Qué podemos decir de Jimi Hendrix que no se haya dicho ya. Un personaje que ha sido calificado como genio, innovador y virtuoso en el difícil arte de crear música, y cuya influencia todavía se hace sentir tanto en sus contemporáneos, como en aquéllos músicos que han surgido en los años posteriores a su muerte; siendo objeto de elogios y reconocimiento por parte de guitarristas como Alvin Lee, Stevie Ray Vaughan, Brian May, Yngwie J. Malmsteen, Joe Satriani, Eric Clapton, Jeff Beck, Jimmy Page, Rory Gallagher, Steve Vai y muchos más, quienes han reconocido el aporte que Jimi Hendrix ha dejado en la escena musical.
Siguiendo el estilo experimental desarrollado en el álbum “Axis: Bold As Love”, e incluso antes que el mismo fuera publicado en diciembre de 1967, la Jimi Hendrix Experience, conformados por Hendrix en la guitarra y voz principal, Noel Redding al bajo y Mitch Mitchell en la batería, ya habían comenzado a grabar nuevos temas para incluirlos en su nueva producción, grabación que se extendería hasta agosto de 1968 y que daría como resultado un excelente álbum doble de nombre “Electric Ladyland”, que lamentablemente sería lo último que publicaría este innovador trío, quienes se separarían a mediados de 1969, siendo también la última producción en estudio en vida de Jimi Hendrix.
Salvo contadas excepciones, todos los temas fueron compuestos por Jimi Hendrix y el disco comienza con un breve corte de nombre “…And The Gods Made Love”, con el sonido de unos golpes sumándosele una voz distorsionada (parecida a lo que haría Queen en el comienzo de “One Vision” 17 años después) y efectos de sonido que juegan con el estéreo, sirviendo de introducción al tema “Have You Ever Been (To Electric Ladyland)”, en donde la voz de Hendrix demuestra su admiración por el cantante Sam Cooke, al adoptar un estilo soul en esta canción y en cuyas letras nos da la bienvenida al mundo que nos presenta en este disco. La grabación fue realizada entre mayo y junio de 1968 con Jimi Hendrix encargándose de las guitarras y el bajo, junto a la batería de Mitch Mitchell.
El tercer tema del disco lo constituye el rockero “Crosstown Traffic”, grabada en diciembre de 1967, en donde Hendrix le canta a su pareja diciéndole que no es fácil alejarse de ella, al compararla con el tráfico urbano que lo está deteniendo. Musicalmente, el tema presenta cierta similitud con la canción “Fire” de su primer álbum (Are You Experienced), con Noel Redding, Mitch Mitchell y Dave Mason (del grupo Traffic) contribuyendo en los coros; incluyendo un solo de guitarra a lo largo del tema en donde Hendrix le agrega un instrumento de viento denominado “comb and tissue paper” que consiste en soplar un papel de seda doblado al que se le inserta un peine, dándole un efecto particular al solo principal.
El primer lado de “Electric Ladyland” concluye con el tema más largo del disco, el cual viene a ser un blues titulado “Voodoo Chile”, grabado en mayo de 1968, cuyas letras tienen que ver con lo expresado por Muddy Waters en canciones como “Rollin’ Stone” y “Hoochie Coochie Man”, las cuales predicen el nacimiento de un niño y que éste será un “chico malo”.
La canción comienza de un modo lento en donde la guitarra de Hendrix responde a su propia voz, y después de cinco minutos aproximadamente, interviene el sonido del teclado interpretado por Steve Winwood (del grupo Traffic) quien contrapuntea junto a la guitarra. A los siete minutos se escuchan unos aplausos por parte de personas presentes en el estudio, sonando luego una gran interpretación del bajo por parte de Jack Casady (de la banda Jefferson Airplane), entrando posteriormente un solo de batería por parte de Mitchell quien logra sobresalir sobre los demás instrumentos. La canción se pausa cuando va llegando a los once minutos, volviendo al ritmo de blues que escuchamos al principio, con un agresivo solo de guitarra; concluyendo el tema con los aplausos y conversaciones del público presente en el estudio. Steve Winwood y Eric Clapton, grabaron una versión de “Voodoo Chile” que aparece en el álbum “Live From Madison Square Garden”, publicado en mayo de 2009.
El lado “B” del primer disco comienza con “Little Miss Strange”, grabado en abril de 1968 y escrito por Noel Redding, quien aparte del bajo y la guitarra acústica, se encargó de la voz solista apoyado por Mitch Mitchell; y el propio Hendrix ejecuta un solo de guitarra apoyado de un bottleneck para lograr un efecto de slide a lo largo del tema. Con unas letras que describen el encuentro con una chica desconocida, la canción tiene un estilo algo country, el cual no hubiera estado fuera de lugar en un disco de los Byrds.
El disco continúa con un rock de medio tiempo de título “Long Hot Summer Night”, grabado en abril de 1968, en donde Hendrix (quien además de la guitarra se encarga también del bajo) comienza cantando al estilo que ya había utilizado en el tema “The Wind Cries Mary” de su primer disco, sobresaliendo la guitarra junto a unos agresivos coros, con unas letras que describen una problemática conversación telefónica entre el protagonista del tema con su pareja. El músico Al Kooper, quien había trabajado junto a Bob Dylan, se encargó del piano.
El siguiente tema es una versión llamada “Come On (Let The Good Times Roll)”, escrita en 1960 por un músico de New Orleans llamado Earl King. Luego de una breve introducción en donde interviene toda la banda, Hendrix canta a capela con la guitarra contestándole, sobresaliendo posteriormente con un gran solo muy al estilo en el que Jimmy Page ya se encontraba desarrollando. Esta sería la última canción grabada para este disco en agosto de 1968, en virtud que Hendrix se había dado cuenta que había espacio para meter otra canción.
Luego escuchamos un tema de nombre “Gypsy Eyes”, grabado entre mayo y agosto de 1968, el cual se inicia con la batería de Mitchell y en donde Hendrix lanza ráfagas de guitarra, cantando al principio por encima del solo sobre una gitana que lo tiene hipnotizado; el mismo Hendrix se encarga de hacer una gran interpretación en el bajo; terminando la canción abruptamente en fade-out. El motivo por el cual Noel Redding no aparece en algunas canciones de “Electric Ladyland”, fue que éste ya se encontraba descontento por las constantes críticas de Hendrix sobre su técnica en el instrumento, lo que derivaría en el futuro rompimiento de la banda.
Con unas letras relacionadas con el tema de la soledad, el primer disco concluye con la psicodélica “Burning Of The Midnight Lamp”, grabada en julio de 1967 durante las sesiones de su anterior álbum “Axis: Bold As Love”. La canción se inicia con el sonido de un clavicordio interpretado por Hendrix y en donde participa también una coral de música góspel, interpretada por una agrupación femenina denominada “The Sweet Inspiration”, la guitarra de Hendrix suena con un efecto wah-wah. Esta canción sería interpretada por la Jimi Hendrix Experience en el programa “Top Gear”, transmitido por la BBC el 15 de octubre de 1967, la cual podemos escucharla en el álbum “BBC Sessions” publicado en junio de 1998.
El segundo disco se inicia con un corte denominado “Rainy Day, Dream Away”, registrado en junio de 1968, en donde la banda que acompaña a Hendrix suena como un conjunto de jazz, participando aquí Mike Finnigan en el órgano, Freddie Smith en el saxofón, Larry Faucette en las congas y el futuro colaborador de Hendrix y antiguo integrante de The Electric Flag, Buddy Miles, en la batería. Con unas letras que hablan sobre la relajación en un día lluvioso; al escuchar a alguien tosiendo al comienzo, el tema da la impresión de ser una improvisación dentro del estudio y en donde Jimi hace relucir su guitarra con un efecto wah-wah.
La siguiente canción, “1983…(A Merman I Should Turn To Be)” grabada en abril de 1968, es en donde Hendrix da pruebas de ser un gran precursor en la corriente musical que sería conocida como “rock progresivo”. Aquí Hendrix interpreta la guitarra y el bajo, acompañándolo Mitch Mitchell en la batería y Chris Wood (del grupo Traffic) en la flauta. Las letras expresan el deseo del protagonista de escapar de la tierra para vivir en el mar.
Esta pieza, la segunda más larga en este disco, comienza con uno solos de guitarra cuyas armonías me recuerdan un poco a las que utilizaría posteriormente el grupo Scorpions al final de su tema “In Trance” de 1975. A los tres minutos aproximadamente, la canción se detiene y se convierte en un número lento en donde Hendrix recita las letras antes de ponerse a cantar. Después de los cuatro minutos, tenemos unos efectos de sonido viajando de un canal a otro, incluyéndose el sonido de un instrumento de percusión llamado flexatono, agregando elementos característicos del rock progresivo adelantándose a lo que harían posteriormente bandas como King Crimson. Hacia los seis minutos, entra un lento solo de guitarra y luego los músicos van improvisando hasta la llegada de un solo de batería. Después de los nueve minutos, se escucha una discreta flauta y luego viene un solo de bajo, entrando posteriormente todos los instrumentos dándole agresividad al tema, y luego la batería anticipa la voz de Hendrix cantando como si fuera una balada, volviendo a los solos del comienzo. La canción termina con el canto de gaviotas producidas por efectos de feedback.
Sin solución de continuidad entra un pequeño corte titulado “Moon, Turn The Tides…gently gently away”, que consiste en puros efectos de sonidos que sirven de clausura del tema anterior.
El último lado del disco se inicia con “Still Raining, Still Dreaming”, grabado en junio de 1968, con el mismo personal que participa en “Rainy Day, Dream Away” y la misma temática; pero a diferencia de ésta, nos encontramos con una canción más estructurada, predominando un solo de guitarra al estilo típico del blues, incluyendo también un solo de teclados que le da algo de dinamismo a la canción, en donde la guitarra no deja de lanzar sus solos durante su duración.
Luego viene “House Burning Down”, grabado en mayo de 1968, otro tema con la guitarra como protagonista y cuyo comienzo me recuerda un poco al grupo Cream; los solos van contrapunteando de canal en canal y el tema concluye con una guitarra sola. Hendrix también se encarga del bajo. Las letras describen la devastación causada por un incendio y se agregan elementos de ciencia ficción al señalar que seres del espacio se llevan a los fallecidos.
Siguiendo con la guitarra como protagonista, tenemos la excelente versión de “All Along The Watchtower”, escrito por Bob Dylan y publicado en su disco “John Wesley Harding” en diciembre de 1967; cuya grabación comenzó en enero de 1968, siendo terminada entre junio y agosto de ese mismo año; domina la guitarra acústica al principio y luego entra el solo slide de Hendrix (quien también toca el bajo) el cual tiene mucho feeling. Contribuyen Dave Mason en la guitarra acústica de doce cuerdas y Brian Jones (de los Rolling Stones) con el vibraslap, instrumento de percusión que al ser golpeado emite un repiqueteo distintivo, el cual suena justo después que entra la introducción con guitarra acústica y va sonando a lo largo del tema.
Esta versión realizada por Hendrix, fue objeto de elogios por parte del mismo Bob Dylan, quien llegó a manifestar que escribió las letras en medio de una tormenta eléctrica y cada vez que interpreta esta canción en vivo, lo hace en un estilo similar al efectuado por Hendrix, ello como tributo a éste.
El último tema del disco, “Voodoo Child (Slight Return)”, grabada en mayo de 1968, con la participación de los tres músicos y con letras relacionadas al tema “Voodoo Chile” registrada el día anterior; comienza con la guitarra en efecto wah-wah, descargando uno de los riffs más distintivos de Hendrix, dando como resultado una canción de heavy metal por la agresividad en que suenan los instrumentos, con los solos de guitarra sonando de canal en canal. Hendrix siguió interpretando esta canción en vivo durante el resto de su carrera.
La producción de “Electric Ladyland” fue atribuida a Jimi Hendrix, quien contó con la asistencia de los ingenieros Eddie Kramer y Gary Kellgren. El álbum sería número uno en los Estados Unidos y después de la separación del trío, Hendrix formaría la “Band Of Gypsys”, cuyo álbum en vivo se publicó en marzo de 1970, siendo el último disco que se publicó estando vivo Jimi Hendrix, quien fallecería el 18 de septiembre de 1970 dejando una gran cantidad de canciones inéditas que servirían de base para la publicación de una serie de discos durante las décadas posteriores.
Antes de la separación del trío, Noel Redding había formado una banda de nombre Fat Mattress, y después seguiría en otros proyectos de bajo perfil hasta su muerte ocurrida el 11 de mayo de 2003. En cuanto al baterista Mitch Mitchell, éste seguiría haciendo algunas presentaciones con Hendrix y aparte de participar en “The Rolling Stones Rock And Roll Circus”, trabajaría junto a Eddie Kramer en la preparación de algunos de los discos póstumos de Hendrix. Lamentablemente, Mitchell falleció el 12 de noviembre de 2008.
Rafael Coutinho
Fuentes: Wikipedia, la página web “jimihendrix.com” y las notas incluidas en el Cd “The Ultimate Experience”, publicado en noviembre de 1992, y la caja recopilatoria “Biograph” de Bob Dylan, publicada en noviembre de 1985.