¡Vuelven Soul Doctor! La banda que en 1999 fundara el mítico Tommy Heart (Heartlyne, V2, Zeno, Fair Warning) con su gran amigo Chris Lyne regresa dos años después de que se editara “For A Fistful of Love”, la que hasta el 28 de Septiembre era su última creación musical. “Blood Runes Cold”, que así se llama el LP, supone uno de las apuestas más ambiciosas hasta la fecha para el sello Metal Heaven, a la vez que se aleja un tanto de los estilos de las bandas en las que venía confiando, más cercanos a la vertiente más melódica del heavy metal. Veamos con qué son capaces de sorprendernos esta vez los berlineses…
En la escena rockera y metálica, en ocasiones se producen encuentros que marcarán las carreras musicales de sus protagonistas. Así, músicos como David Coverdale y Doug Aldritch, Mike Tramp y Vitto Bratta o Paul Stanley y Gene Simmons no serían lo mismo los unos sin los otros. En este sentido podemos afirmar que este punto lo comparten también Tommy Heart y su fiel amigo Chris Lyne, ya que desde su primer proyecto allá por 1986 el uno ha estado prácticamente siempre en los planes musicales del otro. En esta ocasión ambos vuelven a trabajar codo con codo para dar forma a un nuevo disco, producido por ellos mismos, que supondrá la cuarta entrega discográfica del dueto alemán.
Soul Doctor aúnan la clase y la finura de los clásicos ingleses. Bandas como Led Zeppelín, Whitesnake, Thin Lizzy o Bad Company están muy presentes en sus composiciones, pues no en vano crecieron junto a ellas y son influencia directa. Además, su música se complementa con lo mejor del espíritu hard rockero alemán, el de bandas como Bonfire, que crecieron al amparo de los años ochenta. Así suenan ellos. Espíritu añejo en pleno siglo XXI, un canto a aquellos años y a la memoria de los nostálgicos, a los que reniegan de los reciclados musicales tan de moda en los días que corren. Sonido puro hard rockero, guitarras que hablan…Así son Soul Doctor.
Desde el principio queda clara su propuesta. “Blood Runes Cold” es un tema sencillo, sin florituras, que tiene como protagonistas a la gran voz de Tommy y a los guitarreos de Chris, con una constante base por cuenta de Jeyy Runtenberg y Michael Wolpers al bajo y cajas respectivamente. Algunos toques de teclado ayudan a conformar un gran tema para abrir un gran disco. “Temptation” es un tema menos guitarrero, con mucha más presencia de teclados y con un aire más “pastelosete”, un bonito medio tiempo que añade diversidad al conjunto.
“Love in the Face of Danger” comienza con una parte de voz y piano que poco a poco irá introduciendo guitarras y bases. El tema se anima con cada segundo y estalla en un estribillo desenfadado, atrevido, y áltamente contagioso que se repite varias veces. Buen tema. “F.A.F.O.D” es un tema 100 % zeppeliano que vuelve a hacer protagonistas absolutos a Tommy y a Chris. A destacar esa Gibson distorsionada que parece cobrar vida por momentos. Algo así como un duelo vocal y guitarrero, muy buen tema. “Touch of Love” recuerda mucho a Deep Purple, no en vano el tema fue compuesto por Joe Lynn Turner, Glenn Hughes y el guitarrista Stuart Smith para Soul Doctor.
“The Ocean” es un corte muy tranquilo, no llega a ser balada, a voz, punteos y una ligera línea de instrumentos de viento de fondo. Tema de esos de cantar con los ojos cerrados dejándose llevar como por las olas del océano del que hablan. El espíritu rompecorazones regresa de la mano de “The Lie”, temazo rockero, animado y con guitarras sucias. Vieja escuela alemana. “Revolution” es otro de esos desconcertantes temas que hacen del disco un todo heterogéneo y altamente interesante. Comienza también con piano y voz recordándonos a viejas glorias de los 60 como The Beatles, para acabar endureciendo el tema con guitarra, alzando voz, base, y solo de guitarra. Si alguna banda hard rockera de nuestros días se atreviera a versionar un “Let it Be”, por ejemplo, estoy seguro de que el resultado no distaría mucho de este tema…
El disco toca a su fin con, esta vez sí, la balada del disco, “Justine”, y “Mr. Youngblood”, temazo con aires americanos y mucho ritmo, y por último el bonus track de la edición europea que no es otro que “Let’s Zep”, canción de más de 10 minutos en forma de medley de los mejores temas de los recientemente reunidos (¿temporalmente?) Led Zeppelín.
La banda ya tiene algunos importantes shows en su agenda como el Firefest IV inglés o el prestigioso festival melódico United Forces of Rock III, en Alemania, apoyado por el propio sello Metal Heaven. La última vez que nos visitaron fue en 2005 cuando nos presentaron su “For A Fistful of Love” en una gira en la que talonearon a Bob Catley (Mágnum) y actuaron en el desaparecido Nemelrock madrileño. Ahora con su nuevo disco se plantean empezar por una serie de shows en acústico para presentarlo, en principio por Alemania. Esperemos tener suerte y volver a disfrutar, una vez más y después de dos años, de la magia de Tommy Heart y Chris Lyne sobre un escenario, pues ambos conforman sin lugar a dudas una de las parejas más productivas que nos ha dejado el hard rock en el viejo continente.
Raúl del Amo
Temas: 01. Blood Runes Cold, 02. Temptation, 03. Laugh in the Face of Danger, 04. F.A.F.O.D, 05. Touch of Love, 06. The Ocean, 07. The Lie, 08. Revolution, 09. Justine, 10. Mr. Youngblood, 11. Let’s Zep (bonus track).