Tras haber anunciado pocos días antes la cantante Nienke de Jong la cancelación de su grupo Dejafuse en dicho festival, la productora se puso manos a la obra y contrató a un grupo local, Anwynn del que muchos de los asistentes no habíamos oído hablar. Esta joven formación creada en 2007 salían a calentar los motores del festival sobre las 11 y media de la mañana, luciendo unos kilts a juego con la inspiración celta de sus temas, mezclando algo de death con las voces limpias de su vocalista Amandine.
Este grupo, a pesar de tener cantante femenina (y quizá fuera por timidez), parecía una banda masculina, dado que Amandine permanecía casi siempre en segundo plano, dando más protagonismo a Bouc y sus voces guturales. Uno de los temas que pudimos disfrutar fue “Across the seven seas”. Esperamos poder tener ocasión de conocerlos un poco mejor en el futuro con un redondo completo.
Siendo ya media mañana, los noruegos Ram-Zet hacían su aparición encima de las tablas, haciendo alarde de su metal progresivo extremo. Liderados por la característica Sfinx, ofrecieron a los asistentes un potente directo de casi una hora en los que sonaron temas como “Enchanted” o “Inferno”. La voz de Sfinx en directo sonó algo mejor que en el disco, aunque quizá les falto algo de complicidad con los asistentes.
Su sonido equilibrado y su mezcla de estilos dejaron a los presentes más que satisfechos, tanto a los adeptos del grupo como a los que no les conocían tan a fondo, y es por ello que muchos consideraron que fue una lástima que Ram-Zet, con cuatro discos ya en su discografía, tocaran tan temprano, habiendo otros compañeros que sólo cuentan con un redondo y tenían más tiempo de concierto y a unas horas más razonables.
Un punto a favor del MFVF es que representa un amplio catálogo de grupos desconocidos, como por ejemplo los dos anteriores, o el que les siguió, Omega Lithium, llegados desde Croacia con su metal gótico industrial. A pesar de tocar a la hora de la comida, los croatas tuvieron bastante público que decidió dejar los bocatas para más tarde, dado que aunque sólo cuentan con un disco en su haber publicado en 2009, Dreams in Formaline, han conseguido captar la atención de mucha gente y se han hecho bastante conocidos en poco tiempo.
La fémina Mya Mortensen (alias Omega Lithium) y sus tres acompañantes, con sus caras maquilladas de blanco, sus lentillas casi transparentes, y sus ropajes góticos que casi parecían vampiros, se movieron con comodidad sobre las tablas, y sonaron temas como “Nebula”, “Point black” o “Angel’s Holocaust”. Habrá que esperar a su segundo disco para ver si se mantienen en la merecida popularidad que se han ganado hasta ahora o si caen en el olvido.
Tiempo para que The Agonist salieran a tocar, sin embargo se quedaron en un atasco en la carretera, con lo que cambian su turno con Sarah Jezebel Deva, que anteriormente prestaba su voz como secundaria en el grupo Cradle of Filth y ha colaborado con Therion. A pesar de que los asistentes están un poco desilusionados por el cambio, en cuanto Sarah pisa el escenario todo se calma. Con su imponente presencia, y su potente voz (aunque quizá no con el atuendo más apropiado), la británica nos venía a presentar su último disco que lleva su nombre.
Canciones como “I’m calling”, “God has a plan for us all” (de su anterior proyecto, el grupo Angtoria), o su versión del clásico pop de Meredith Brooks, “Bitch” son las que van animando al público, a pesar de la reticencia inicial por el contratiempo en el horario.
Quizá la banda más extrema del día fuera la formación de death metal canadiense The Agonist, cuya cantante, la carismática con apariencia angelical con un punto de rebeldía Alissa White-Gluz, se dice que es la que más facilidad tiene para pasar de los gruñidos a las voces claras e incluso operáticas, alarde que hizo en su actuación en el MFVF, dejando a los presentes boquiabiertos en ocasiones. Así como ocurrió con otras agrupaciones, The Agonist no fueron menos y tuvieron serios problemas al comienzo con el sonido, hasta el punto en el que la diva se salió del escenario con un monumental enfado, para más tarde volver un poco más calmada y seguir con el directo (hecho que provocó la dificultad en la relación con el público en lo que restó de concierto).
Aún asi, la frontwoman se mostró incombustible en todo momento, y el resto de la banda también estuvieron muy dinámicos. A destacar especialmente los solos de guitarra de Danny Marino, y el buen trabajo del batería Simon McKay. “Globus Hystericus”, “The Tempest” o “Thank you, pain” son algunas de las canciones que ofrecieron a los asistentes.
Sin duda alguna, uno de los platos fuertes de día y de los que mejor sabor de boca dejaron entre el público (a pesar de contar con el hándicap de no ser conocidos por gran parte de él), nuestros compatriotas, los navarros Diabulus in Musica abrían la sesión vespertina. El desconocimiento, unido al hecho de que contaron con algunos problemas de sonido en los primeros temas, que fueron subsanando rápidamente, hicieron que el respetable fuera bastante inexistente al principio de su directo. Pero a medida que el joven grupo nos deleitaba (sobre todo a los que ya nos contamos entre sus fans) con las canciones de su disco debut “Secrets”, el resto de asistentes fueron sumándose entusiasmados.
La tímida Zuberoa Aznárez, pidió varias veces disculpas en cuanto a su voz, ya que había estado resfriada todo el fin de semana y estaba aún recuperándose. Pero tanto ella como el resto de los chicos estuvieron a la altura de las expectativas, consiguiendo que tras su directo muchos de los que aún no les conocían preguntaran sobre ellos. El teclista y grunter Gorka Elso animó al público en repetidas ocasiones, hasta que a la mitad del show, con “Evolution’s Whim”, se terminaron por animar los que aún estaban reticentes y el fin de fiesta fue colosal.
Además, como requería dicho evento, trajeron a tres cantantes de coro que permanecieron junto a la batería de Xabi Jareño durante toda la actuación. Y más tarde, de entre el coro salió y se unió al grupo para cantar a dúo con Zube la canción “Forest of Ashes” la soprano Maite Itoiz, gran amiga del grupo y colaboradora en varias ocasiones. Y tras ese tema, las dos cantantes nos regalaron una pieza clásica con Gorka a los teclados, el precioso Dueto de las Flores de la ópera de Delibes “Lakmé”.
Cabe destacar también en la actuación de los de Pamplona que han crecido encima del escenario, y así se pudo comprobar en cada uno de los miembros; cada vez tienen más complicidad entre ellos y se les nota que tienen más confianza en su saber hacer. Algunos otros temas de los que tocaron fueron “Ishtar”, “Lies in your eyes”, “Come to Paradise”, el single “Nocturnal Flowers” y la épica y operática “St. Michael’s Nightmare”. Ojalá que en breve podamos disfrutar de ellos en casa y no tengamos que ir hasta otro país para disfrutar de su música y su calidad.
Al igual que pasó con Krypteria en la jornada del sábado, HolyHell tenían el duro papel de estar tocando justo antes de los dos grandes del día, y (a pesar de tener un nutrido público propio) muchos de los asistentes llevaban todo el día aguantando en primera fila para ver a los que llegarían hora y media más tarde, por lo que no les prestaron toda la atención que en otras circunstancias hubieran tenido.
Con la presentación de su disco homónimo, los estadounidenses encabezados por Maria Breon estuvieron correctos, al mismo nivel que se les pudo ver en su gira por España (solo que esta vez no contaban con la compañía de sus padrinos Manowar), y se lucieron con temas como “Prophecy”, “Apocalypse”, “Holy water”, “Wings of light” y “Gates of hell”, tanto que los que si disfrutaron el concierto salieron más que contentos con su actuación.
Otro de los que no suelen faltar a la cita son Leaves’ Eyes, que en una edición anterior ya fueron cabeza de cartel y se trajeron con ellos un barco vikingo (actuación de la cuál luego salió su dvd en directo, En Saga I Belgia). Liv Kristine, su marido Alex Krull y el resto de los suyos (alguno de ellos nuevos integrantes desde este año 2010, como es el caso del guitarrista Sander van der Meer), desplegaron todo su encanto y su magia sobre las tablas del Oktoberhallen con sus canciones épicas sobre mundos lejanos en civilizaciones antiguas: los vikingos y su descubrimiento de América.
Leaves’ Eyes fueron de los grupos más coreados, Liv y Alex se mostraron en todo momento muy atentos con el público, siendo incluso el único grupo que a parte de la firma de discos organizada que tenían al igual que el resto de bandas, firmaron después del directo en el stand de merchandising. Algunas de las melodías que se escucharon fueron “Farewell proud men”, “My destiny”, “Take the devil in me”, “Njord” y para cerrar su tema más largo hasta la fecha, “Froya’s theme”. Una hora y media de directo que se hizo demasiado corto.
El broche final vino de parte del único grupo presente en cada edición, buenos amigos de los organizadores, y con una de las mayores legiones de fans del festival, los holandeses Epica, quienes para este año anunciaron un directo especial en el que retomarían las canciones de su primer disco, The Phantom Agony, publicado hace ahora ya siete años. El grupo demostró en hora y media de puro espectáculo con uso de ventiladores, juegos de luces y cañones de humo, por qué son de los que más reconocimiento mundial obtienen, a pesar de que la voz de Simone Simons no estuvo tan acorde en cuanto a afinación como cabía esperar.
Tocando la mayor parte de aquel The Phantom Agony (temas como “Feint”, “Run for a fall”, “Cry for the moon”, “Façade of reality” o “Sensorium”), se quedaron atrás en cuanto a presencia, dado que entremezclaron algunos de sus éxitos más recientes como por ejemplo “Resign to surrender”, “Unleashed”, “Tides of time”, “Sancta Terra”, incluso de modo instrumental la marcha imperial de la saga cinematográfica Star Wars (que ya vienen tocando hace tiempo en sus directos). Una lástima que el cierre de su directo no fuera con la homónima del disco debut y grandiosa “The Phantom Agony”, que aunque si sonó, con ella en última instancia hubieran demostrado que este concierto se basaba en dicho disco.
Ya se empiezan a conocer los primeros nombres de algunas de las bandas que tocarán en la novena edición, como son Stream of Passion, Draconian, Hanging Doll, Visions of Atlantis, Midnattsol, Echoterra, Benedictum, Nemhain, Deadlock, Amaranthe, Trail of Tears y Leaves’ Eyes. En breve además comenzarán a ponerse a la venta las entradas, por lo que los amantes de este estilo de música deberían ir pensando en adquirirla cuantos antes y planearlo todo con tiempo, dado que cada año la afluencia es mayor y el reconocimiento a nivel internacional se va dejando ver un poco más con cada edición. En Metal Symphony esperamos no perdernos la prometedora siguiente edición.
Texto: Leticia Ballester
Fotos: Jessica Lleonart
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