Tres años después de su anterior visita a España, los holandeses Textures se dejaron caer a finales del mes pasado por nuestro país. La cita en Barcelona tenía lugar en Mephisto, el día 30 de Marzo. Les acompañaban los franceses Outcast y My Own Private Alaska, cosa que resultó, a priori, no ser del agrado de todo el mundo, que consideraban que en comparación con conciertos recientes (junto con Uneven Structures o Sylosis), el cartel era algo flojo. Texto y Fotos: Marta Coscujuela |
No obstante, un aforo más que decente se congregó en la sala Mephisto. No todo el mundo había mostrado su conformidad con la elección de la sala cuando había sido anunciada, pero hay que tener en cuenta una vez más que si bien el metal en general, a excepción de unos pocos subgéneros, no tiene una acogida en nuestro país tan cálida como en otros puntos de nuestro continente, ésta todavía es más limitada cuando se trata de géneros como el metal progresivo o el djent. De hecho, en la cola pudimos comprobar que prácticamente todos los asistentes eran músicos y formaban parte de grupos de metal, la mayoría de ellos de subgéneros más o menos similares al de Textures. Una prueba más de que se trata de un estilo de música selecto y poco abierto al mundo algo más “mainstream”, como pueden ser otros tipos de metal, por lo menos dentro de nuestras fronteras.
La hora programada para la apertura de puertas era las 20.00, sin embargo a esa hora todavía podíamos escuchar, desde fuera, las pruebas de sonido. Por comentarios de la organización pudimos deducir que la causa de ese retraso habían sido las propias bandas, que habían llegado tarde a la sala. Sin duda, es el único reproche que les podemos hacer.Outcast comenzaron a tocar cuando todavía faltaba público por entrar a la sala. Tocaron unos treinta minutos de trash/death metal muy técnico que sorprendió a más de uno, ya que eran bastante desconocidos por el público que había acudido y que pareció satisfecho con la calidad que demostraban. Afortunadamente, pudimos desfrutar de una calidad de sonido muy superior al que en otras ocasiones esta misma sala nos ha brindado, pudiendo apreciar todos los instrumentos, tanto los potentes y técnicos riffs de guitarra y bajo, los solos de guitarra, la aplastante batería y su insistente doble bombo o la voz gutural.
Como decimos, todos los miembros del grupo contaban con una técnica espectacular, que se puede apreciar tanto en directo como en estudio. Sin embargo, en directo la fuerza que desprenden no acabó de traspasar del todo los límites del escenario. Tal vez en esta ocasión se debiera a que tenían poco espacio en el que desenvolverse y estuvieron bastante estáticos, sobretodo al principio (a excepción del cantante), pero lo que es cierto es que no hubo mucha conexión con un público que prefirió quedarse al fondo de la sala, dejando un importante hueco enfrente del escenario en el que unos pocos fotógrafos se medían con los focos de Mephisto. Sin duda este es un fenómeno habitual en lo que a teloneros se refiere, sobretodo si el público no está familiarizado con el grupo sobre las tablas, y sobretodo en casos como este, en el que los músicos deben estar tan concentrados en la difícil técnica que le requiere su música que inevitablemente deben prestar menos atención a lo que ocurre más allá de su terreno.
El repertorio consistió en un primer tema de su penúltimo trabajo “Selfinjected reality”, y cuatro de su último lanzamiento “Awaken The Reason”.
Setlist:
Fragmented Memories
Abysmal
Isolation
Elements
Spin Angular Momenta
Los siguientes al saltar al escenario fueron los también franceses My Own Private Alaska, y sin duda fueron la gran sorpresa de la noche. Algunos de los presentes habían escuchado temas de estudio de esta banda al haber sido anunciados para este concierto y no habían quedado muy convencidos, pero la opinión de muchos de ellos cambió con su actuación. Antes incluso de empezar a tocar el público ya empezó a sentir curiosidad por el panorama que se construía sobre las tablas: tan solo una batería, un teclado y un micrófono frente a un taburete, entre cuadros que adornaban el escenario.
Atípicamente, lo primero que hicieron, antes incluso de empezar a tocar, fue agradecer a toda la organización, las bandas, etc. y advertir que no hablaban mucho durante su show. Estas palabras ya dejaban ver que íbamos a escuchar algo sincero. Y efectivamente, una vez comenzaron a tocar, ya pudimos sentir la autenticidad de esa música a medias entre clásica y screamo, muy vivida y muy sentida tanto por los músicos como por el público.
Los primeros no paraban de moverse, el vocalista constantemente se levantaba de su taburete y se volvía a sentar, siguiendo con fuerza el ritmo con sus pies y aullando los screams que salían directos de su estómago. Batería y teclista golpeaban sus instrumentos con fuerza y a cada golpe su cuerpo expresaba la pasión de la música. El público, por su parte, también se entregó, implicándose con el grupo al cien por cien, gritando cada vez que el silencio entre canciones les daba la ocasión.
En el último tema “I am an island” pidieron al público que si necesitaban gritar lo hiciesen, que lo entendían teniendo en cuenta la situación de nuestro país. Y así lo hicieron los presentes, que quedaron tan impresionados que cuando terminó el concierto no dudaron en pedir más temas, aún sabiendo que los teloneros nunca hacen encores. La mayoría de los temas del setlist provenían de su trabajo Amen, aunque también tocaron algunos inéditos.
Setlist.
After You
Amen
Where Will Be
Anchorage
Your shelter
Innocent
I am an Island
Y por fin llegó la hora de Textures, que salieron al escenario ovacionados de uno en uno, como si de jugadores de fútbol saltando al campo se tratase. Con Surreal State of Enlightenment fueron situándose sobre el escenario ante un público impaciente por escuchar cómo sonaban las nuevas incorporaciones al grupo: el vocalista Daniel de Jongh y el teclista Uri Dijk. Lejos de decepcionar, el público quedo asombrado con el carisma de ambos, que demostraron ante toda la sala que son dignos sucesores de Eric Kalsbeek y Richard Rietdijk, respectivamente.
Todos los miembros del grupo se entregaron completamente al público, pese a la dificultad de los temas que interpretaban, y Daniel demostró ser un perfecto frontmant, interactuando siempre con el público y sin perder nunca su sonrisa. Además, su interpretación vocal fue impresionante, tanto en limpios como en guturales, sabiendo imprimir en cada momento la intención adecuada en su voz. Igual de acertados estuvieron los demás miembros del grupo. Bart Hennephof y Jochem Jacobs a las guitarras y coros, Remko Tielemans al bajo y el impresionante Stef Broks a la batería tocaban con gran entrega sus instrumentos, lo que llegó a costarle una cuerda a Jochem.
El público también se implico y llegó a formar un pogo mientras sonaba Stream Of Consciousness, creando un círculo en el que la gente se lanzaba los unos contra los otros. Danien respondió a esto organizando un “wall of death”, dividiendo el público en dos mitades y haciéndolas retirarse hacia los lados, para correr y chocarse entre ellas a su señal.Uno de los momentos más emotivos del show llegó cuando tocaron la legendaria Awake, que fue aclamada coreada al unísono por todo el público, ampliando la sempiterna sonrisa en la cara de los músicos que parecían muy satisfechos con el público de esa noche.
Después de una pausa en la que, en lugar de desaparecer como es habitual, se quedaron sentados sobre el escenario, llegó otro gran momento cuando arrancaron con Reaching Home, uno de los pocos temas nuevos que tocaron de su último CD “Dualism”, que también fue cantada por gran parte de los presentes.
Antes de terminar el concierto con un tema “para volver loco a todo el mundo” (Laments of an Icarus), agradecieron a toda la organización y a las bandas y prometieron volver en breve “y tocar dos horas y media”, ya que, como había recordado Daniel al principio, ya hacía tres años que no pasaban por nuestro país (aunque el año pasado habrían tocado en el Noise Friends Fest de no haber sido este cancelado). No cabe duda de que después del gran concierto que ofrecieron los estaremos esperando con avidez.
El setlist consistió en un repaso a todos los trabajos de su discografía, aunque muchos de los presentes habríamos agradecido más temas de su último disco Dualism, tal vez la más completa de sus obras.
Texto y Fotos: Marta Coscujuela
Setlist de Textures:
Surreal State of Enligtenment
Regenesis
Storm Warning
Stream of Consciousness
Helments/polars
Sanguine Draws the Oath
Consonant Hemispheres
Awake
Old Days Born Anew
Swandive
–
Reaching Home
Singularity
Laments of an Icarus