Sonic Syndicate: Sonic Syndicate // Nuclear Blast

	Cuando el título de tu quinto disco es homónimo el mensaje es claro: aquí comienza una nueva etapa para Sonic Syndicate. Y es que después de tantas idas y venidas es lógico que la banda quiera sentar las bases y construir un futuro estable a raíz del lanzamiento de este “Sonic Syndicate”. Alberto López
Nota:7/10

Cabe recordar que la formación se ha estabilizado de la siguiente manera tras la desbandada que se produjo tras la publicación de “We Rule The Night”: Robin Sjunesson, el primo pequeño de Richard y Roger, quienes abandonaron la banda para formar The Unguided, queda como único integrante original de la banda al cargo de las guitarras y las voces de apoyo. Mientras tanto Nathan J. Biggs a la voz, Karin Axelson al bajo y John Bengtsson a la batería completan el line-up.

El problema con sus ex compañeros, y con buena parte de sus seguidores, fue la evolución llevada a cabo en su anterior disco, donde fueron acusados de virar su sonido hacia terrenos demasiado comerciales. En mi opinión no fue un mal avance, o retroceso para algunos, y está claro que para ellos tampoco, ya que han seguido por esa misma senda en este nuevo asalto que acaban de publicar.

El álbum comienza con “Day Of The Dead”. Le cuesta entrar, y tras unos guitarrazos pesados llega la velocidad de un riff simple pero afilado y machacón. Siguiendo el camino que ellos mismos se habían marcado el estribillo derrocha melodía y tiene gancho. Además, otra de las novedades incluidas en su anterior lanzamiento, como era el aumento notable de la presencia de elementos electrónicos, sigue muy presente en este primer tema y en todo el disco.

“Black Hole Halo” ya la habíamos podido disfrutar con anterioridad, ya que fue el primer tema de adelanto que lanzaron. Sigue la misma línea que su predecesora, y tiene toda la pinta de ser uno de esos cortes que en directo mejoran sustancialmente. Ya veo los puños en alto y la gente coreando ese “¡Halo!”.

“Long Road Home” es una de mis favoritas, acercándose más a ese sonido sueco, y no tan americanizado como ahora, que les hizo grandes con aquel “Only Inhuman”. Contrasta notablemente con su sucesora, la extraña y difícil “My Revenge”. Un corte más oscuro, con una estrofa que no hay por donde cogerla en muchos momentos y que no consigue arreglar un estribillo delo montón. Inmediatamente queda olvidada, ya que llega “Before Your Finally Break”, single de adelanto, en donde colabora Bjorn “Speed” Strid, vocalista de Soilwork. Gran tema, que por momentos parece de los propios Soilwork, en donde encontramos todos los ingredientes que se podía esperar de la unión de el gran Bjorn con la banda.

“Catching The Fire” y “Unbreakable” bajan un poco el pistón y, porque no decirlo, la calidad. Dos temas que pasan como del montón. Uno más contundente y pesado, otro más meloso, pero los dos igualmente insustanciales.

“It Takes Me” recupera la velocidad y la “normalidad”. El riff es potente, aunque durante la estrofa de la sensación de que se estén conteniendo un poco, mientras que el estribillo vuelve a lo melódico. En la misma onda continúa “See What I See”, que en apenas 3 minutos nos deja sin aliento entre las veloces estrofas y los grandes estribillos. Otros de los mejores cortes del álbum.

“So Addicted” vuelve a bajarnos un poco de las nubes con sus numerosos cambios y su enrevesamiento, aunque a la postre sea una canción que se aprende a valorar en su justa medida con unas cuantas escuchas.

Y para cerrar tenemos “The Flame That Change The World”. Directa, precisa, contundente… En definitiva un buen tema para terminar un disco que, si bien tiene sus altibajos, demuestra un buen estado de forma de los suecos y nos regala un puñado de grandes temas. La lástima es que haya otros, pocos, que no estén tan a la altura. Aún así estamos ante un buen disco, que seguramente mejoraran en cuanto tengan la formación más asentada.

7/10

Tack-List: