Nuevo disco de la artista Lou Garx, que muchos recordarán por sus colaboraciones con Manolo Tena, sus giras con Reincidentes… Se trata del tercer disco de esta cantante con tendencias de post punk, mezcladas con algo (poco) de metal. Precisamente, la característica de Lou Garx es diversidad, lo que puede derivar bien en discos grandiosos, o bien en discos con un vaivén algo incómodo y difíciles de digerir, como a mi entender ha sido este caso.
Contrabando intenta mezclar las tendencias del metal moderno, con un estilo más underground, aderezado con un estilo de voz que media entre el punk y el pop comercial. En este sentido, se nota que muchas canciones tratan de ser muy bailables y comerciales, lo que choca con ese mestizaje musical y la inclusión de elementos un tanto marginales. Asímismo, la mayor parte de las letras luchan por provocar la simpatía del oyente (La Danza de los esqueletos, primer corte del disco, es un ejemplo muy claro de ese intento). La cuestión es que el disco naufraga en ese desesperado intento de ser audible a un nivel de masas, y a su vez de conservar un sello y una identidad propios de estilos de música que pretenden ser independientes de esas corrientes ya citadas.
Asímismo, la voz de la vocalista (que es la propia Lou Garx) atraviesa algunos momentos algo farragosos, cayendo en una monotonía que sorprende, dada su patente capacidad de variar el registro. La voz permanece siempre en un plano fijo, sin deleitarnos con cambios y adornos, lo que hace que le falte personalidad. Eso no le quita el mérito a algunos temas, como La calavera, que está bastante conseguida, pero en otros cortes el disco se vuelve monótono por esa melodía tan fija y la carencia de juegos de voz, salvo cuando se bordean los terrenos del hip-hop, único cambio reseñable a este respecto.
En cuanto a la composición de los temas, es bastante floja, ya que suele tomar un patrón que se repite hasta la saciedad, o bien adolece de la necesaria coherencia musical para un LP. En ocasiones podemos encontrarnos con una sensación de habernos perdido entre un tema y otro, y otras veces podemos caer en el sopor por el exceso monólogo musical al que nos someten..
La cuestión es que, para concluir con una valoración general, hablamos de un disco con muchímas canciones que sobran, eso que comunmente denominamos «paja», y muy pocos temas que sean realmente reseñables. Y eso a pesar del intento de sonar original, lo cual se agradece. Tal vez Lou Garx pueda continuar en el camino buscando su propio sello, algo a lo que había conseguido acercarse en trabajos anteriores, pero esta no ha sido esa ocasión. Quizás sea interesante como acercamiento a estilos de metal más fuertes si es que a alguien le interesa partir de algo más suave.
Belial Báez
Temas:
1- La danza de los esqueletos
2- Politoxic
3- Contrabando
4- Padre
5- Water prince
6- My medicine
7- El mundo
8- La habitación
9- La calavera
10- Caminando