Karl Sanders vuelve a reunir a los suyos, tres años después, sacando su séptimo disco de larga duración, al que han llamado “At the Gates of Sethu”, siguiendo con la tradicional temática egiptológica de la banda estadounidense. Toller-Wade y Kollias vuelven a acompañar al maestro. Paris González |
|
Nota:7/10 |
Como ocurre desde 2007, el maestro de la guitarra, Sanders, se rodea de Dallas Toller-Wade y George Kollias. El primero de ellos haciéndose cargo de la guitarra rítmica, el bajo y algunas voces; mientras que el griego, sigue haciendo gala de su buen quehacer con los bombos y platillos. También participan en este CD, Jon Vesano, quien ya fuera integrante de la banda hace unos años, y Jason Hagan. Ambos introducen nuevas melodías vocales a las de Sanders y Wade.
Claro está que durante los 47 minutos que estemos escuchando el disco parecerá que nos hayamos remontado 4.000 años para viajar al antiguo Egipto y notar todo el ambiente que rodea a la corte del Faraón, además de todo aquello que tenga que ver con la mitología egipcia.
Esa atmósfera, tan característica, tan difícil de emular y que tantos otros han intentado copiar, casi siempre con nefasto resultado, es la sella de identidad de este inmenso grupo, pero en esta ocasión parece que algo no termina de cuadrar…
Todos se preguntarán el porqué de esa nota tan baja, para un grupo tan tremendamente técnico y rebosante de brutalidad, características que a un servidor le encantan. Pues la verdad es que, en esta ocasión, la calidad de los temas, no hablo de técnica y brutalidad, sino de algo que llegue y transmita algo, parece que se ha perdido.
Todos los temas tienen un algo, pero no llega a explotar del todo. Salvando, con mucho, las diferencias entre las bandas, algo muy parecido me pasa con Machine Head, muy buenos riffs, muy buenas intenciones, pero después parece que no saben dar con la tecla para dejarnos con la hostia en la cara.
Pero el principal problema en este disco son las voces, ya que ni Toller-Wade ni Sanders rayan a la altura. Parecen cansados (hay que recordar que Sanders raya ya los 50) y ya no tienen la frescura de la que sí pudimos disfrutar en anteriores grabaciones, como Annihilation of the Wicked o, incluso, Those Whom the Gods Detes, lanzado hace apenas 3 años.
Por el contrario, Kollias, como es de esperar en él, uno de los mejores baterías en la escena death metal y que se está convirtiendo, poco a poco, en uno de mis favoritos, da ejemplo de lo que debe hacerse sentado tras unos platos. Ritmos variantes, velocidades en los pies que para el resto de mortales serian prácticamente imposibles de conseguir, y maquinaciones con los platos que quedan de lujo. Quizá sea este punto el que pone el notable en la nota.
Metiéndonos en harina, el disco comienza muy en la onda de Nile con “Enduring the Eternal Molestation of Flame”, una intro que nos permite saborear la arena del desierto egipcio. Algunos chillidos, lejanas percusiones, una voz que nos susurra y…el death metal. Riff que se entrecorta y un par de solos de Sanders que nos dan una de las mejores muestras de todo el disco.
Siguiendo con los característicos títulos largos, tradición del grupo, “The Fiends who Come to Steal the Magick of the Deceased”, un tema de corte bastante épico en el que, como no, la influencia egipcia no deja de entreverse y en la que en torno al minuto 2:58 se puede observar de manera cristalina lo que comentaba líneas arriba acerca de la voz. Cansada, vieja…En definitiva, fea.
Le sigue “The inevitable Degradation of Flesh”, que nos muestra el lado más brutal con un blast beat de Kollias prácticamente continuo que nos recuerda quienes son Nile. Cuando llega el frenazo, el riffazo de Sanders se meterá en la cabeza de quien lo escuche y no lo podrá sacar de ahí por mucho que quiera.
La guitarra inicial de “When my Wrath is Done” junto con un ritmo un tanto más lento de lo que nos tenían acostumbrados, le dan un toque especialmente oscuro al tema, que luego incluye un tramo ambiental con órgano. “Slaves of Xul” es un corte de transición que nos lleva al que posiblemente sea la canción más completa del disco: “The Gods who light up the Sky at the Gate of Sethu”, que encajaría a las mil maravillas en lo que para mí es la obra culmen de los estadounidenses, Annihilation of the Wicked. Ritmos cambiantes, “melodía” cuasi perfecta, riffs mareantes. Lo tiene todo. 10 de canción.
Continúa el disco con “Natural Liberation of Fear Through the Ritual Deception of Death”, otro de los temas más brutales y que da paso a “Ethno-Musicological Cannibalisms”, otro tema ambiental en el que una guitarra acústica tocada a ritmo de brutal death metal sirve de introducción para “Tribunal of the Dead”. En esta canción, nos vuelven a querer mostrar su faceta más relajada. Ritmos mucho más pausados que de costumbre, aunque, claro está, nos tienen que dar también su parte más brutal.
“Supreme Humanism of Megalomania” tiene un clarísimo parecido a “Lashed to the Slave Stick” del Annihilation of the Wicked, lo que ha llevado a algunos a pensar que se trata de un simple reciclaje con un riff algo diferente. Cierra el disco “The Chaining of the Iniquitous”, el tema más largo del disco con más de 7 minutos, de los que los dos últimos son un cierre ambiental. Pero el inicio con las cadenas sonando como si tuviéramos a los “inocuos” rondando por nuestra habitación, te mete de lleno en un tema que se constituye como uno de los más lentos del CD.
En conclusión, no es, ni de lejos, uno de los mejores álbumes de Nile, pero son ellos, y lo que ellos hacen mediocre o malo, es de notable. La calidad, técnica y brutalidad están presentes en este disco, pero falta algo de garra, en especial en las voces. Los puntos positivos están en Kollias y en las letras, terreno en el que, como siempre, Sanders se reivindica como uno de los mejores en la escena metálica extrema. Si alguien quiere empezar a escuchar Nile que lo haga por alguno de sus predecesores, en el que se pueda ver, realmente, de lo que son capaces estos amos y señores del death metal.
Web: https://www.nile-catacombs.net/
Tracklist:
-
Enduring the Eternal Molestation of Flame
-
The Fiends who Come to Steal the Magick of the Deceased
-
The inevitable Degradation of Flesh
-
When my Wrath is Done
-
Slaves of Xul
-
The Gods who light up the Sky at the Gate of Sethu
-
Natural Liberation of Fear Through the Ritual Deception of Death
-
Ethno-Musicological Cannibalisms
-
Tribunal of the Dead
-
Supreme Humanism of Megalomania
-
The Chaining of the Iniquitous
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=z6SZTiha8bw[/youtube]