.
Hacía calor y para el deleite de muchas de las presentes, pudimos ver como alguno de los miembros de la banda tuvieron que rendirse ante las condiciones y acabaron quitándose la ropa para hacer más llevadero el concierto. Algo que me llamó la atención fue la entereza del bajista, que aguantó con su armadura de guerra y además nos cautivó con su perpetua sonrisa. Hubo muchas partes lentas que rompieron un poco con la dinámica del concierto, provocando así momentos de extrema diversión y otros, en contraste, demasiado relajados. Algunos de los temas que cayeron fueron “Hold the Heathen Hammer High”, “Eric the Red”, “Hail to the hammer” o “Wings of Time“.
Los que arrasaron ese día fueron Municipal Waste. Si ya de por sí es un grupo bueno en estudio, qué decir de ellos en directo. Como buena banda de thrash metal de la vieja escuela derrocharon una energía inigualable y su actitud en el escenario fue de 10. Hay que señalar que era uno de los grupos más esperados, como pude observar tanto en la gran asistencia como en las camisetas que llevaba casi todo el mundo.
Transgresores como ellos solos pudimos ver a Tony Foresta haciendo repetidos gestos que animaban a fumar y por si quedaban dudas sobre la sustancia en cuestión nos lo dejó patente al mostrarlo en un cartel donde en letras bien grandes y verdes podíamos leer la palabra marihuana.
También hicieron alguna gracia tras avisar que tocarían una canción extremadamente rápida, creando así la expectación del público y lo único que hicieron fue tocar estilo hardcore, dando algún salto a la vez para finalizar burlándose del “rap” enfatizando así que ellos son del espíritu del thrash de la vieja escuela.
Pudimos disfrutar de temas como “Blood drive”, “Terror Shark”, “Sadistic Magician”, “Mind eraser”, “Beer pressure”, “Unleash the bastards”, “Headbanger Face Rip”, “Born to party” y el tema “I want to kill the president”, el cual fue tocado repetidas veces, a cada cual más rápida, llegando al punto de la locura. Fue un concierto más corto de lo esperado, lo que no fue un punto negativo a tener en cuenta, porque la duración casa mucho con el estilo de la música que hacen, agresivo, contundente y rápido.
Tanto Týr como Municipal Waste, Marduk y Sepultura firmarían en la zona de mee and greet y el colapso se formaría con los brasileños.
He de reconocer que Marduk es una de mis bandas favoritas pero objetivamente afirmo que su profesionalidad es de agradecer. Mientras que todos los grupos restaban minutos a sus conciertos, Marduk tocó exactamente lo estipulado y además a las 16.30 de la tarde, cuando el sol restaba la frialdad buscada por los suecos. Algo que no entiendo teniendo en cuenta que una banda de la misma categoría actuaba de cabeza de cartel el día anterior. El punto clave fue Mortuus, que es un frontman excelente, agresivo, visceral y con una voz de ultratumba.
El concierto transcurrió sin sobresaltos debido a la carencia de la espectacularidad propia de Marduk, como el típico numerito de Mortuus echando sangre por la boca. Aún así lo considero innecesario, porque dieron un concierto soberbio. La selección de los temas fue bastante buena, tocando varios de los míticos que gustaron mucho a los fans de toda la vida. Pudimos asistir a temazos míticos como “Still fucking dead”, “Wolves”, “Materialized in Stone”, “Baptism by fire”, “With Satan and Victorious Weapons” o “Panzer Division Marduk” y algunos temas de discos más recientes como “Cold mouth prayer”, “Throne of Rats” o “The Hangman of Prague”.
Eché en falta algún tema más de esta última etapa, pero supongo que los suecos querían satisfacer al público, y es que los últimos álbumes han provocado bastante controversia, aunque personalmente los considero sublimes y una muestra de desarrollo y creatividad que bien falta les hacía a los de la noche anterior…
A las 6.15 llegaba la hora de uno de los grandes del death metal, los americanos Obituary, que siguiendo la tónica del resto de actuaciones se retrasó otro tanto. En general gozaron de una gran actuación tanto los fans más acérrimos como los que simplemente se encontraban ahí para pasar un buen rato, ya que si hay una cualidad en la que destaquen los de Tampa es la de ofrecer un directo que multiplica considerablemente la contundencia de sus temas, además de una presencia encima de las tablas que demuestra que veinte años no han pasado en balde y siguen siendo uno de los punteros del género.
Fue una verdadera lástima ver como a mitad del concierto, durante “Final Thoughts”, un problema técnico hacía desvanecerse durante unos diez minutos la perfecta atmósfera conseguida con temas como “List of Dead”, “On the Floor” o “Redneck Stomp”. Aun así, el respetable se mostró comprensivo mientras que el guitarrista Ralph Santolla hizo gestos sarcásticos para quitarle hierro al asunto. Tras ello se consiguió el retorno del sonido formando algún mosh pit al ritmo de clásicos como ”Cause of Death” y temas más modernos como “Face Your God”, de su último trabajo Xecutioner´s Return.
En general el set list fue bueno, y aun estando mayoritariamente orientado hacia lo más reciente de su discografía, no se olvidaron de sus fans cerrando con el gran “Slowly We Rot”, que puso la guinda a una actuación que, pese a mantenerse en el nivel de calidad al que nos tienen acostumbrados John Tardy y los suyos, nos dejó un poco fríos debido a los contratiempos técnicos.
Voivod supuso una disminución de público, aunque los fans más
reconocidos permanecieron al pie del cañón. Supongo que el motivo
principal era que el grupo no encajaba demasiado con el tipo de música
que reinaba en el cartel, por lo menos el material más reciente. Aún
así muchos se quedaron por los rumores sobre la posible ruptura
inminente del grupo.
Se echó en falta la presencia de Jason Newsted en el bajo.Algo que pudimos agradecer al menos fue la buena presencia escénica
del grupo, que supo sobrellevar los problemas técnicos que dejaron sin
voz al grupo durante algunos momentos. Algunos de los temas que
pudimos oír fueron "Voivod" y "The Unkown Knows".
En general fue una actuación que personalmente me dejó fría porque no
me gusta mucho la banda, pero de la que supieron disfrutar los más
fieles.
Sepultura, como era de esperar, provocó diferentes opiniones. Yo soy de las que conocí a Sepultura con Arise y por eso me decanto por los viejos. Es más, he de decir que el concierto parecía dividido en dos y eso se manifestaba totalmente en el público. Uno de los conciertos estaba formado por los temas nuevos de Sepultura, que el público escuchaba pausadamente y otro por los viejos temas donde todos enloquecíamos y coreábamos. De eso son conscientes los propios del grupo y por ello frente a temas del reciente lanzado A-Lex como “Moloko Mesto” o “We’ve lost you” cayeron bastantes temas viejos como “Refuse/Resist”, “Arise”, “Troops of Doom”, “Inner Self”, “Territory” y cerrando con “Roots Bloody Roots”, y es que Sepultura celebraba su 25 aniversario.
Las diferencias de esos temas en su día y ahora son tanto notorias como inevitables, pero para los que siempre creímos que nunca podríamos vivir esos temas en directo, pudimos ver en parte realizado nuestro sueño. En cierto modo me dio pena ver como el grupo tenía que recurrir a lo viejo para animar al público, siendo totalmente conscientes de que ya no son lo que eran. Esto se vio reflejado en que Derrick Green anunciara un “íbamos a tocar un tema de los nuevos, pero finalmente será uno de los viejos” provocando así la respuesta que esperaba. Pero en fin, qué se le va a hacer.
Derrick Green impone por los cuatros costados sobre el escenario, animó al público y dio un toque de humor al marcar el ritmo con un poco de samba, recordando a su tierra. Yo hubiera preferido que para ello versionearan algo de Sarcófago, que nos habría satisfecho mucho más (y total, ya que tiraban de cosas viejas…), pero bueno, fue una nota de humor que tampoco considero perjudicial para el concierto, más bien graciosa. Para finalizar hemos de admitir que fueron contundentes y el sonido les acompañó, siendo para mí uno de los mejores de ese día.
A punto estuvo Arch Enemy de no tocar porque se dijo que Angela Gossow tenía problemas de garganta. Algo que habría sido catastrófico porque la mayoría de los asistentes estaban allí por ellos. Como apunte personal he de admitir que tras haber visto a Pestilence u Obituary y a punto estar de presenciar a Carcass, Arch Enemy se me hizo lo más simplón del cartel, pero esto va más por gustos que otra cosa. Angela Gossow es una mujer de admirar por su voz, pero no sé si debido a sus problemas o qué, la encontré sin fuerza ni agresividad. No sé si por eso no participó como invitada en Carcass, como el año anterior hizo en Wacken.
Tocaron menos de lo debido, aunque ésa ya era la tónica general del festival… desde el escenario nos ofrecieron temas como “Blood on your hands”, “Ravenous”, “Dead eyes see no future”, “I will live again”, “Dead bury their dead”, “Taking back my soul” o “Nemesis”. Dieron un buen concierto y caldearon bastante el ambiente para los que minutos más tarde les darían unas cuantas vueltas.
Carcass fue otro de los esperadísimos del festival junto con Pestilence y Municipal Waste, habiendo anunciado su reunión el año pasado, nuestro país no había tenido la suerte de tenerlos en directo hasta la fecha. Michael Amott y Daniel Erlandsson sacaron fuerzas de flaqueza para, tras haber tocado con Arch Enemy, continuar ahora con un trallazo de auténtico death metal.
El grupo se mantuvo bastante estático a lo largo del concierto, pero sinceramente, eso era lo de menos. Carcass hiciera lo que hiciera nos dejaría contentos, incluso con el set list, porque personalmente considero que no tiene ni un disco malo, pese a la controversia del último álbum editado. Pudimos oír temas como “Buried dreams”, “Genial grinder”, “Death Certificate”, “Keep on Rotting in the Free World”, y las ya míticas “No love lost”, “Reek of putrefaction” cerrando con “Heartwork” .
Emotiva fue la aparición de Ken Owen a la batería, el cual por un infarto cerebral tuvo que poner fin a su habilidad, pero Carcass hizo un parón en su concierto para que hiciera un solo ante todos nosotros (como ya hizo el año pasado en Wacken) y por lo visto ha ido mejorando considerablemente con el tiempo. Esperemos que siga así.
Como curiosidad señalar que Jeff Walker bromeó sobre Marduk haciéndoles mención como “black metal mafia” porque por lo visto no habían reconocido a Bill Steer, el cual tocó al principio en Napalm Death.
En conclusión, Lorca Rock este año ha sabido cómo dar la talla. He señalado bastante los fallos simplemente con intención de que los mejore para el año siguiente y sea un festival de sobresaliente, pero este año en cuanto a organización, ayuda sanitaria y precios ha estado muy bien. También, siguiendo la tónica de otros años, el detalle de que la gente con algún tipo de discapacidad tuviera pase libre, e incluso pude observar en Marduk a un chico sobre silla de ruedas al final del escenario presenciando el concierto, todos esos gestos hay que loarlos. La estrella se la doy al cartel, que han sabido exactamente qué era lo que buscábamos.
Espero que sigan por esta línea porque hay una diferencia abismal del cartel del año pasado a éste. No sólo nos han ofrecido buenas bandas de metal extremo de última generación sino grandes clásicos difíciles de ver. Auguro que si siguen por esta línea van a conseguir que gente de otros países no tenga ningún reparo en poner pies en Lorca para disfrutar de este festival. Seguid así y nos tendréis muchos años más.
Texto:Esther Villardón
Fotos:M.Ángel Santana
ENLACES RELACIONADOS:
Lorca Rock ’09 – 24 de Julio’09 – Huerto de la Rueda ( Lorca – Murcia )
