Udo Dirkschneider nació un 6 de abril de 1952 en Wuppertal (Alemania) y con él la esencia de lo que se convertiría, años más tarde, en uno de los bastiones del heavy metal mundial. No en vano, este alemán fue miembro fundador de los históricos ACCEPT con los que debutó en 1979 con aquel “Accept” al que le siguieron los legendarios “I’m a rebel” (1980), “Breaker” (1981), “Restless and wild” (1982) (incluyendo su sorprendente “Fast as a shark”) y su gran obra “Balls to the wall” (1983).
Por aquel entonces ACCEPT se había convertido en uno de los máximos exponentes del género y todavía les quedaba en la recámara fuerzas suficientes como para parir una joya llamada “Metal Heart”(1985) y “Russian Roulette” (1986) tras el cual empezaron a perder fuelle, hecho que, en parte, precipitó la amistosa marcha de UDO para formar su proyecto en solitario.
Así, UDO debutaba con aquel “Animal House” (1987), un disco que curiosamente estuvo compuesto por la banda ACCEPT y que realmente superó cualquier expectativa. A ese espectacular debut le siguieron “Mean Machine” (1988), “Faceless World” (1990) y “Timebomb” (1991). Por lo visto la cosa no acababa de arrancar y fue entonces cuando UDO decidió volver a ACCEPT para parir otra buena obra como fue “Objection Overruled” (1993) acompañados de los desastrosos “Death Row” (1994) y “Predator” (1996), discos que no sirvieron para otra cosa que para reafirmar que el proyecto ACCEPT estaba más que consumido.
De este modo, en el año 1997 UDO reprende su carrera en solitario y lo hace acompañado por 2 ex – ACCEPT (Stefan Kaufmann y Stefan Schwarzmann) y con una declaración de intenciones titulada “Solid” (1997) seguida del irregular “No limits” (1998) y del potente “Holy” (1999) (esta vez ya sin Schwarzmann).
La potente banda se acababa de configurar con Igor Glandola (guitarra), Fitty Wienhold (bajo) y Lorenzo Milani (batería) y fue a partir de ese momento en que UDO recuperó de forma definitiva el sonido clásico de ACCEPT, o lo que vendría a ser la continuidad lógica de la referida banda.
“Man and Machine” (2002) también resultó ser un gran disco y a él le acompañó una gran gira donde todos los presentes pudimos comprobar qué significa tener a una gran banda de heavy metal en el escenario. Sonaban compactos, poderosos y con muchísima actitud.
“Thunderball” (2004) confirmaba las sospechas. UDO endurecía su sonido y seguía al pie del cañón con más energía que nunca y lo confirmaba con “Mission No.X” (con cambio de batería incluído).
La rotundidad de UDO se hizo patente con “Mastercutor” (2007), disco precedido por un EP de adelanto (igual que ha hecho ahora) y que se vio acompañado por una exitosa gira que se vio recogida en un DVD y doble CD “Mastercutor Alive” (2008).
Ahora, a sus 57 años, UDO reproduce su última jugada, a saber, presentación de EP “Infected” en junio y publicación de “DOMINATOR” en agosto, discazo que vuelve a reproducir los clásicos cánones de la banda y que servirá para ponerle el listón muy alto a sus colegas ACCEPT con su anunciada resurrección.
DOMINATOR rezuma UDO por todos costados y los más escépticos podrán decir que es “más de lo mismo” pero no hay que olvidar que la grandeza de los héroes está en librar y ganar las batallas y si UDO sigue empeñado en reinventar siempre el mismo disco es porque, en definitiva, es lo que los fans esperamos de él.
DOMINATOR presenta un poco de todo. Tenemos poderosos medios tiempos como “The bogeyman”, “Black and White” (puro ACCEPT), “Heavy Metal Heaven”, “Doom ride” o baladas como “Stillness of time” (exquisita) o la dramática “Whispers in the dark”. Pero también hay cabida para los temas acelerados y feroces como “DOMINATOR” (cargada de furia), la powermetalera “Infected” o “Speed Demon” (la más agresiva del disco). Y, por qué no decirlo, también tenemos un corte algo más vacilón como es “Devil’s Rendezvous”, parecido a aquel “Poezd Po Rossi”, es decir, con retazos soviéticos que supongo siga la intención final de seguir mimando a su querido público ruso (no en vano ya publicó su “Live in Russia” (2001).
En definitiva, un disco que reproduce la misma estructura que sus recientes publicaciones pero que no pierde ni un ápice de rigor, profesionalidad, frescura, potencia y, sobretodo, carisma. La banda Udo, Igor, Steffan, Fitty y Francesco ejecutan su labor de forma incuestionable y, nuevamente, volvemos a tener nuevo material de una banda que espero siga regalándonos piezas de esta categoría durante muchos años.
Marcel.lí Dreamevil
Temas:01. The Bogeyman, 02. Dominator, 03. Black And White, 04. Infected, 05. Heavy Metal Heaven, 06. Doom Ride, 07. Stillness Of Time, 08. Devil’s Rendezvous, 09. Speed Demon,10. Whispers In The Dark