Lacuna Coil + Forever Still + Genus Ordinis Dei – 22 de Noviembre’16 – Sala BUT (Madrid)
Dentro del genial y fructífero trabajo de la promotora de Madness Live! Para que disfrutemos de las mejores giras que pasan por Europa, recuperaron a unos olvidados por el público español, los italianos Lacuna Coil.
Texto y Fotos: David Aresté
Aún recordamos a la pequeña Scabbia en el escenario de aquel fugaz “Costa de Fuego” en Benicàssim que iban a volver pronto, pero nunca más se supo… Salvo en apariciones en festivales, no recordábamos a Lacuna Coil en sala desde la presentación de su Shallow Life en el 2010 con una repercusión un tanto mellada, y un grupo en un dudoso estado de forma… quizá era el presagio de todo aquello que iba a venir, la marcha de Cristiano Mozzati a la batería y Cristiano Migliore a la guitarra para dejar paso a Ryan Folden y Diego Cavalloti respectivamente. Con esa formación grabaron su último “Delirium” y como era de esperar salieron a la carretera y con las dudas de que si se pasarían por aquí y si Andrea Ferro sería capaz de reproducir los “bramidos” que ha grabado en ese último disco, la gente de Madness Live nos disipó la primera confirmando la gira después de 6 años de ausencia en nuestras salas… la segunda pregunta la responderemos después.
Debido quizá al sentimiento macarroni y a la implicación de Lacuna Coil en las grabaciones del grupo con Marco produciendo su nuevo EP y Cristina cantando en su próxima larga duración, teníamos dentro del cartel a Genus Ordinis Dei unos italianos que practican Black Metal y que si hace unos años nos dicen que una banda de Black hubiese teloneado a Lacuna Coil no nos lo hubiesemos creído.
Lejos de etiquetas ahí estaba el cuarteto descargando temas de su último EP como "You Die","Flemish" o "Red Snake" comandados por el enorme Nick K a las voces y guitarras, combinando un gran torrente vocal y una notable tarea a las 6 cuerdas tanto rítmicas como solistas junto a Tommy Matermind además de Steven Olda al bajo, Richard Meiz a la batería aporreaba su set sin piedad debido a la demanda de los temas. Vale que hay que coger variedad y no hay que tener en cuenta los estilos para descubrir grupos nuevos, pero creemos que tampoco hay que pasarse y no decimos nada raro si Genus Ordinis Dei no captaron la atención de mucha gente en esta gira.
No diremos lo mismo de los daneses Forever Still, apuesta de Nuclear Blast y que sacaban su primer "Tied Down" y que venían a presentarlo en este gira, la primera salida por Europa del grupo. Al ser un concierto entre semana, pasó al igual que la gira de Tarja adelantando los horarios para que no se hiciera tarde al salir ya que al día siguiente era laborable , sufriendo así los teloneros. Forever Still es un grupo de Dinamarca que practica un rock/metal alternativo con aires góticos, muy parecido a lo que podrian hacer Lacuna Coil años atrás, y obviamente estos si pegaban más que el anterior grupo dentro del cartel.
Su set se basó obviamente en ese disco llegando a los 8 temas como "The last day", "Awake the fire" y "Miss madness" con los que comenzaron y "Save me" y "Scars" que lo hicieron para cerrar con los que lograron convencer al público. El foco de atención del concierto fue Maja Shining a las voces llegando a tonos muy agudos y viscerales dando un tono diferente a las canciones que podrían haber caído en el mismo saco que todas las del género. Curioso el pie de micro de Maja que no se parece en nada a su look para dar un concierto.
Al igual que nos pasó en el de Tarja, nos llevamos a Forever Still como descubrimiento al igual que mucha gente que estaba allí. Como el grupo anterior, tocaron en la parte delantera del escenario y con el cambio de equipo se comenzaba a vislumbrar el Lacuna Coil Sanatorium.Trayendo consigo ese adelanto de 15 minutos, ya se estaba preparando el escenario para Lacuna Coil, representando el entorno parecido a su último "Delirium" bajo el nombre de LC Sanatorium con unas rejas a cada lateral de la batería y arriba de los extremos del escenario colgaban dos extraños personajes que imaginamos que pretendían ser dos visitantes de ese psiquiátrico.Con todo a oscuras y más pronto de la hora marcada, se abría uno de los laterales del escenario para que Marco Coti al bajo y Diego a la guitarra se pusieran detrás de las rejas junto a Ryan que estaba en el centro con su set de batería… sonaba la intro y un haz de luz salía del lateral, era Andrea y Cristina que llevaba una linterna para simular ese viaje por su Sanatorium particular.
Como hemos dicho no teníamos buen recuerdo de la última visita del grupo en sala y junto a un disco que tampoco le vemos cierta lógica no esperábamos un gran concierto; pero siendo sinceros nada más lejos de la realidad… los italianos lo hicieron bien y junto a la escenografía, vestuario y maquillaje ambientado en ese último disco pusieron en el lugar adecuado cada una de las canciones que conformaron su set.Es raro que siendo un disco conceptual no lo tocasen entero como muchas veces hemos visto (siendo sinceros también nos alegramos) y fueron 7 temas los que cayeron de "Delirium" junto a otros siete repartidos de sus últimos compactos sin bajar de "Comalies" demostrando el sonido consolidado del grupo, dejando atrás sus primeros discos.
Así que sonaron temas como "Ultima Ratio" y "Spellbound" para empezar, mezclados con un "Heaven’s a lie" y un "Die & Rise" que iban ayudando a dinamitar la sala poco a poco… es una lástima que "Swamped" se haya caído por el camino pero como hemos dicho lo nuevo copa el repertorio de lc. a mitad de show tuvimos a "Blood, Tears, Dust", "Ghost in the mist" de ese Delirium con un "Trip the darkness" que cayó como una bomba con ese estribillo cantado por toda la sala. El final llegaba con "Downfall" y "You love me cause I hate you" de ese nuevo disco junto a dos "clásicos" como "Our truth" y el "Enjoy the silence" de los Depeche Mode, acabando con una vitalista y aclamada "Nothing stands in our way".Llegaron los bises con la principal "Delirium", la pegadiza y potente "Zombies" y acabaron con "The house of shame".
Hacía 6 años que no veiamos a la banda, y obviamente eso se nota… y no sabemos que ha hecho, pero Andrea calló todas nuestras dudas demostrando salir airoso de una forma o de otra de un registro que desconocíamos de su voz sacandolo sin problemas. El hecho de que solo haya una guitarra es porque alguien suple su función y ese es Ryan a la batería, porque alguien que se cree y vive intensamente su trabajo le sale mucho mejor, y ese es Ryan… incluso diríamos que quizá también se crea que está en un manicomio, es una bestia tocando a nivel de técnica e intensidad.
Marco al bajo recorría el escenario de un lado al otro aportando la base rítmica de los temas y un gran apoyo para Ryan y para Diego a la guitarra, primer tour con la banda que lo resolvió con gran destreza, con las partes de sus anteriores compañeros, las suyas, y no recordamos si le tocó alguna que myles Kennedy que grabó en el disco nuevo… todo eso coronado junto a su indumentaria pseudo zombie. El nivel sigue siendo altísimo para la amiguita Scabbia, intensa, visceral,anima al público, llega a todo, interpreta cada nota que canta y la química que hay con Andrea sigue siendo la misma que la del primer día, cayendo en el recurso fácil su carisma es inversamente proporcional a su estatura.
Y tras una hora y media los italianos se bajaron del escenario, tocando lo mínimo que una banda como ellos deberían tocar, lo que pasa es que les teníamos muchas ganas y nos supo a gloria, pero la gente esperaba un poco más. Había que volver a tantear el terreno y tanto el grupo como el público salieron contentos. Y como un dejà vu, la pequeña Cristina decía, volveremos pronto, creedme… Ojalá sea así.
Texto y Fotos: David Aresté