Cincuenta y cuatro años contempla la carrera intermitente de una de las referencias punteras del rock progresivo, una banda por donde ha pasado claras eminencias musicales y que ahora vuelve con nueva obra de estudio, tras la desaparición de Chris Squire, quien siempre fue un pilar imprescindible.
Toni Marchante
Tras la muerte de Squire el proyecto continúa, liderado por Steve Howe a la guitarra, el batería Alan White quien fue escudero siempre de Squire, complementándose con Jon Davison (ex Glass Hammer) a la voz, en su papel de darle los tintes agudos al estilo Jon Anderson.
Se hace cargo de los teclados Geoff Downes, quien pasó por la banda fugazmente en 1980 en aquel maravilloso “Drama”. El también teclista de Asia, plasma claramente su visión sinfónica de tintes más pop, aunque yo en Yes siempre he preferido las manos y el sonido de Rick Wakeman.
La alineación la completa Billy Sherwood al bajo, quien ante la insistencia de Squire, pasó a sustituirle, mientras libraba su lucha contra la leucemia perdiéndola al final. También cuentan con la aportación de Jay Schellen, percusionista habitual en sus últimos conciertos en vivo.
Yes – The Ice Bridge
“The Quest” cuenta con la portada una vez más del ilustrador Roger Dean, habitual de la banda y el álbum contiene 11 canciones, ocho en el CD principal con 3 pistas adicionales en un CD extra. También está disponible en vinilo y 5.1 Blu-ray y CD, y edición limitada de lujo 2-LP y 2-CD más Blu-ray.
De la producción se ha encargado Steve Howe, quien ha optado por incluir en algunos temas aportes orquestales. Hablamos de un disco que comenzó a trabajarse antes de la pandemia y que se completó a la distancia.
El disco comienza con “The Ice Bridge”, un tema moderno que capta la esencia de Yes, con la voz de Jon Davison en tonos de su tocayo Anderson, resaltando también el trabajo en la guitarra de Steve Howe y los teclados de Geoff Downes que le da un toque más pop.
“Dare to Know” es un tema con un inicio al estilo de los primeros Camel que posteriormente se ornamenta con variados escenarios orquestales dotando a la banda de mayor diversidad, este recurso también se utiliza en “Minus the man” con un carácter más ambiental.
Yes – Dare to know
Con “Leave Well Alone” avivan un poco el tempo del disco, mostrándonos escenarios sonoros diversos donde podemos disfrutar del reconocible estilo de Steve Howe a la guitarra, además de las buenas voces de Jon Davison.
Mientras en “The Western edge” destacan el dúo a las voces entre Jon Davison y Sherwood, así como el trabajo de Howe y Downes a la guitarra y teclados como bases principales, en “Future Memories” son Jon Davison y Steve Howe los que se llevan el protagonismo, en un precioso tema acústico.
“Music to my ears” resulta ser de los temas más comerciales con un estribillo muy reconocible y atractivo, al igual que “A Living Island”, un bonito corte para terminar el disco, melódico y sin excesivas complicaciones.
La edición especial nos ofrece tres canciones adicionales a modo de bonus track. “Sister Sleeping Soul” un medio tiempo que perfectamente podría haber entrado en el disco; en “Mystery Tour” homenajean a The Beatles, cerrando con “Damaged world”.
Yes – Leave well alone
Hablamos de un buen disco que irradia calidad por los cuatro costados, pero le falta quizás contundencia. El trabajo se mueve claramente en las suaves melodías, pero sin desarrollos progresivos complejos o melodías que sorprendan emocionalmente.
Aunque por otro lado, no deja de ser un placer escuchar la elegancia y los detalles que se descubren en cada una de las canciones. Las composiciones son frescas y sinceras, mantienen la denominación de origen de la banda, incorporando un disco más, dentro de su dilatada carrera con más de una veintena de discos de estudio.
Un disco lejos de la calidad de sus grandes obras y algo distinto. Recordemos que Yes se han salido del guion en varias ocasiones (“Drama” o “90125” por ejemplo) sorprendiéndonos, pero este no pasa de ser un disco disfrutable, sin más pretensiones.
Tráiler del álbum
Siempre es una alegría poder ver que Yes sigue adelante a pesar de tantos contratiempos, la marca es una gran ventaja y con el plantel de músicos que la componen, es imposible que no saquen cosas buenas; sobre todo, cuando vienen capitaneadas por el gran Steve Howe.
Sólo esperamos volver a la normalidad y que puedan realizar la gira de presentación de este álbum, que esperamos recale por nuestro país, donde podremos disfrutar, además de estas canciones, de sus éxitos de siempre.
Toni Marchante
Temas:
CD1:
01. The Ice Bridge
02. Dare to Know
03. Minus the Man
04. Leave Well Alone
05. The Western Edge
06. Future Memories
07. Music To My Ears
08. A Living Island
CD2:
01. Sister Sleeping Soul
02. Mystery Tour
03. Damaged World
