Uno no tiene que ser un guitarrista experimentado para aprovechar la oportunidad de ver por qué los que sí lo son, están donde están y te muestren un pedacito de sus secretos, de lo que hay detrás de lo que luego vemos en los escenarios… Texto y Fotos: Susana Manzanares |
Así pues, con unos conocimientos muy básicos pero mucho amor por la guitarra, servidora se plantó en el clinic que Mattias Eklunhd ofreció en Madrid, un día antes del concierto de Freak Kitchen con motivo el Iberian Prog Fest que tuvo lugar en la We Rock,de la mano de ARROWS LIVE ambas citas..
Previo a la master class de Mattias, Belial Báez nos ofreció una estupenda demostración técnica de las posibilidades de improvisación. Dentro de un inmenso abanico de todas ellas, Belial destacó la importancia de memorizar acordes, estudiarlos primero y posteriormente jugar con ellos teniendo muy en cuenta intervalos y tiempos para que la improvisación no resulte aburrida. Así, combinando y jugando con arpegios, generando melodías, y tomando como ejemplo técnicas de guitarristas de diversos estilos y figuras del metal, rock, blues o Jazz -probablemente donde podemos encontrar multitud de ejemplos- nos demostró que las posibilidades de improvisación resultan infinitas.
Tras una fructífera charla y ejemplos prácticos de una hora, dejó paso a Mattías que estuvo atento todo el tiempo mientras Belial intervenía, aunque reconoció después que sus conocimientos de español eran bastante limitados.De primeras, muy cordial y simpático, agradeció a todos los que estábamos nuestra presencia allí y presentó su clinic como ‘a Swedish Bastardclass’. Ya empezando así, era de esperar que eso no era nada comparado con las risas que desató después a lo largo de las dos horas que se hicieron en realidad bastante cortas.
Desde luego, aparte de magnífico guitarrista, este hombre hace gala de un marcado sentido del humor que entre bromas, ruidos simulando sonidos de animales y otras anécdotas de su vida en los bosques de Suecia, nos habló de la evolución a lo largo del tiempo de la técnica de su sonido y de cómo lo desarrolla en sus composiciones así como otros aspectos relativos al proyecto que lleva a cabo cada año llamado “Freak Guitar”.
Tras una breve descripción de su equipo, que por si no lo sabíamos nos explicó que principalmente es una guitarra y un amplificador… (ya véis, el humor ante todo), la primera su Caparison de 7 cuerdas y el segundo los amplificadores Leaney, que lleva usando desde 1995 porque son fuertes y le van perfectos con los tonos bajos, de los que suele hacer bastante uso.Como nos reconoció, no suele prepararse las masterclass, simplemente porque prefiere que las cosas vayan surgiendo e interactuar con la gente, aunque suponga dejar ligeramente a un lado conceptos más técnicos en favor de aspectos musicales en general.
Entre ejemplos prácticos, nos contó cómo ha ido descubriendo nuevos sonidos, nuevas armonías dejándose llevar por su instinto natural y su espíritu aventurero. El mismo espíritu que le ha llevado en diversas ocasiones a países como India y Nepal en busca de experiencias personales y musicales a partes iguales, llegando a descubrir a través de sus tradiciones y folklore una gran inspiración que ha conseguido trasladar a su manera de tocar.
La sorprendente lección de ritmo que ocupó gran parte del tiempo, que nos explicó simplemente con palmas y una sucesión de sonidos tales como ‘taka timi taka dum…’ de viva voz, es sencillamente imposible de describir por más que lo intente… Partiendo de la combinación de eso sólo, al compás de palmas y voz, es increíble que durante casi una hora desarrollara una serie de ritmos que, primero más sencillos y luego más complejos, después llevó a las cuerdas y pudimos todos reconocerlos claramente…
Tras las dos interesantes y divertidas horas, Mattías se prestó más divertido aún a participar en el sorteo de diversos artículos entre los asistentes, cables, fundas, discos y hasta un amplificador Laney. No tuve la suerte de que me tocara nada, pero la enriquecedora tarde que pasé ya es suficiente premio.
Mattías Eklundh es sin duda un gran músico, un gran frontman y no salió de allí hasta que todo aquel que quisiera hacerse fotos con él o les firmara autógrafos no hubiera terminado, detalle que si cabe contribuyó aún más a las ganas de verlo al día siguiente sobre el escenario… y allí estuvimos, y os lo contaremos en breve con fotos y crónica detallada de lo que fue el magnífico Iberian Prog. Fest’13.
Texto y Fotos: Susana Manzanares