Sin previo aviso. Andrew Stockdale lanzó a finales del año pasado un nuevo disco: Rock’nRoll Baby. Según sus propias palabras es una especie de celebración de su primer aniversario sin beber, una celebración de su sobriedad.
Así, de la nada y con esa motivación Rock ‘n’ Roll Baby apareció. Sin promoción, sin soporte en Spotify ni otros medios digitales al principio. Nula promoción del álbum a excepción hecha de las redes sociales de Andrew. No es nada nuevo en la biografía de Sotckdale, Keep Movin’ es otro ejemplo de ello. Ese disco se suponía iba a ser el tercer LP de Wolfmother pero todo se fue al carajo y Andrew lo lanzó como solo álbum. La banda ha dado bandazos en su carrera, dificultades para tener una formación estable, máximas expectativas al lanzar ese maravillos disco debut en 2006 que los llevó a telonear a Pearl Jam en su gira. Gira que pasó por Badalona. La banda sonaba de maravilla, Eddie Vedder estaba enamorado de ellos.
Recuerdo el concierto y los piropos que Vedder les lanzaba: “He girado con un montón de bandas y, honestamente esta es una de las mejores”. Acto seguido atacarían Baba O’Riley con Stockdale cantando a dúo con Eddie. Fantástico.
Volviendo al disco: Rock’nRoll Baby es el más corto en la discografía de la banda: contiene 7 canciones despachadas en apenas 23 minutos de duración. Algunos de estos temas ya habían aparecido como singles hace un tiempo: Special Lady y Freedom is mine se remontan allá por 2017. Sorprende la decisión de que otro de los single lanzados hace unos meses, Chase the feeling, junto a Chris Cester de Jet, ni siquiera aparezca en el disco. Desconocemos los motivos.
Todo en este álbum supura a “demo” a disco en bruto. Probablemente esa sea la intención. Algunos temas fueron grabados por Stockdale utilizando el programa Garageband y, aunque después se grabaron en estudio, las mezclas utilizadas fueron las que ya venían de casa hechas con el software mencionado. Otras, como Spanish Rose o Higher se remontan a 2019 y fueron grabadas en el estudio de Dave Grohl 606 Studios allá en L.A.
Y a todo esto como respira este nuevo álbum? Bueno, no es sencillo definirlo. En primeras escuchas me pareció un disco por hacer, lanzado a prisa y corriendo pero, conforme pasan las escuchas y ves el background las piezas empiezan a encajar.
De entrada Higher o Special Lady (totalmente opuestas la una de la otra) me parecen lo mejor del álbum. La primera por esos pesados riffs marca de la casa, la pesadez Sabbathiana que desprende. La segunda, por ser un trallazo funkadelico, simple, pero efectivo, una guitarra sucia, distorsionada realmente adictiva. Ecos al Beat It de Michael Jackson (y la infalible guitarra de Eddie Van Halen) y unos coros muy daftpunkeros hacen muy adicticvo este tema.
La presencia Black Sabbath se hace aun más patente en Rock’n Roll Survivor. Stockdale le da la mano a Ozzy en algunas inflexiones vocales. Resulta un tema que suena a Wolfmother de siempre, en una capa inferior, en un riff totalmente marcado por el estilo característico de la banda. Hot Night posee un riff fuzzero y distorsionado interesante pero el tema pierde algo de fuelle respecto los dos primeros temas, quedando algo plano.
Kick Ass posee una intro poderosa, un bajo muy presente y un teclado Hammond que envuelve el estribillo de forma muy efectiva. El tema más 70’s, bombástico. Aún así, no termina de despegar como debería. Quizás con algo más de evolución el tema podía haber sido mayor, mejor, más redondo.
De corte clásico, con punteos muy cercanos al NWOBHM, Spanish Rose se presenta con muy buenas guitarras casi como lametazos metálicos y una gran presencia vocal por parte de Andrew. Ya mencionamos que Freedom is Mine apareció hará cosa de tres años, es de las canciones más reconocibles de la banda. Muy intensa, muy de la primera época de Wolfmother presenta un estribillo cuasi mántrico, una declaración por parte de Stockdale de hacer lo que le venga en gana. Cosa que es preciosamente lo que ha hecho en este disco.
En apenas 23 minutos el plástico queda despachado, cerrado con el tema más interesante del disco por su intención más arriesgada: Special Lady. Un tributo a los años 80 actualizado con los elementos própios de la banda.
Mucho se ha vapuleado esta nueva entrega de Wolfmother y la verdad es que no es un excelente trabajo pero si me parece un reflejo de un momento, de un estado de ánimo. Suena garajero porqué lo es, suena a demo porque esa es precisamente su esencia. Quizás valorando la motivación del álbum se pueda paladear mejor el resultado final. Este disco no pasará a ser de lo mejorcito, ni mucho menos, que ha parido Stockdale y, quizás, sabiendo la calidad que tiene este tipo se le podría pedir más pero aun así es un disco disfrutable. No ganará nuevos adeptos a la causa, seguramente los perderá, pero a mí me ha convencido.
Marcel Palagós
Temas:
1.Higher
2.Rock’nRoll Survivor
3.Hot Night
4.Kick Ass
5.Spanish Rose
6.Freedom is Mine
7.Special Lady