Sold my Soul: Sold my Soul // Katofonia

admin

hace 9 años

Desde Polonia nos llega Sold my Soul, una banda atípica para el país, pero con un gusto y una clase realmente asombrosa. Nadie esperaría un disco de rock setentero desde aquellas latitudes y el resultado es realmente bueno.

El grupo surgió tras la vuelta de Smok Smoczkiewicz a Polonia tras vivir unos años en Londres y haber participado en bandas de rock, incluso con Bill Steer de Carcass. Volvió con la idea de montar una banda que repasase la esencia del rock y se unió a diversos músicos y tras algún que otro cambio se asentó en forma de banda con Waldemar Kolcz (más conocido como Gandalf) al bajo, Czarek Majewski a la batería y el vocalista Łukasz Łyczkowski publicando un EP que recibió muy buenas y merecidas críticas. Esas críticas propiciaron el poder girar a nivel europeo y grabar este primer LP homónimo.

Lo que vamos a encontrar es una clase magistral de rock y blues setentero pero con las ayudas de un sonido más pulcro que nos dan las nuevas tecnologías, sin olvidar ese regustillo añejo que tienen cada uno de sus guitarrazos.Mención especial para Łukasz a la voz, desconocido para un servidor y que tiene esa voz sureña tan característica y que me recuerda al señor Robinson de Black Crowes. El disco traza una especie de curva, comenzando con unos cuantos cortes más rockeros, con riffs absolutamente memorables para dar paso a una segunda parte más bluessy, psicodélica por momentos, para acabar con Nie znasz mnie, corte de moto, carretera y macarrería.

Sold my Soul nos dejan un gran regustillo inicial con Dream of Yesterday, quizás su mejor tema, al menos en cuanto a rock más cañero, sacándonos esa sonrisa que nos hace pensar “estos tíos molan”. Una vez escuchada esta primera canción ya estás atrapado para seguir con el resto del trabajo. La siguiente que nos presentan es Special y el nivel no baja, con un tributo encubierto a Led Zeppelin, donde más de uno al escucharlo no podrá aguantarse y se moverá al compás.

Como aspecto curioso de Sold my Soul decir que hay tres temas en su lengua materna, y, pese a que más de uno pueda pensar que sonaría muy raro o fuera de lugar, todo lo contrario, queda muy bien y da un toque exótico más que interesante. El único pero es no enterarnos de qué dicen. La primera es Teraz albo Nigdy, canción de nombre impronunciable pero que comienza con un riff bastante cañero para dar el pistoletazo de salida a un medio tiempo con guitarras limpias realmente genial, con una melodía vocal muy bonita a pesar de estar cantado en polaco. Cuando parece que va a llegar un estribillo dulzón, las guitarras se cabrean para dar el estribillo más cañero y sucio de todo el trabajo. Las otras dos canciones en polaco son Wciaz zyje y la anteriormente citada Nie znasz mnie. Wciaz zyje es otro tributo a zeppelin, tanto por el bajo inicial que recuerda al Dazed and Confused hasta la forma de cantar todo el tema, muy Plant y por supuesto es riff machacón pero efectivo. Otro de los grandes temas sin duda.

Volvemos al idioma de Shakespeare con One 2 Seven, con un ritmo a lo rockabilly que hará mover más de una cadera. No obstante, no estamos ante un corte suave porque las guitarras mientras nos llevan a ese ritmo, están también bastante cabreadas quedando una mezcla curiosa e interesante.

Con Gonna Take Sometime ya acaban la parte más rockera para dar paso con Can’t Leave you Behind a un blues más clásico y relajado pero no por ello menos interesante. Si bien, Smok a la guitarra sorprendió por sus riffs, en esta parte más blusera destaca quizás más, demostrando una versatilidad, una técnica y un buen hacer con la guitarra realmente importante. En este tema, la voz adquiere matices más propios, con susurros melosos que se conviertes y gritos de rabia. Gran balada blues, que sorprenderá a muchos. Red Reallity nos saca del trance para llevarnos a territorio rock, al menos de forma temporal, con su toque Black Crowes muy marcado y su forma tan sureña de cantar.

Let it Be es un tributo descarado a Deep Purple, y ese Mistreated del Mark III. Solazo que me marca el señor Smok en este corte.El blues más clásico setentero viene de la mano de Lady Winter Blues y You Made Me Who I Am, donde los ritmos pesados nos aletargan y nos transporta a un mundo de erotismo y sensualidad muy atrayentes.

Este disco es una gozada, una grata sorpresa que no debería pasar desapercibido para nadie. Grabado en Polonia y producido por el mismo Smok junto a Voytek Kochanek, quien ya se encargase del Ep y con un resultado realmente perfecto. Como decía, aprovecha lo mejor de la modernidad, sin perder la esencia añeja sonando muy creíble. En Octubre parece que vuelven a venir por nuestras tierras, momento perfecto para disfrutar de este trabajo en directo.

Belch

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